- Pasajeros del vuelo 525B con destino a Italia favor de abordar por la puerta de embarque 6 - se escuchó la voz robótica de una mujer por los altavoces del aeropuerto
Las tres mujeres que estaban sentadas esperando la llamada de abordaje se levantaron e iniciaron las despedidas
- Por favor tengan cuidado y cuidense la una a la otra - Dijo la mayor de las tres haciendo que las otras dos la abrazaran.
Luz Bauer parecía, a simple vista, una mujer estricta pero amaba a sus hijas más que a su propia vida
- ¿No se olvidan de nada?, ¿Llevan suficiente ropa? - Volvió a hablar Luz mirando a sus hijas y asegurándose de que tenían todo
- Tranquila mamá, llevamos todo y vamos a estar bien - Contestó Malena, la mayor de las mellizas, haciendo que su hermana rodara los ojos
- Okay, estoy muy orgullosa de ustedes, las amo - Dijo finalmente Luz, dándole un último abrazo a sus niñas
- También te amamos - le respondió Maitena, la otra melliza
Con un último abrazo se despidieron de su madre y se encaminaron a la puerta de embarque.
Les esperaba unas largas trece horas de vuelo hasta el aeropuerto de Bologna, y luego, unas casi tres horas más hasta Maranello.Malena y Maitena habían estudiado ingeniería con el deseo de trabajar para algún gran equipo en el mundo de las carreras de autos. Se habían recibido hacía casi seis meses, y hacía un mes que enviaron su currículum a la fábrica de Ferrari, ya que los ingenieros de pista de ambos pilotos habían renunciado después de las pruebas de Barcelona.
A decir verdad, ninguna de las chicas tenía la esperanza de que fueran a tomarlas para el trabajo, y cuando recibieron el mail donde decía que serían las nuevas ingenieras de pista, se sorprendieron
Tenían bastante en claro que no sería un camino fácil, y que se tendrían que ganar el respeto de todo el equipo, pero ambas estaban dispuestas a trabajar lo mejor posible y a demostrar que se merecían ese puesto.
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ZIELSVERWANTEN
FanfictionMaitena nunca creyó que con su nuevo trabajo iba a tener muchas aventuras en su vida. En su mente sólo tenía una meta, centrarse en su trabajo y hacerlo bien, hasta que se cruzó con un par de ojos que la harían dudar de hasta su propio nombre. ¿Pod...