🌹One-Shots con Arge Pasivo 🌹

🌈 Curiosidad 🌈 México

Aclaración: AU (Universo alternativo).

Argentina: Tiene 23 y estudia psicología.

México: Tiene 22 y estudia gastronomía.

Van a tener cabello para la conveniencia de la trama (｡•̀ᴗ-)✧.
__________________________________

México suspiro mirando con cierta impaciencia la puerta, esperando a alguien en especial, alguien muy especial.

La puerta del bar se abrió poco después, y aquel chico, en un traje elegante algo desarreglado, le saludo con una sonrisa, logrando dejarle completamente embobado.

Aquel chico era su mejor amigo desde hace poco más de un año, y es, innegablemente, dueño de absolutamente todas sus fantasías y más pecaminosos pensamientos.

De risa contagiosa, flamantes ojos verdes, y casi siempre portador de un bello sonrojó, algo presumido, pero agradable, sabía contar chistes, y maldecir por más de diez minutos seguidos sin repetir un solo insulto, básicamente, el chico perfecto.

Y bueno, también tenía una figura que le resultaba indescriptible con palabras, atrayendo a quien lo vea, y de forma obvia, él no fue la excepción, apenas dió un paso en el bar, con su semblante serio y de pocos amigos supo que era el chico de sus sueños.

Argentina lo miró, pasando lentamente uno de sus dedos por el borde del vaso, relamió sus voluminosos labios, levantándose de su asiento y recostandose sobre la mesa, acercandose tal vez demasiado, y desabotonó dos de los botones de su camisa.

_Las chicas de aquella mesa te están viendo desde hace rato_ le susurro, para después apuntar de forma disimulada a una mesa detrás de ellos.

_¿Y?_ preguntó, intentando aparentar tranquilidad, aún con la agobiante cercania.

_Bueno, siempre andas presumiendo que sos un mujeriego..._ indicó el argentino, sin cambiar su posición, dandole un trago a su bebida.

_Demuestra que todas tus historias son reales_ le susurro, regalandole una sonrisa, y como le encantaba verlo sonreír así.

_Bien, pero si lo logro vienes conmigo a una fiesta_ propuso, convirtiendo aquello en una especie de apuesta, Argentina no solía salir demasiado a fiestas, no del tipo que el iba al menos, así que no desaprovecharía la oportunidad para poder obligarlo a ir a una.

El argentino miró a otro lado con cierta duda, pero termino accediendo, era imposible que México logré conquistar a aquellas chicas.

Argentina miró completamente sorprendido como el mexicano se besaba con ambas chicas, de a una a la vez, turnandose, okey, no volvería a cuestionar la habilidad de su amigo.

¡Pero por Dios, éso no podía ser real! Tal vez el mexicano les había pagado para que finjan o algo, intentó aunque realmente no hallaba una explicación lógica, ¡No habían conversado ni por quince minutos! ¿¡Y ya las estaba besando!?.

Notó al otro caminar nuevamente hasta la mesa, con lápiz labial corrido en sus labios, y colocó un papel frente a él.

_Son sus números de teléfono, por si todavía dudabas_ le guiño un ojo, y Argentina solo seguía en su estado de semi-shock.

_Te esperamos afuera_ indicó una de las mujeres que hace solo segundos besó, sonriendo y acariciando suavemente su hombro cuando paso a su lado, para después solo dirigirse a la salida del lugar.

_Salgamos por la puerta de atrás_ le susurro a Argentina con su vista sobre la entrada al bar, esperando a que las chicas salgan para poder huir.

_¿No te vas a ir con ellas?_ No, porque con el único que quiero pasar una noche es contigo.