Mira - Dijo Harry - Yo lo abro y tú le das con la espada. Has de ser rápido porqué lo que sea que haya allá dentro intentará atacarte. Recuerda que el diario de Riddle intentó asesinarme.
Ron afirmó con la cabeza, incapaz de pronunciar palabra. Empuñó la espada con fuerza mientras su amigo contaba hasta tres y pronunciaba una asquerosa palabra en pársel.
Y entonces el caos se desató. Las portezuelas del guardapelo se abrieron con un leve chasquido. Cada una de las dos ventanitas mostraba un ojo, vivo y hermoso. Los ojos de Tom Riddle.
Harry le gritó a Ron que clavase la espada mientras sujetaba el guardapelo sobre una roca. Ron levantó levemente la espada. Los ojos que había dentro del guardapelo iban de un lado al otro, siguiendo a la vez los movimientos de los dos chicos.
Entonces resonó una voz sibilante.
- He visto tu corazón y me pertenece.
Ron se estremeció, luchando porque el miedo no le bloquease. Harry le gritaba, pidiendo que ignorarse aquella voz, pero Ron no le escuchaba.
- He visto tus sueños y tus miedos, Ronald Weasley. Todo cuanto deseas es posible, pero también todo lo que temes lo es...
¿Y qué era lo que Ron más temía? Estaba seguro de que su Boggart ya no sería una araña nunca más. El miedo que había sentido aquellos días a no volver a ver a Hermione, a que le pasase algo sin que él pudiera hacer nada... Todo eso era mucho más terrorífico que cualquier bicho de multipatas peludas.
El Horrocrux siguió adelante con su malévolo discurso.
- He visto tus sueños y tus miedos. El menos querido por una madre que prefería una hija.
Pues no, esa asquerosa cosa no tenía razón. Durante mucho tiempo se sintió así, pero las charlas con Bill de los dos últimos meses le habían hecho sentirse muy valorado y querido por su familia. Él no sólo fue un niño puente no deseado hasta que su madre tuvo a la niña que siempre había soñado, estaba seguro que su madre le quería.
- Y ahora el menos querido por la chica que prefiere a su amigo. Siempre el segundón, eternamente eclipsado...
Aquello sí dolió. Ron se quedó en shock al sentir que sus sentimientos más profundos habían dejado de ser secretos en un sólo instante. Entonces sintió la voz de Harry, gritándole que le clavase la espada a esa maldita cosa. Salió de su ensimismamiento y levantó un poco más el arma. Entonces todo empeoró.
De las dos ventanitas del Horrocrux salieron dos burbujas que se transformaron en la cabeza de Harry y Hermione. Ron dio un grito y retrocedió asustado. Los cuerpos siguieron emergiendo y ya se veía la figura completa de sus dos amigos, más bellos pero mucho más siniestros que los reales.
Harry soltó de repente el guardapelo que estaba sosteniendo, gritando, cómo si este le hubiera quemado los dedos. Pero Ron no ponía nada de atención sobre su amigo, estaba ensimismado mirando aquellas figuras mágicas las cuales en aquel momento empezaron a hablar.
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Lo que Harry no supo ver: el secreto de Ron y Hermione
Fiksi PenggemarHistoria de cómo vivieron Hermione y Ron el séptimo año. Muchas cosas pasaron sin que Harry se enterase...