Scottie's POV
A pesar de lo poco que le gustaba a Lou madrugar, la había citado a primera hora para tomar desayuno en paz en el lobby de la carrera antes de que llenara de todos los ingenieros y mecánicos. Nos merecíamos cierto tiempo a solas para solo gozar de nuestra amistad.
- ¿sabes cuantas veces había llegado aquí y no quedaban wafles? Todas las veces-
- Ventajas de los que se levantan temprano, Richards-
- No, ningún desayuno vale levantarse a las 5:30 de la mañana.
Seguimos hablando de las mismas tonterías de las que hablamos desde que somos amigas, de vuelta al sexto grado, sin embargo me sentía nerviosa. Dejar de tener su apoyo sería difícil, pero aun mas difícil era verla trabajar en un trabajo que no era su sueño. Es decir, hacia todo perfectamente y estaba segura que no era infeliz en esto, pero ella quería y debía ser artista. Toda su vida se había preparado para ello y al ser muy inteligente, las cosas se habían dado un poco más fáciles.
También había notado que se quedó a mi lado porque entendía cuanto la necesitaba, no solo como colega, sino como mi mejor amiga, mi compañera. Siempre ponía la excusa de que aun le faltaba dinero para su taller, pero no era cierto. Las matemáticas la había hecho hace un tiempo y en realidad ya tenía suficiente cantidad como para comprarse un taller en pleno centro de cualquiera de las capitales artísticas del mundo, fuera eso París, Milan o el mismo Londres.
Sabía que quería ayudarme, pero debía darle la oportunidad ahora de devolverle la mano.
- Lou, tengo algo que contarte.
- Uh, chisme o algo serio?
- Algo serio.- di un sorbo a mi té mientras veía que ella dejaba el trozo de wafle en el plato-
- Okay, estoy lista.
- Tengo a la persona perfecta para acompañar a Fletcher en la preparación de Jake.
- Wow, eso es genial. Estar con el papucho en el noreste de Alemania, cerca del circuito de Hockenheim para practicar suena más como un regalo que trabajo. ¿Quién es?- parecía emocionada por esa persona.
- Es alguien excelente, buen currículum y todas las características que necesitábamos.- tome un pausa mientras ella seguía mirándome con ojos grandes y ansiosos de saber. - eres tu, Lou.
Se volvió seria inmediatamente. Esta también era una posible reacción, pero esperaba que no estuviera enojada.
- ¿Quieres mandarme a Alemania a qué? No tengo nada que hacer para el equipo.
- En eso te equivocas. Necesito alguien que sea cercana a mi hermano, que sepa que necesita en la parte emocional. Necesito alguien que sepa de la organización que se necesita para tener un piloto con poco entrenamiento en la mejor forma posible y sobre todo, necesito a un artista para diseñar los autos y cascos de Jake, sin contar la propia línea de ropa que usará su equipo.
Estaba en silencio. Procesando lo que acaba de decirle.
- Y me enviarás lejos? ¿Quién será tu asistente si no estoy?
- Irás solo si quieres, no voy a obligarte a nada. Si no quieres, solo seguirán las cosas como estaban. Y no tengo reemplazo aun, pero poco a poco me adaptaré. No te preocupes de eso, quiero saber que piensas.
- Es demasiado. Es decir, no quiero dejarte pero si entiendo que es una gran oportunidad de poner todos mis conocimientos a prueba y hacer cosas más de mi estilo. Es, yo , no sé. Es una gran sorpresa.
- Piensa esto no como que me dejas sola, estarás cumpliendo una funciona que yo no puedo. Es decir, me estarás ayudando a formar a mi hermano y estarás abriéndote caminado en tu vida como artista. Sé que es algo grande, pero creo que será genial.
Miraba directamente el plato ahora vacío, pensando en todo pero sin mayor expresión en su cara. Luego de unos minutos, comencé a preocuparme, pero ella levantó la mirada y supe que a pesar de estar asustada, lo haría.
- Esta bien, salvaré tu trasero nuevamente y formaremos al próximo campeón de la fórmula 2. El papucho y yo.
Salte de mi asiento y la abracé. Realmente era un ayuda que tomara el puesto, por un momento las lagrimas se acumularon en mis ojos.
- gracias, gracias, gracias- dije mientras seguía abrazándola
- de nada, pero sigo creyendo que haces esto para quedarte sola con Luke.
Las risas no tardaron en llegar y luego de limpiar unas cuantas gotas de mis ojos acordamos que firmaría el contrato a la hora de almuerzo.
El equipo estaba casi listo y no podía esperar a que Jake comenzara a perfeccionar su técnica.
Caminado hacia la oficina nos encontramos con Fletcher, vestido semi formal, esperando fuera a que llegáramos.
- Bueno, hay papeleo que debo terminar. Buenos días Fletcher. Nos vemos- Louise esquivo a Fletch y siguió su camino sin esperar a que el pobre hombre le respondiera. Se quedó con la mano alzada. La siguió con la mirada hasta que comenzó a subir la escalera. Fueron solo unos segundos, pero note algo ahí.
- Buen día Fletcher- dije para traerlo de vuelta a la tierra.
- Tan solo dime Fletch, buen día. Me gustaría hablar contigo.
Lo hice pasar y tomar asentó dentro de la oficina provisoria que llevábamos a todos lados.
- Bien, soy todo oídos.
- Aceptaré el trabajo, pero tengo una sola condición.- hice un asentimiento con mi cabeza y cruce mis manos dandole a entender que siguiera hablando. Estaba un poco nervioso y había notado no dejaba de mover su mirada hacia todos lados, expresando claramente lo incomodo que se sentía.
- Fletcher, mírame.- los ojos miel del chico mostraron tan solo a un niño a pesar de tener la altura cercana al metro noventa.- no muerdo, podemos conversar tranquilamente de todo lo que concierne a que te sientas a gusto en la empresa y en el equipo.
Dio un respiro hondo y enderezó su postura.
- Scottie, Luke es mi mejor amigo y no quiero saber nada de lo que este sucediendo entre ustedes dos, porque no me concierne, ambos son adultos y es su trabajo hacerse cargo de eso. Pero necesito saber como es que decidiste que yo era el indicado para el trabajo.
¿Era una broma? El tipo era un puto genio en todo lo que concierne a la mecánica y no había empresa de autos en el mundo que no quisiera tenerlo en su sala de creación, y aún así, el dudaba de si su amigo había interferido con conseguirle un trabajo.
De pronto él comenzaba a caerme estupendo. Sonreí porque esto amerita que el sacara esa inseguridad de su espalda.
- No tienes de que preocuparte. Luke es un gran amigo pero todo lo que haz conseguido aquí ha sido sin su ayuda. Sí, es verdad que él estaba conmigo cuando encontramos tu currículum, sin embrago él estaba tan sorprendido como yo de encontrarlo ahí en la bandeja de postulantes. Eres un gran ingeniero, Fletch. No dudes de eso. Luke no hizo nada de esto más fácil para ti, competiste al igual que todos los demás.
La sonrisa volvió a su rostro y se recompuso. Mire más detenidamente su cara, notando su cabello alborotado y unas ojeras bajo sus ojos que solo decían que no conseguía dormir mucho. Manos que parecían muy grandes para un ingeniero, más bien parecían las de un deportista. Apariencia dura, pero se realmente tenían la agilidad de ser delicadas y precisas. Llevaba unos pantalones azules no muy asustados, junto con unos zapatos en punta cafés, seguido de una chaleco simple tejido beige, dando a notar el cuello de la camisa blanca que lleva debajo.
Definitivamente las alumnas que debía tener en la universidad debían estar locas por él. Igual que como estaba mi amiga.
- Es un gran alivio. Por favor no le digas a Luke, de seguro se enojará si se entera que lo subestimé.- solté un risa, en serio me agradaba.- dónde firmó? Y qué más debo saber?
Lo puse al tanto del conjunto de departamentos en el que viviría en el centro de la ciudad alemana, junto con Jake y Louise, también de las instalaciones donde podrían entrenar, estudiar y practicar junto al circuito donde se corre premio alemán.
- Me parece genial. Es decir, solo hay que cambiarse, es increíble.
- A la hora de almuerzo, Louise y tú firmarán. Luego, tienen la próxima semana para organizar sus cosas, ya que es el descanso de toda la fórmula 1. Cuando nosotros estemos viajando hacia Oxford, ustedes se instalarán en Alemania. De ahí nos veremos espero en el descanso entre el GP de China y el GP de Holanda.
- Está bien, genial. Deberé aprender alemán, para poder sobrevivir ahí.
Volvimos a reír. Definitivamente era cosa de tiempo para que Louise cayera a sus pies, si es que no caía antes él por Richards.No puede preocuparme directamente de la firma de los contratos, ya que debía ir a hacer mi trabajo y velar porque clasificáramos en los primeros puestos.
Mientras hacían las vueltas de enfriamiento de motores, mi hermano comenzó a llamarme.
- Hola Scottie
- ¿Qué tal, enano?
- Acabamos de llegar de Alemania. Estoy ansioso de la carrera de este fin de semana y tambien de que estarás en casa el lunes. Creo que, que, te hecho de menos.
-Crees que me hechas de menos? Por supuesto que lo haces.
Le comente que pronto estaría compartiendo departamento con Lou, con Fletcher como vecino, a menos de una hora del circuito.
- tú eres la mejor hermana del universo entero. Eres lo máximo.
- si, si, si. Más te vale dedicarme el primer podio que tengas.
- Mejor aún, te dedicaré el primer titulo mundial.- juro que por un segundo se me hizo un nudo en la garganta de la emoción. Yo creía realmente que él tenia un potencial piloto como se lo había visto a otros, Charles, George Russell, entre otros. Pero con este tenia relación directa, era mi hermanito.
Conversamos un rato más y fue a descansar.Domingo vino tan rápido como se fue y solo logramos un segundo lugar, después de que Dempster chocara y perdiera el liderato, dejando a Verstappen llevarse la pole position. No esta molesta, solo un poco decepcionada de que con los años de experiencia que Cameron tenía, cometiera un error tan de principiante como ir al pasto y dejar que todo el auto se fuera contra la barrera de contención.
- Todo bien, Cameron?
- Si, por favor, quiero estar solo un tiempo.
Sabía que le afectaría, pero John ya se estaba preocupando de eso. Agradecía las semana que teníamos para fortalecer las confianzas de ambos pilotos y seguir en lo alto de la tabla y pelear por el título mundial.
La competencia se comenzaba a volver real. Y eso era lo que más me gustaba.
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Safety Pin
Roman pour AdolescentsSon jóvenes y lo saben. Un experto en velocidad y una experta en ingeniería. Ella en un mundo de hombres y él se queja de la tradición. La primera mujer en dirigir el arte de las técnicas para ganar los Grand Prix de Fórmula 1 y él, un piloto que l...