🌹One-Shots con Arge Pasivo 🌹

💫¿Destino?💫 Perú (1/3)

Advertencia: Omegaverse.

______________________________________

Argentina estaba sentado en aquella gran sala moviendo sumamente nervioso sus pies, a pesar de ser apenas un niño entendía lo importante que era aquello.

Una mujer entregó a su madre aquellos papeles poniéndolo aún más nervioso, la italiana los abrió comenzando a leerlos con la atenta mirada de Argentina sobre ella, puesto que aún no sabía leer.

Respiró aliviada al ver aquel signo, un Alfa, realmente no quería que su hijo tenga que sufrir el hecho de ser un Omega, esperaba que sea un beta, pero aquello era aún mejor, ¡Un Alfa!.

_¿Qué pasá? ¿Estoy mal?_ le preguntó el infante, a lo cual negó abrazándolo.

_Eres un Alfa y es algo muy bueno_ susurro aún abrazando a aquel niño, quien seguía confundido pero feliz, España le había dicho que debía salir bien o sería castigado, tenía miedo, pero ahora sabía que todo iba a estar bien.

Caminaba después de la salida del colegio, sólo, como era de costumbre, era un poco temperamental y puede que se haya peleado con todos sus "compañeros".

Pero ¡No tenía la culpa de que todos sean sumamente estresantes!, Y ahora tenía que soportar otra de aquellas reuniones dónde le dirían que "Tú comportamiento es inapropiado" y "Estás arruinando tú futuro".

No quería imaginarse como lo castigaría Italia, después de todo, era la tercera citación en lo que iba del mes, aunque estaba algo orgulloso, todas las peleas que inició, ganó, y el inicio todas.

Tomó un "atajo" por un pequeño bosque que había, no mucha gente solía pasar por ahí y le encantaba lo tranquilo que era, aunque parecía que hoy no sería como siempre.

Había un Omega, aparentemente en celo, su olor estaba en todo el lugar, aunque no se preocupó, después de todo, ningún Omega hacía efecto en el, no sabía el porque, pero tampoco le importaba.

Busco en su bolsillo aquel frasco de pastillas, su madre le obligaba a llevarlo solo por si alguien necesitaba ayuda, aunque nunca tuvo que utilizarlo hasta ahora y no sabía cómo darle aquellas pastillas, ¿Le tiraba el frasco y se iba?.

Se acercó un poco a el Omega, quien estaba de espaldas, solo le entregaría el frasco y ya, tocó su hombro en un intento de llamarle la atención.

_¡No me toques!_ le gritó el otro intentando apartarse, Argentina se sobresalto tirando aquel frasco, retrocediendo y cayendo de espaldas a causa de una rama.

No entendía que le pasaba, todo su cuerpo temblaba, sentía un nudo en su garganta y como algunas lágrimas se acumulaban en sus ojos, ¡Solo era un Omega! ¿Por qué le afecto tanto su grito?.

_¿Estás bien?_ le pregunto el otro, intentando acercarse, aunque retrocedió lo más que pudo.

Escuchar nuevamente su voz le afecto de una forma aún más extraña, sentía su corazón latir rápidamente, todo su cuerpo ardía y su respiración estaba agitada.

Tenía una extraña necesidad dentro de si, deseaba acercarse al otro, quería que lo toque, quería sentir sus manos, necesitaba de aquel desconocido.

Lentamente ambos se acercaron, hasta estar básicamente a centímetros y unieron sus labios, sintiendo casi como si por fin pudiera volver a respirar.

Todo su cuerpo lo necesitaba, quería más, se besaron con desesperación, el otro lo acostó colocándose sobre el, aquellas manos recorriendo casi por completo su cuerpo, se separaron aún unidos por un hilo de saliva.