ZIELSVERWANTEN

20- Bedrogen

Max estaba buscando a Charles, había hablado con Mai después de la carrera y se habían puesto de acuerdo en comenzar con el plan para juntar a sus amigos.

- Ey Charles, necesito tu ayuda - Dijo el holandés cuando lo encontró 

- ¿Por qué presiento que no me va a gustar lo que estoy por escuchar? - Respondió Leclerc con un poco de miedo en su voz

- Es por una buena causa - Trató de convencerlo 

- Okay, está bien. ¿Qué tengo que hacer? - Suspiró Charles 

- Necesito que me acompañes a cenar esta noche - Contestó Verstappen 

Charles lo miró sin entender.

- Es que quiero invitar a Mai a una cita, pero ella no quiere dejar a su amiga sola, ya que las demás van a estar ocupadas - Mintió el holandés 

- ¿Y cuál es esa amiga? - Preguntó Charles rogando internamente que no fuera quien él creía

- Abril - Dijo Max casualmente 

- No, ni loco, eso no va a pasar - Dijo Charles convencido.

Lo cierto es que él quería pasar tiempo con la chica, pero tenía miedo de que la chica no lo quisiera a él.

- Hazlo como favor, y después me puedes pedir lo que quieras - Rogó Max 

- Te odio Verstappen - Dijo finalmente Charles suspirando - Está bien, lo voy a hacer. Pero me vas a deber una grande - 

Max festejó internamente al ver que su parte del plan había funcionado y pensó que en realidad, el chico iba a terminar agradeciendole si todo salía bien.

- Okay, necesito que estés en el restaurante a las 8. Luego te envío la dirección - Dijo Max finalmente 

Charles asintió y después de eso se despidieron. Max le envió un mensaje a Mai diciendo que su parte del plan había funcionado, y la chica agradeció internamente, porque creía que a Max se le iba a escapar todo el plan tratando de convencer a Charles y lo arruinaría todo.

Mai entró a la habitación de Abril en su búsqueda.

- Esta noche nos vamos a cenar las dos solas, así que si tienes planes, los cancelas - Le dijo 

Abril la miró levantando una ceja - No tengo ganas, estoy cansada - Le respondió 

- No acepto un no por respuesta, así que espero que a las 8 estés lista o sino te llevo a las rastras - Dijo Maitena finalmente para salir de la habitación y dirigirse a la de Max, donde el chico ya la esperaba.

Max y Maitena procedieron a prepararse para la cena. La chica ignoraba que el holandés tenía otros planes para ellos dos esa noche.

Cuando se estaba acercando la hora, Charles salió rumbo al restaurante que Max había elegido, y Maitena fue en busca de su amiga.

Cuando Charles llegó, Max ya lo estaba esperando en la mesa. A los pocos minutos le llegó un mensaje de Mai, diciendo que ya estaban llegando, y se excusó con una mentira diciendo que iba a esperar a las chicas afuera.

Por otro lado, las dos chicas entraron al restaurante y se acercaron a la mesa. 
Abril, al ver a Charles, se frenó y miró enojada a su amiga.

- No me voy a sentar ahí - Dijo dándose cuenta de que había sido engañada 

- Si lo vas a hacer, Charles ya te está esperando, y no creo que lo quieras dejar plantado porque después te vas a arrepentir - Le respondió su amiga tratando de convencerla.

Después de unos minutos de discusión, Abril aceptó finalmente y se acercó a la mesa donde estaba Charles, que al verla sola quedó confundido.

- ¿Dónde están Max y Mai? - Preguntó 

- Lamento decirte que fuimos engañados y que vamos a cenar sólo nosotros dos - Contestó Abril mientras tomaba valentía para mirarlo a los ojos.

A los pocos segundos decidieron ordenar lo que iban a cenar. Se notaba que ambos estaban nerviosos todavía.

Mai miró orgullosa a sus dos amigos y salió del restaurante en busca de Max que estaba esperandola afuera, apoyado en su Aston Martin negro.
 
- ¿Qué vamos a hacer? - Dijo la chica mientras le daba un beso.

- Vamos a ir a cenar a un lugar, y después podemos caminar un poco o hacer lo que quieras - Le dijo Max sonriente a lo que la chica asintió

Por otro lado, Charles y Abril habían estado unos minutos en un silencio un tanto incómodo. 

- ¿Cómo conoces a Mai? - Preguntó el piloto tratando de salir de la incomodidad 

- Íbamos al colegio juntas y nos hicimos muy amigas, hasta que entramos en la Universidad y empezamos a vernos un poco menos. Por suerte ahora nos reencontramos - Contó ella dándole una sonrisa.

- ¿Te gusta mucho sacar fotografías? - Volvió a preguntar él, que ya estaba más relajado

- Me encanta, desde que era chiquita me apasiona, y poder dedicarme a esto me hace muy feliz- Contestó Abril con una sonrisa que hizo a Charles sonreír más, ya que se notaba que la profesión de la chica realmente la hacía feliz.

Estuvieron hablando durante horas. Charles le preguntó sobre sus cosas favoritas y ella sobre el mundo de la Fórmula 1 y lo que hacía el chico en su tiempo libre.

Realmente llegaron a conocerce, ya no estaban nerviosos ni incómodos con la presencia del otro.

Charles se ofreció a pagar la cena y aunque la chica le puso mil quejas, se salió con la suya.
Salieron del restaurante y Charles le abrió la puerta de su Ferrari para llevarla de vuelta al hotel.

La acompañó hasta la puerta de su habitación y se despidió dándole un beso cerca de sus labios, y prometiendole que iban a repetir la salida.

Abril entró a su habitación con una sonrisa que nada ni nadie podía borrar. Se había dado cuenta de que lo que le pasaba con Leclerc no era sólo un crush sino que le empezaba a gustar.

Charles se quedó como un tonto parado al frente de la puerta de Abril con una sonrisa también, estaba claro que la chica lo volvía loco y no podía esperar a que estén solos de vuelta. Definitivamente tendría que agradecerle a sus amigos por haberlo engañado.