13. Mecanismos.

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Lily sonrió suavemente cuando al abrir los ojos, Ted estaba recargado en el umbral, con los brazos cruzados, observándola dormir, estaba tranquilo, aunque se seguía viendo bastante cansado, la joven se incorporó, se hizo a un lado para que él se sentara junto a ella en la cama.

—Deberías dormir un poco –murmuró Lily.

—Cuando vuelvas a casa lo haré, mientras tanto, tengo que asegurarme que todo esté bien contigo.

—Todo está bien conmigo, Ted, no tienes que sobreactuar tu papel.

—Me importas más de lo que piensas, Lily –su mano fue hasta su mejilla, acercó su rostro al de ella.

Su piel se erizó, un escalofrío la recorrió y su vista no pudo apartarse de la de él ¿por qué quería que la besara? Si ella no tenía ningún sentimiento por él ¿sería acaso que lo que Scorpius repetía hasta el cansancio era cierto y ella comenzaba a ser parte de eso?

Posiblemente eran sus propias hormonas manifestándose de esa forma, además, Ted no estaba para nada de mal ver, eso y con lo cerca que últimamente lo tenía.

—Entonces duerme un poco –se apartó de él.

—Ya te lo dije –negó –no voy a apartarme de ti.

—Nadie dijo que te fueras a casa a dormir –levantó la vista hasta él y sonrió, se hizo aún más a un lado y palmeó la cama –duerme un poco.

—No creo poder dormir, pero bien, sólo porque me lo pides tú, lo intentaré.

Lily rió divertida, tendría que estar muy cansado, porque en menos de cinco minutos, su respiración se acompasó, lo observó atenta, dándose la oportunidad, como le había dicho Scorpius, de observarlo detenidamente, ver cada detalle de él, y aunque él no le gustaba, admitía que le gustaba lo que veía.

Se recostó de lado junto a él, y sonrió, un rato después, los parpados se le hicieron cada vez más pesados, e incapaz de soportar más despierta, se arrastró más contra él, y colocó su cabeza en el hombro de su marido, si alguien entraba, aquello podía ayudar más a su nueva etapa de "ahora si les creemos que se aman" sonrió ante ese pensamiento y se quedó completamente dormida.

Ted abrió un poco los ojos, intentó incorporarse, pero sintió algo pesado en su hombro, así que bajó la vista, Lily estaba dormida, en posición fetal —al menos todo lo que podía— junto a él, sonrió divertido, se movió para que ella se acomodara, de tal forma, que sintió el dulce aliento a regaliz de Lily golpeaba su cuello, Ted pegó sus labios a la frente de la pelirroja y colocó la mano sobre el vientre de la chica; y volvió a perderse en sus sueños.

—X—

Scorpius subió las escaleras seguido de Audrey, le había contado lo que había pasado con su amiga y en cuanto había tenido tiempo libre, había aparecido ahí de inmediato, iban charlando tranquilos, hasta que la joven chocó contra la espalda de su amigo, se asomó por un costado.

El rubio avanzó para asegurarse de que estuvieran dormidos, pero de no estarlo, posiblemente Lily y Ted no estarían en aquella posición, que hacía que todos los que estaban al tanto de la farsa, dudaran de la estafa.

Audrey se acercó a su amigo, poniéndose de puntitas para ver bien, los labios de Ted estaban en completo contacto con el cuello de Lily, mientras su brazo descansaba tranquilamente en uno de los pechos de la joven.

—Sin duda se está dando un agasaje –bromeó Scorpius.

—Dime ¿crees que realmente estén fingiendo todo?

—No lo sé, sólo sé que actuaste de forma maravillosa estar enamorada de él –se burló Scorpius.

—Creí que se pondría celosa, y así él le interesaría, pero no, es muy dura de roer –gruñó frustrada.

Positivo [Teddy & Lily]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora