I
Perdón• ────── ✾ ────── •
Luego de la reunión final de Pilares con la familia Ubuyashiki, Sanemi había ido a la finca mariposa con el único propósito de que Kanao se hiciera cargo de Kaburamaru. Él y la serpiente no se estaban llevando del todo bien, y dado que la muchacha era de las pocas personas que habían compartido algo de tiempo con Iguro en el pasado, le pareció lo más adecuado; lo cierto es que tanto ella como el animal parecían complacidos con el resultado. Su intención nunca había sido la de cruzarse con alguien más, mucho menos con aquella chica de ojos rosáceos.
Se encontraron en el pasillo cuando él iba de salida, la sorpresa dibujada en ambos rostros, sin embargo, mientras que él se detuvo a pensar qué decir o hacer, Nezuko rápidamente le saludó.
—¡Buenos días! —le dijo ella, alegre. Sanemi sólo pudo asentir y murmurar algo—. ¿Tus heridas están bien?
—Sí... Algo así... —Lo cierto es que, a pesar de que tres meses habían pasado de aquella batalla, demasiadas vendas todavía le recorrían el cuerpo.
—¡Eso es genial! —contestó ella, con una gran sonrisa en el rostro. A Sanemi le incomodaba un poco esa sonrisa. ¿Por qué era tan amigable con él? ¿Acaso no recordaba todo lo que había pasado entre ellos, su hermano no le había dicho nada?
—Realmente lo siento —dijo él, tratando de ser amable—, por un montón de cosas... Aparentemente hubo algunos problemas luego de que Muzan fuera derrotado, y yo estuve dormido todo ese tiempo...
Sin embargo, como si no fuera nada importante, ella volvió a sonreír amigablemente.
—Yo estuve dormida por dos años, ¿sabes? Comparado con eso, lo tuyo no es nada. Es más, mi hermano estuvo dormido por un mes luego de la batalla —rió. La chica realamente se parecía a Tanjiro, tenían el mismo aire despreocupado y la misma facilidad para hacerlo sentir incómodo—. A mí me encanta dormir —añadió la muchacha, y su sonrisa, la forma en la que los músculos de su rostro le elevaron, se le hicieron dolorosamente familiares.
Pero también, un calor le inundó el pecho.
No supo cómo, ni por qué, pero simplemente levantó su brazo vendado y le acarició la cabeza con la palma de su mano y los dedos que le quedaban. ¿Genya tendría esa misma altura la última vez que lo había visto sonreír así?
—Cuídate —le dijo entonces él, siguiendo su camino por el pasillo.
Le hubiese gustado disculparse por otras cosas también, por cómo fue su primer encuentro, por haber cortado su cuerpo en frente de ella, por exponerla a su sangre sabiendo lo que podría haber provocado. Pero sabía que no sería una disculpa sincera. Aquel comportamiento que ahora lo avergonzaba había sido verdadero en ese momento, y honestamente no había pensado lo suficiente en ello como para cuestionarse su actuar, no podía retractarse.
Pero ya tendría tiempo para pensar.
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Sé que es sólo un pequeño drabble, pero ¿qué les parece la idea? Considero que hay muy pocos fics de este manga, a pesar de que creía que era bastante popular :( así que quise hacer algo y esto se me ha ocurrido.
Sanemi es un personaje que me ha gustado mucho, pero siento que su historia, tanto pasada como presente y futura, tenía mucho potencial y se vio cortada de pronto (al igual que la de muchos personajes).Por eso decidí aventurarme a darle una vuelta a su vida una vez que la historia principal terminara (por lo que, como podrán sospechar, el capítulo 205 queda fuera de este fic).
¡Nos leemos en la segunda parte~!
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Resiliencia
FanfictionADVERTENCIA: Spoilers del manga. Def: Capacidad de adaptación de un ser vivo frente a un estado perturbador o situación adversa. Cada mañana era para Sanemi una nueva oportunidad para preguntarse por qué no había muerto y para qué seguía vivo. Entre...