Lejos Estamos Mejor. (SessKag)

Vingt Huit

 El abrazo duró más de lo que pensé. Sesshomaru no quería alejarse y no lo culpaba, era su momento de gloria ¡Al fin, estamos juntos! Después de tantos momentos malos, pudimos juntarnos y empezar de nuevo... Pero aun con un pasado doloroso.

El peli plateado rompió el abrazo y me miro.

-¿Es suficiente?—Entrelazo nuestras manos. Su cercanía es cálida.

Pensé que es momento de amarlo profundamente, como siempre deseé, recompensar los malos momentos que tuvimos que enfrentar a nuestra corta edad.

Podemos solucionar esto, lo sé.

(...)

Narración especial ~KAGURA~

¿Por qué intervengo entre ellos? Hay una buena razón y no es que quiera separarlos para siempre, pero las personas a veces necesitan estar solos para enfrentar su mierda y Sesshomaru lo necesita. Sé que mucho tiempo estuvo alejado de Kagome, aunque eso no quiere decir que se estaba sanando, no, solo se sumergía más y más hasta que ya no pudo más...Tuvo que buscar una escapatoria y eso fue estar en contacto con la menor.

Sesshomaru ha sido como mi hermano mayor, siempre me protegía y enseñaba trucos. Lo amo, quiero protegerlo de cualquier dolor pero, cuando cumplimos los 15 años, descubrí una verdad que ignoraba.

Mi primo está enamorado de Kagome Higurashi, me lo contó un varano que pase por la casa. Un poco después Bankotsu se unió al club del secreto, todos prometimos callar hasta que nuestro Taisho decidiera que era momento de actuar.

El tiempo paso y con ello todos crecimos; nos separamos un poco porque cada quien realizaba su vida como mejor lo creía a la edad de 17 años, sin embargo seguíamos en contacto... Hasta que un mensaje de Sesshomaru me sorprendió.

"Mi papá me ha dicho que quiere que me encargue de la empresa más adelante."

Claro que me sorprendí ¿quién le dice eso a su hijo de 17 años? Le dije que era momento para que le contara sobre su sueño de irse a estudiar fotografía en el extranjero. Así su papá comprendería y no lo forzara a que tomara el mando de una compañía que no quiere.

Y fue el peor consejo que le pude dar.

Mis tíos regañaban a Sesshomaru horrible, ni siquiera se medían con sus palabras y él solo asentaba con la cabeza, aceptando cada insulto hacía su persona. Traté de meterme en cada pelea, pero Bankotsu me detenía.

Le decían que era un irresponsable y holgazán, que solo estaba en su etapa rebelde y eso afectara su vida adulta si no recapacitaba. Sesshomaru lo negaba, diciendo que es su sueño, su meta de vida pero que si se equivocaba está bien, porque no se iba a arrepentir.

Las peleas terminaban cuando Izayoi le pedía a su esposo que fuera a descansar y dejara de gritar hacia su hijo. Ino la obedecía pero terminando diciendo cosas hirientes antes de retirarse.

Una noche, cuando buscaba un vaso de agua para Inuyasha, escuché gritos que provenían del estudio de mi tío. Camine y recargue mi oído en la puerta, escuchando lo que hablaban.

-¡No seas tonto, Sesshomaru! —Dijo el papá de los hermanos.

-Pero papá, en serio quiero estudiar fotografía. — Escuché la voz débil de Sesshomaru.

-¡Claro que no! Solo quieres lucirte ante la chica que te gusta ¿no?

-¡No!

Alguien rompió una pieza de vidrio.