ZIELSVERWANTEN

66- Onzekerheden

El clima en Suzuka no era el mejor, hacía un poco de frío y llovía un poco, lo que no ayudaba en nada al estado de ánimo de Maitena. La noche anterior ni Max ni ella habían podido dormir bien, y aunque el vuelo hacia Japón durara diez horas, Mai no pudo dormirse tampoco, al contrario de su novio.
La argentina apoyó su cabeza sobre el hombro de su novio mientras el taxi en el que estaban los llevaba desde el aeropuerto hasta el hotel.

- ¿Estás bien? - Le preguntó Max mirándola

- Si, sólo estoy un poco cansada - Le dijo Mai tratando de sonreirle

El chico asintió sin preguntar más. Lo cierto era que Max creía que su novia estaba un poco distante por lo que había pasado en París, y aunque le hubiera dicho que todo estaba bien, él tenía sus dudas.

Al llegar al hotel se dirigieron hacia su habitación y luego de acomodar sus cosas Max se despidió de ella porque tenía que hablar con sus ingenieros. Maitena se recostó sobre la cama y suspiró un poco aburrida, como sus obligaciones con el equipo empezaban al día siguiente, decidió preguntarles a Seb y Kimi si estaban desocupados así los iba a molestar.

Al recibir respuesta afirmativa por parte de los dos pilotos, se dirigió hacia la habitación del finlandés ya que la esperaban ahí. Al llegar, se llevó una sorpresa al ver que su hermana y sus amigas también estaban ahí.
Saludó a las chicas y abrazó a los dos pilotos, no habían mantenido demasiado contacto esos días, sólo un par de mensajes, la argentina no quería molestarlos porque sabía que aprovecharían esos días para estar con sus esposas e hijos.

- ¿Disfrutaste París? - Le preguntó Seb cuando la chica se sentó entre medio de él y Kimi 

- Demasiado - Le contestó la chica - Pasamos un buen tiempo juntos y relajándonos - Contó 

- ¿Y por qué tu cara dice lo contrario? - Preguntó Kimi 

- ¡Por favor no me digas que estás embarazada también! - Interrumpió Seb haciendo reír a las chicas 

- Veo que ya se enteraron de que Vale va a tener un bebé - Se rió Mai

- Casi hace un escándalo - Se rió Malena 

- Es un exagerado - La siguió Lu 

- ¡No soy exagerado! - Le respondió Seb - ¡Es sólo que Vale es una niña todavía! - Finalizó mientras abrazaba a Valentina 

- Seb ya hablamos de esto - Le dijo Vale devolviéndole el abrazo

- Volvamos a lo importante - Dijo Abril - ¿Qué hizo Max? - Preguntó 

- Tuvimos una pelea la última noche porque creía que un mesero estaba coqueteando conmigo cuando solamente estaba siendo amable - Contó - Además de que me perdí a la madrugada por no querer hablar con él, aunque no sirvió de nada porque me encontró - Trato de aliviar la situación al ver la cara de Kimi y Seb 

- Eres una inconsciente - La retó Kimi pero terminó riendo por la cara que le puso Seb al escucharlo

- Pero, ¿arreglaron las cosas? - Le preguntó su hermana 

- Si - Suspiró Mai 

- ¿Entonces? - Agregó Lu 

- Es una estupidez - Comentó Mai - Es que vi los comentarios de la tal Salomé y todo lo que dicen de ella y Max - 

- ¿Qué Salomé? - Preguntó Seb 

- No se hagan - Se rió Mai - Yo sé que están al tanto - 

- Bwoah - intervino Kimi - No voy a mentir - 

- ¡KIMI! - Lo retó el alemán al escucharlo haciendo que las chicas rieran más fuerte 

- ¡Alguien tiene que controlar que ese chico no arruine a la niña! - Se defendió el finlandés 

- No le hagas caso a esas cosas - Le dijo Abril a Mai

- Exacto - Agregó Vale - Sabe que lo amas y lo más importante es que él te ama - 

- Si, ya lo sé - Suspiró Mai - Y el problema no es ese, sino que cada vez los rumores se van haciendo más fuertes y hay más personas odiándome, literalmente, o incluso odiando a Max porque creen que es verdad, y eso es lo último que necesitamos ahora - 

- No te pongas triste niña - Le dijo Kimi abrazándola - Si te sirve de algo, puedo pegarle - Agregó tratando de hacerla reír 

- Yo me uno - Le dijo Lu riendo 

- Kimi deja de hacer violentas a las niñas - Lo retó Seb riendo 

- ¿Por qué no vas a buscarlo y le declaras tu amor y se aman para siempre olvidándose de los demás? - Rodó los ojos Kimi

- Y se casan de una vez - Agregó Seb aunque después hizo una cara rara - No, mejor esperen un tiempo para casarse, son muy jóvenes - Se retractó haciendo reír a todos

- Porque las cosas no funcionan así - Se rió Mai - Además, aunque quisiera declararle mi amor, no puedo porque está ocupado en este momento - 

Decidieron dejar ese tema luego de convencer a Maitena de que no le diera importancia a esos comentarios. La conversación pronto cambio hacia Vale y el bebé, claramente las bromas hacia Seb y su reacción por parte de Kimi no tardaron, haciendo pasar un buen rato a las chicas.

Un par de horas después decidieron irse de la habitación para dejar descansar a los pilotos. Al entrar a su habitación, Mai vio a su novio recostado en la cama. Se acercó a él y se recostó a su lado abrazándolo.

- ¿Puedo preguntar algo? - Habló Max mientras se recostaba de lado para mirar a su novia a los ojos 

- Claro - Susurró ella sonriendo 

- ¿Estás enojada por lo de Salomé? - Habló el chico 

- No estoy enojada - Sonrió Mai mientras posaba su mano en la mejilla del chico - Porque confío en ti y en lo que me dijiste, es sólo que a veces me siento un poco insegura - 

- ¿Por qué? - Preguntó Max en un susurro 

- Es que... no soy como ellas - Respondió Mai - Tus ex novias o con las personas que te relacionan. No soy extremadamente bonita, no tengo un super cuerpo que presumir o cosas lindas para andar mostrando a todos. Simplemente soy una ingeniera, de la competencia, cabe aclarar, y que es prácticamente un desastre en todo lo que hace - 

- No tienes por qué sentirte así - La interrumpió Max - Para mi eres perfecta, y no me importa si usas cosas de diseñador o una bolsa, siempre lo serás. Estoy contigo porque, sinceramente, no te importan todas esas cosas, esos detalles de los que siempre te quejas te hacen ser tu misma, y amo eso. Y no eres un desastre, no vuelvas a decir eso - Finalizó mientras le daba un beso 

- Te amo - Le dijo Mai mientras lo abrazaba más 

- Te amo - Le respondió Max sonriéndole 

- Tengo hambre - Le dijo la argentina luego de un par de besos - ¿Quieres comer algo? - 

- Diría que no pero puedo comerte a ti - Sonrió pícaro el holandés mientras movía sus cejas 

- ¡MAX! - Se empezó a reír Maitena empujándolo levemente por el pecho y tratando de ocultar su vergüenza - ¡Estoy hablando en serio! - 

- ¡Okay! - Se rió Max mientras levantaba sus manos en señal de paz - Voy a pedir algo para comer y vemos una película - Finalizó besándola 

Mai asintió y se dedicó a observarlo mientras escuchaba lo que estaba pidiendo y se reía, ya que era casi seguro que si su entrenador se enteraba de lo que estaban por comer, tendría a Max entrenando más duro de lo que lo hacía durante todas sus vacaciones.