Josie Pye había tenido incontables novios a lo largo de su vida. El primero había sido Steven, el exmejor amigo de Anne con quien no se hablaba desde que tenía unos seis años. Luego siguieron varios a los que había besado, de otras ciudades, o que había conocido por internet. Hasta llegar a tener una grandísima duda ¿Billy o Moody? Anne pensaba que Moody era mejor para su amiga, tomaba clase de arte con ella y era un buen chico. Mientras que Billy no le parecía tan confiable, era un chico mayor, totalmente tóxico y con problemas de ira. ¿Lo peor? Todos sabían eso, solo que nadie se lo decía porque según ella su tipo de hombre era un Hardin Scott de las novelas de «After» que tanto le gustaban.
—Deberías cuidar tus palabras, querida —Josie se rodó unos asientos de ella.
Anne volcó sus ojos de nuevo. «Las cuidaré cuando quiera, a mí que demonios me importa eso». Pensó.
—Anne, ¿quieres ir hoy a mi casa? —preguntó Ruby tratando de mejorar la situación o haciendo que se sintiera mejor.
«¡Caray! ¿Tanta lástima doy?». Volvió a pensar.
En realidad solo estaba distraída, las palabras de esas huecas jamás tendrían impacto en ella, o al menos eso tenía en mente durante aquellos días.
—¿Puedo ir yo también? —Jerry entró a la conversación.
Jerry era su mejor amigo, un chico que hacía unos pocos años se había mudado de Francia.
—Yo también iré —habló Diana.
—Claro, pueden ir. Solo no destruyan mi casa, por favor. Mi madre se volvería loca si eso pasara.
Y esa tarde fue donde empezó todo. Luego del té, la chica de cabellos rojos caminó unas calles y llegó al lugar, una casa bastante sola para hacer lo que quisieran por unas horas. En ese momento ella pensó que la casa de los Cuthbert nunca estaba sola.
—¿Que les parece si hacemos churros? —sugirió Jerry mientras hojeaba un grueso libro de cocina— Tenemos todo lo necesario.
Diana hizo una mueca de desagrado.
—Mejor hagamos cupcakes, Ruby tiene mucha experiencia en ello y nos llenará más.
—Pues yo pensaba en hacer pie de manzana para Anne —respondió en medio de un susurro.
En ese momento ella miraba por la ventana de la cocina Gillis. Tenía vista a su pequeño jardín trasero, aunque una alta pared gris y un poco de tierra árida no ayudaban mucho en el cambio de su humor. Solo volvía las cosas mucho más deprimentes.
—¿Quieres que hagamos pie de manzana, Anne? —le preguntó Diana con el mismo susurro.
—Hagan lo que quieran, no tengo hambre.
Luego de esas palabras todo pasó muy rápido aquella tarde, pensaron que Anne no podía estar así y decidieron animarla un poco. Minutos más tarde se encontraba muerta de la risa y envuelta en una conversación acerca de cócteles. Parecían ebrios. Unos ebrios con el rostro lleno de harina y que comían masa de galletas.
—¿Que les parece esto? —Ruby tomó la palabra y empezó a hacer señas con sus manos— Coloridas flores por aquí, rollitos primavera y un delicioso sushi, café o té con galletas de tonos pasteles y flores impresas en estas ¡sería una hermosa fiesta primaveral!
—¡Que va! —Jerry soltó un resoplido—Miles de hojas cafés y amarillas por acá; churros, waffles y jugos de los mismos tonos, mucha Coca-Cola y... ¡Pum! ¡Al diablo con tu maldita fiesta primaveral!
—Pues me parece mejor la idea de una fiesta de verano —Diana miró los rostros de cada uno.
Hubo silencio por unos segundos.
—¿Como sería eso? —preguntó Anne luego de pensarlo varias veces.
—Pues verás, es muy sencillo...
Y así, sin saberlo, sin darse cuenta, sin imaginarlo se estarían adentrando a la que probablemente sería la mayor locura de sus jóvenes vidas.

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「𝐏𝐚𝐫𝐭𝐲 𝐟𝐚𝐯𝐨𝐫 ; 𝐀𝐧𝐧𝐞 𝐰𝐢𝐭𝐡 𝐚𝐧 𝐄」
أدب الهواة¿Podrían una decepción amorosa y un ridículo plan llevarte a conocer a tu alma gemela? Fecha de inicio: 21.07.2020. Fecha final: 01.09.2020. #2 en Anne: 20.09.2020.