❁ 𝟱𝟬 𝐑𝐎𝐒𝐀𝐒 𝐃𝐄 𝐒𝐏𝐄𝐄𝐃 ❁

❁ Capítulo 12 ❁

Días después, aún sentía que alguien me estaba persiguiendo y observando mis movimientos. La situación hacía que me diera ansiedad constantemente. Todo se volvió extraño desde aquel día que Sonic me contó la historia.

Estaba escribiendo en la computadora, y me ordenaron llevar unos papeles importantes a un oficinista. Seguí las órdenes y los dejé donde me indicaron. Después de regresar, me senté y en seguida, mi teléfono sonó, vi el número y no estaba dentro de mis contactos, pero la curiosidad me mató y decidí contestar.
Al presionar el botón, solo escuchaba una respiración, y podía deducir que estaba agitada. Era la misma respiración que había escuchado hace unas semanas, y colgué sin dudarlo, me pone enferma al escucharlo.

Después de eso, el día pasó como cualquier día, estaba a punto de irme cuando recibí un mensaje de Speed pidiéndome que fuera a su oficina. ¿Para que querrá que esté ahí? Bueno, detuve mi camino y fui sin dudarlo.

Entré y él estaba sentado en la silla, y tenía los ojos cerrados.

— Desde que me dijiste sobre que alguien nos seguía, has estado rara, ¿pasa algo?

— No, no pasa nada, es solo que el estrés se me ha estado acumulando.

Y me sentía mal por haberle mentido sobre mi estado, realmente es necesario que él sepa sobre lo de mi ex, está en tremendo peligro y mi estúpida mente débil no se lo puede decir.
Procedí a sentarme en su escritorio mientras veía por la ventana la ciudad luminosa.

Sonic se levantó y se acercó a mi.

— Te pusiste el perfume que tanto me gusta, ¿no es así? — preguntó con una sonrisa pícara.

— Si, me lo pongo de vez en cuando.

— Eso lo sé, todos los días que me acerco a ti, puedo percibir tu olor. Te ayudaré un poco a relajarte, tener estrés acumulado no es lo más sano que existe.

Comenzó a acariciar mis mejillas con ambas manos, y me sentía nerviosa y a la vez emocionada por lo que podría pasar después. No es simple coincidencia que él quiera relajarme en estos instantes, y más que el edificio ya estaba solo en su totalidad.

Acercó sus labios a mi pómulo izquierdo, y fue besando hasta llegar a su objetivo, mis labios. Se juntaron y él comenzó a pegarse más a mi cuerpo. Sentía su calor corporal chocar con el mío, y simplemente era la sensación que me calmaba y hacia que mi mente se pusiera en blanco.

Después de besarnos unos minutos, sus labios bajaron a mi cuello, y sentía un cosquilleo por todo mi cuerpo, era una sensación nueva para mi. Nunca lo experimenté, nunca había llegado tan lejos de estar demasiado cerca de la otra persona que me atrae.
Dejé mis pensamientos y me dejé llevar, no pude evitar jadear un poco, de verdad, esta sensación era satisfactoria.

Sus manos bajaban por mis hombros y sostuvieron mis brazos por unos minutos. Luego, se dirigieron a mis piernas y por ende, estaban descubiertas, y nuestras pieles hicieron contacto directamente. Como lo había dicho, era una nueva sensación para mi, y no pude evitar que un jadeo más fuerte saliera de mis labios.
Se detuvo y su mirada se centró en mis ojos, al verlo, sus ojos ya no brillaban tanto como suelo percibir. El color de sus iris eran diferentes, era un verde oscuro y reflejaba otro sentimiento al de siempre.

No sé si espantarme de esto y dejarme llevar de nuevo.

— Al parecer se nota que aún no has experimentado lo que es tener contacto con otra persona.— mencionó mientras su mano subía por mi pierna.

Cerré los ojos evitando que otro jadeo salga de mi. Me contuve, pero su mano ya había llegado a mi entrepierna. Y fue así como todo cambió.

En ese momento estaba aterrada y me sentía un poco confundida. Creo que aún no estoy lista para mi primera vez.