71- Dingen omhoog

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Alex se acercó a Max que se estaba preparando tranquilo para subirse a su monoplaza. El holandés miró a su compañero de equipo y siguió preparándose.

- Me sorprende que estés tan tranquilo - Habló Albon

- ¿Por qué no debería estarlo? - Preguntó confundido Verstappen  

- Por lo que está diciendo Kevin por todos lados - Dijo obvio Alex 

- ¿Qué está diciendo Kevin? - Volvió a preguntar Max 

Alex se dio cuenta de que había hablado de más y que probablemente debería haberse quedado callado porque Max no sabía nada.
El tailandés decidió contarle lo que había escuchado ya que su compañero lo estaba mirando insistentemente para que hablara.

- Bueno, es que estaba caminando por el paddock y escuché a algunas personas hablar sobre alguien y cuando me acerqué a preguntar que pasaba, me dijeron que Kevin estaba diciendo ciertas cosas sobre ese alguien por todos lados - Contó 

- Alex - Dijo Max respirando profundo - ¿Ese alguien, por casualidad, era mi novia? - 

- Tal vez - Le respondió nervioso su compañero 

- ¿Si o no? - Preguntó el holandés 

- Si - Respondió Alex rodando sus ojos - Pero tienes que permanecer calmado, la carrera comenzará en unos minutos y no puedes permitirte hacer una estupidez. Además de que a Mai no le gustaría que te metas en problemas - Intentó convencerlo 

Max asintió sabiendo que Alex tenía razón, sin embargo algo dentro de él quería ir a buscar a Magnussen y darle una buena lección.

Por otro lado, cuando Mai llegó al paddock se sintió un poco incómoda por varias miradas indiscretas, sin embargo, decidió ignorarlos. Pero cuando esas miradas se volvieron más insistentes decidió averiguar que pasaba.

Claramente cuando se enteró, quiso golpear a Kevin, que tuvo suerte de que la carrera estaba por comenzar porque no se iba a salvar de lo que la argentina tenía para decirle o de los golpes que se llevaría por parte de Max.

La carrera empezó bien para Max, que en la primera curva pudo adelantar a dos monoplazas y posicionarse decimotercero, y para su suerte, detrás de Magnussen. Mai rogaba internamente por que no pasara nada entre los dos pilotos.

Sin embargo sus ruegos no funcionaron, ya que llegando a la curva siete el holandés quiso adelantar pero Kevin no le dejó espacio y lo sacó de la pista, aunque no le sirvió de nada porque perdió el control y se fue contra el muro, haciendo que su monoplaza quedara destrozado y tuviera que abandonar. Afortunadamente, Max sólo sufrió un pinchazo en una de sus ruedas.

La carrera pasó sin más problemas, y aunque Max no llegó al podio, Maitena estaba contenta porque Charles y Seb si lo hicieron.
Cuando terminó sus habituales tareas después de una carrera, se dirigió hacia el hotel, esa noche sería la cena con su madre, Sophie y Victoria.

Max ya estaba en la habitación cuando su novia entró, el holandés pensó que la chica iba a estar enojada por lo que había pasado, pero se confundió al no ver rastro alguno de enojo.

- No fue mi culpa, él me sacó de la pista - Decidió defenderse de todas formas 

- Ya sé - Se rió Mai - De todas formas, se merecía abandonar - 

- Nunca creí que dirías algo así - Se rió él holandés 

- Debería haberte dejado que lo golpearas - Bromeó la argentina 

- Habría sido más divertido - Le contestó él - Y tú querías ignorarlo - Se rió 

Mai rodó sus ojos y decidió comenzar a prepararse para la cena, cuando estuvieron listos pasaron por Carlos y Malena y luego se dirigieron al restaurante.
Llegaron al mismo tiempo que Victoria y Sophie, que abrazaron a Mai con el cariño que siempre le daban. Luz se adentró al restaurante unos minutos después y se encaminó hacia donde estaban sus hijas.

- ¡Hola mamá! - Le sonrió Malena mientras se levantaba de su lugar para abrazarla

Maitena imitó a su hermana unos segundos después y procedió a presentar a su madre. Al parecer, la argentina no se equivocaba al decir que ambas familias se agradarían.

- Soy Sophie y ella es Victoria - Se presentó la madre de Max sonriendo

- Es un placer - Sonrió Luz

- Ya queríamos conocerte - Habló Victoria

- Igual yo - Le sonrió Luz - He escuchado muchas cosas de ustedes -

Como si se conocieran de años, Sophie y Luz comenzaron a hablar y a conocerse más, mientras que Victoria, Malena y Carlos de vez en cuando comentaban algo.

Estaban esperando su cena cuando Max miró hacia la entrada del restaurante y se tensó, Mai lo miró desconcertada ya que el brazo de su novio estaba sobre su espalda y sintió la tensión.

- ¿Qué está haciendo aquí? - Le susurró Max 

La argentina miró en la misma dirección que su novio y vio a Kevin Magnussen dirigiéndose a una mesa cercana a la de ellos.

- No lo sé, pero no le des importancia - Le respondió igual mientras apoyaba una de sus manos en la pierna de Max para calmarlo

- ¿Todo está bien? - Preguntó Vic al ver a su hermano 

- Si, todo bien - Le sonrió Mai tratando de disimular 

La cena transcurrió sin problemas, aunque Magnussen no dejaba de enviar miradas y sonrisas descaradas hacia el holandés, que no le quedaba de otra que ignorarlas porque no quería armar una escena en frente de su familia y la de su novia. 

Antes del postre Mai se dirigió hacia el baño, aunque no contaba con que al salir se encontraría en el pequeño pasillo con Kevin,  que le impidió seguir su paso hacia su mesa.

- Hola cariño - Dijo sonriendo mientras se posicionaba frente a ella 

Mai trató de ignorarlo y seguir su camino, pero el piloto danés, una vez más, se lo impidió.

- ¿Por qué tienes tanta prisa? - Le preguntó 

- ¿Me puedes dejar en paz? - Suspiró cansada la argentina - Estoy harta de ti - 

- Que lástima - Ironizó Kevin - Porque yo no me cansaría nunca de ti o de tu cara, creo que te verías demasiado bonita conmigo  - Finalizó mientras le entregaba una copa que tenía en sus manos 

- Compadezco a tu esposa que tiene que aguantarte todos los días - Le contestó Mai aceptando la copa - Como sea, estoy cansada de ti y tu mierda. No soy un objeto que puedes tener porque quieres, así que te conviene parar de molestarme o te vas a arrepentir - 

Antes de irse, tiró el contenido de la copa en unas flores que estaban a su lado, se la devolvió y sonriendole falsamente le deseó una buena noche para luego empujar su hombro y caminar hacia su mesa. Mai no sabía de donde le habían salido esas palabras, pero no se arrepentia.

- ¿Estás bien? - Le preguntó Max al ver que había tardado 

La argentina asintió sonriendo y lo besó para tranquilizarlo, luego se unió a la conversación que estaban teniendo en la mesa.

Malena observó a su hermana confundida, pero cuando vió a Kevin regresar a su mesa enojado y por el mismo camino que Maitena, supo que algo había pasado.

ZIELSVERWANTENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora