❁ « Everlasting - Chaennie » ❁

•54•

Estuve un rato con mamá, hablando de cualquier otra cosa que no fuese tan importante, simplemente quería pasar un rato a su lado y la verdad, sentí que me había ayudado bastante poder estarlo.

Cuando ya Lisa dijo que había pasado mucho tiempo, no tuve que hacer otra cosa más que salir de ahí, sin embargo, antes de hacerlo, dijo que quería hablar, así que accedí.

Jennie había ido a comprar unas cosas, así que quedamos solo las dos. Fuimos a la cafetería y nos sentamos, estaba un poco solo, pero el viejo televisor que colgaba del techo mataba el silencio que podía producirse.

Lily tenía una pequeña sonrisa, me miraba como si hubiese logrado algo y estuviese orgullosa de mi, de cierta forma lo entendí, pensé que estaba alegre porque ya no estaba como los primero días y estaba más tranquila.

—Estoy feliz de que estés bien ¿Que tal te fue con Jendeukie?—

— ¿No te dijo?—

—No, hablamos de otras cosas, pero siendo tú quien metió la pata, te pregunto. —

—Ya entendí que soy estúpida, no es necesario recordarlo a cada rato, pero, creo que salió bien, sin embargo, Jen hizo como si nada hubiese pasado y yo al menos esperaba que no fuese tan cercana así sea por unas horas. —

—Pues, supongo que es porque te ama más de lo que podría molestarse, ¿No crees?—

—Supongo, pero ¿En serio no te dijo algo al respecto?—

—Que no, hablamos de cómo le iba en su trabajo y todo lo demás, ella está bien, pero dejando eso a un lado, ¿te quedarás hoy aquí?—

— ¿Me permites estarlo?—

—No, debes quedarte unos días más a casa, es muy importante tomar un respiro para volver a cuidar de mamá. —

—Pero es mi mamá, no puedes prohibirme venir a verla. —

—Soy como tú hermana, si puedo, además, hazme caso, descansa en casa por hoy y si quieres, mañana vienes, estaré con los brazos abiertos. —

— ¿Y tu cuando podrás descansar? También haz hecho mucho estos días. —

—Estos días serán muy agitados, no creo que vaya a descansar. —

— ¿Por qué? ¿Trabajas desde aquí?—

—Eh, no, es que no puedo ayudar a mamá sola, necesito ayuda, por lo que, si vendrás, necesitarás de mí. —

—Pero si hay enfermeras. —

—Solo le asignaron dos, una en la mañana y otra por la noche, entre dos no se puede, es muy agotador, hablo en serio ChaeYoung, necesitarás de mi. — Para ese momento, su sonrisa no estaba, su rostro expresaba seriedad.

—De acuerdo, pero si te sientes cansada, avísame y vendré de una vez. —

—Ya lo sé, terca, te espero mañana, Jen ya debe venir en camino. —

—Es que ya estoy aquí. — La voz de Jen hizo que nos asustara.

—Joder, que silenciosa. — Reclamó Lisa, lo cual Nini responde con una risa. —Pueden irse, necesito recuperar mi poca valentía. —

—Lalisa, no tienes. — Respondí.

—Como si tu la tuvieras. —

—Pero al menos lo tengo claro y no lo busco. —

—Te cobraré por los días que he estado ayudando a SunYoung y no será barato. —

—Está bien, me iré, pero recuerda, puedes avisarme en cualquier momento si quieres ir a tu casa. —

—Sí, sí, lo recordaré. —

—Lis, gracias por la ayuda. — Dijo Jen.

—Estoy para cualquier cosa y escríbeme si ChaeYoung está necia. —

—Lo haré. — Respondió Jen vacilante, quien hizo un ademán con su mano y salió de la cafetería.

—No soy necia y nos vemos mañana, te amo. —

—También te amo, necia. — Lisa sacó la lengua, a lo cual respondí de la misma manera, luego de eso,

Jennie esperaba en la entrada del hospital, estaba mirando con mucha atención el paisaje urbano que tenía frente a ella, estaba muy metida en él, porque cuando tomé su mano, dio un pequeño salto.

—No soy la muerte llevándote hacía la oscuridad. — Dije en broma.

—No lo eres, pero me encantaría que seas tú quien me lleve. —

Me miró directamente a los ojos, sentí que podía darme un ataque en el corazón. Sonrió cuando notó lo que había causado, depositó un beso en mi mejilla y empezamos a caminar a casa.

—Preciosa. —

—Dime. — Respondí.

—Tengo que enseñarte algo. —