🌹One-Shots con Arge Pasivo 🌹

🍁 Pasado🍁 Alemania

_Tenés una sonrisa muy hermosa, me gusta_ admitió el argentino sonriendo, ligeramente sonrojado.

El alemán se sonrojó por completo, sin saber cómo reaccionar, ¿Ahora que debía hacer? ¿Devolverle el cumplido?.

_Tú sonrisa también es linda_  dijo tartamudeando bastante, Argentina sonrió con ternura, ¡Era muy lindo!.

_Ya ganaste ¿Si?, Lo admito, me conquistaste_ susurro guiñándole un ojo, para después sonreírle y salir de aquella habitación, dejandolo solo con aquel recuerdo, admirando aquella sonrisa en su mente, repasando una y otra vez lo bien que se veía.

Alemania suspiro, lo admitía, le gustaba su niñero, el argentino le parecía perfecto, con aquella personalidad ligeramente presumida y una hermosa sonrisa, de a poco logró conquistarlo.

Aunque con el pasar de los años habían perdido aquella cercania, de hecho, ni siquiera se hablaban, pero muy de vez en cuándo lo admiraba desde lejos, de pequeño lo único que quería era poder crecer y así poder estar con su amado niñero, pero eso no era nada más que una infantil fantasía.

Poco a poco olvidó aquella sonrisa, reemplazándola por milares de papeles, encerrando en aquella oficina y ya se había acostumbrado, no era tan malo como sonaba.

_Algún día vas a tener que salir_ reprochó la japonesa, cansada de insistir a su amigo para ir a algún lado, ¡Incluso se había negado a salir al patio!.

_Algún día, pero hoy no_ dijo el alemán, bastante concentrado en no cometer ningún error.

_Me aburro sin ti, ¡Solo es una salida! ¿Es tanto pedir? Y luego te prometo que no volveré a molestarte con mi amistad_ dijo directamente rogando la japonesa, el alemán suspiro, rindiéndose, no le faltaba tanto, así que si adelantaba algo de su trabajo, tal vez tendría unas horas libres.

_Está bien_ dijo cumpliendo el capricho de la japonesa, la cual comenzó a saltar de la felicidad, obvio tenía un plan bajo la manga, ella no podía encargarse de sacarlo de ahí todos los días, así que estaba decidida a conseguirle una pareja a su amigo y ya tenía al indicado.

_¿Por qué viene con nosotros Polonia?_ pregunto en un susurro el alemán, mirando con duda a la japonesa, pensó que simplemente iría a beber, no a socializar.

_Bueno, es que es muy lindo_ dijo buscando un sonrojo o algo en el otro, pero no hubo nada, suspiro, a este paso, tal vez, logré conseguirle un novio dentro de 200 años.

Y tal vez Polonia no era el indicado, o tal vez ese lugar era demasiado aburrido como para iniciar una relación.

_¿A dónde vamos? ¿Vas a tardar mucho? Tenemos que volver dentro de media hora_ Escuchaba las quejas del alemán, habían perdido gran parte de la noche viajando, pero esperaba que valiera la pena.

_¡Llegamos!_ dijo con una sonrisa, apuntado a aquel lugar donde incluso a varios metros de distancia se podía escuchar la música extremadamente fuerte.

_Japón ya es tarde, ¿No te parece mejor si volvemos y miramos anime?_ dijo el alemán, aunque la japonesa negó al instante, sabía que era un falso soborno y que a penas se distraiga el otro ya estaría trabajando.

_Solo serán unos minutos, ¡Por fiss!_ suplico, el alemán dudó, pero la japonesa no podía esperar tanto, de modo que se lo llevó a rastras.

Alemania suspiro, realmente prefería estar en su oficina antes que en ese horrible lugar, por poco y no era capaz de escuchar lo que pensaba, estaba lleno de borrachos y en menos de cinco minutos ya le habían ofrecido ir a un cuarto para 'divertirse'.

Miró al asiento a su lado, a punto de rogarle a la japonesa para irse, pero notó que ya no estaba, la buscó con la mirada, sin hallarla y lo admitía, la otra era muy descuidada y tenía algo de miedo de que le pase algo.