❁ 𝟱𝟬 𝐑𝐎𝐒𝐀𝐒 𝐃𝐄 𝐒𝐏𝐄𝐄𝐃 ❁

❁ Capítulo 13 ❁

Estaba revisando algunos papeles que me pidieron que lo hiciera, en cuestión de lo gramatical, que no faltaran acentos, comas, etcétera.

Sonic no me explicó nada sobre esa foto de aquel día, supongo que es algo personal que aún no está listo para contarme. No lo sé, pero por el momento no le preguntaré sobre eso.

A pesar de que Shadow no me ha llamado ni me ha molestado, se me está haciendo un poco extraño. Por lo general, siempre persigue su objetivo, y nunca se detiene en su camino. Probablemente solo se ha cansado y me ha olvidado para siempre.

Quiero denunciarlo por acoso, pero aún me tiene atada, como dije alguna vez, me había amenazado a muerte si decía algo sobre él. Mi mente está confundida y ya no sé qué debo hacer ante esto.

Esta noche, Sonic me invitó a su casa, quería pasar un rato más conmigo y lo acepté. No sé que vaya a suceder ahí, pero estoy segura que pasarán más que besos y abrazos.

La tarde ya había pasado, y ya era hora de ir al hogar. Aunque ese no era mi caso.

Fui a su oficina y lo esperé a que tuviera su escritorio limpio, además de arreglar todas las cosas para volver mañana a trabajar y no ordenar a primera hora las plumas y papeles.

— El trabajo ha incrementado mucho estos últimos días y me mantiene agotado todo el tiempo. Pero se me quita cuando estoy contigo, no lo sé, me vuelvo a regenerar y todo mi cuerpo se siente con energía.— dijo mirándome a los ojos.

Yo solamente sonreí.

Acabó, y fuimos directo al auto. Nos subimos y nos dirigimos a su hogar. Todo marchaba bien, hablábamos de muchas cosas, sobre más experiencias que tuvo de niño, su primera fiesta y los conflictos a los que se enfrentó, su etapa más rebelde de toda su vida. Me encantaba escucharlo y le prestaba toda la atención.

Llegamos y ambos nos sentamos en el sofá. Me invitó una copa de vino y con gusto acepté. No paramos de hablar, solo que esta vez, una bebida alcohólica nos acompañaba.

Minutos pasaron y empezaba a sentirme un poco mal, a lo que le llaman estar "happy". Mi consciencia no estaba al 100%, pero aún no perdía la mente. Ambos nos miramos y de nuevo, noté como el color de sus ojos se oscurecían. Creí que era de mi imaginación, así que lo dejé pasar y no me importo.

Se levantó y me dijo que iba a buscar algo de su recámara. Lo esperé en el mismo lugar mientras bebía mas vino.

Regresó y tenía una hoja en su mano. No sé que está pasando en este preciso momento, ¿por qué en este momento me está mostrando una hoja que probablemente sea acerca del trabajo?

— Necesito que leas lo siguiente.— mencionó con una voz grave, era ronca.

Empecé a leerlo, y mientras más avanzaba, tenía más miedo de lo que llegara a pasar. Hasta al final había un espacio donde la respuesta era opcional, y ahí mismo debías contestar un "si" o un "no", junto con mi firma.

¿Qué clase de persona es? ¿Está ocultando muchos secretos?

— Tus ojos ya no están pegados al papel, lo cual significa que has acabado de leer la hoja. ¿Aceptas? — preguntó dándome una pluma.- No me digas tu respuesta en voz alta, solo escribe.

Estaba asustada y mi mente se congeló por completo. No podía pensar con claridad las cosas, y esta situación hacía que me desesperara un poco de lo normal.

¿Ser una esclava sexual? ¿Qué rayos? Me pregunto... ¿Qué secretos oculta? ¿Me ha estado engañando todo este tiempo solo para que sea su esclava sexual?

Es mi pareja, y lo quiero mucho, pero esto ha llegado demasiado lejos. Este papel que tengo en mis manos me hablaba mucho de la personalidad de Sonic, es posesivo, pero no llega a lastimar a las demás personas. Entonces no creo que su intención sea lastimar y romper mi corazón.

— Ese papel, nadie más lo ha leído, y lo creé para la persona que fuera correcta, con la que tenía claro que estaré con esa persona el resto de mi vida.

Entonces, él creé que soy el amor de su vida.

Sin pensar más, decidí impregnar mi respuesta. No sé si estaba haciendo lo correcto, pero había escrito un "si".

Le entregué la hoja, inmediatamente quiso observar mi respuesta. Dejó la hoja en una mesa, y se dirigió a mi.

— Si hubieras respondido que no, probablemente no te vería como el amor de mi vida. Había leído en alguna parte, que la persona que realmente te ama, soporta muchas cosas, claro, todo con su límite. Con lo que quiero llegar es que a esa persona no le importa tus errores, tu personalidad más fría y oscura, ¿me comprendes?

— Si, lo entiendo, ¿a qué quieres llegar con esto?

— Soy una persona que no puede llegar a controlar sus emociones, si siento tristeza, no puedo levantarme solo y el abandono me consume. Si siento alegría, es tanto que a veces no logro ver lo que puede llegar a pasar después. Un ejemplo es un casino, si me emociono ganando dinero, no estoy consciente que probablemente en una partida puedo perder. Y así, con todas mis emociones. Eso incluye mi atracción hacia ti.

— ¿Me deseas? — pregunté mirándolo.

— Exactamente, y es algo que no puedo controlar.

— ¿Eso explica el cambio de color de tus ojos?

— Si...— respondió frío.

Se acercó más a mi, y sus labios se juntaron con los míos. No sabía que sentir, eran muchas emociones mezcladas en una sola, todo mi cuerpo se sentía débil, y a la vez con mucha energía, crecieron mis ganas de abrazarlo, pero a la vez quiero llegar más que un abrazo. Mi mente explotará con tantas emociones experimentadas en este preciso momento.

Como lo fue en la oficina, sus manos de nuevo recorrieron mis brazos, y sus labios se deslizaron hasta llegar a mi cuello. Otra vez sentí todo ese cosquilleo en todo mi cuerpo, suspiraba y jadeaba al mismo tiempo, no sé como lo hacía, simplemente me dejé llevar en ese entonces.

Sus manos viajaron hasta mas piernas, y ambas tocaban mis dos piernas, y se deslizaban de arriba a abajo. Mi reacción fue que mi cuerpo empezó a temblar, y jadeaba un poco más fuerte.

Pronto, sentí que bajaba mi falda lentamente, tenía miedo, la verdad, pero a la vez estaba emocionada. Su cuerpo, se pegó al mío y me acostó en el sofá. Seguía besando mi cuello, hasta que sentí que mordió.

Un momento tan erótico y amoroso.

Continuará

Capítulo 13