1.56; Rosas rojas. Nada más.

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Narra Gunner:

{ Gunner Flashback:

Era la primera vez en mi vida que me arriesgaba tanto con tal de ver a una persona. Tenía toda la  mañana pensando en cómo podría hacer para poder salir aquella noche de viernes. 

Mi madre no me había permitido salir, porque: "Gunner, estas en temporada de exámenes, debes tener un buen promedio para la universidad..." Y así había sido durante toda la tarde. 

Estaba encerrada en mi habitación. Sinceramente las ideas se habían esfumado y me había resignado a no ver aquellos ojos que con tanto entusiasmo me habían invitado a una noche de auto-cinema en el parque del centro.

Me ilusioné por primera vez en mi vida. Era una chica de pocos amigos, pocas relaciones, poco de todo. Simplemente me gustaba pasar desapercibida para todo y todos. Y con la poca gente que me rodeaba era más que feliz.

Pero aquella noche, por primera vez, quise ser diferente. Él parecía ser diferente, y yo no parecía encajar para alguien como él. Cuando me dirigió la palabra. Cuando me miró luciendo aquella sonrisa sincera, de verdad sentí que había desperdiciado valiosos años de mi vida tratando de ser diferente. Tratando de hacer las cosas bien.

"Gunner, debes darte a respetar" "Gunner, tus notas deben ser buenas." "Gunner, Gunner, Gunner..." 

Así era. Y aunque mis padres eran permisivos, en ocasione me asfixié tratando de cumplir con sus expectativas tan altas sobre mi.

Decidí tomar un baño después de haber terminado la tarea de algebra. Quería dejar de pensar en todo y en nada al mismo tiempo. Estaba preparando la tina cuando el timbre de la casa se escuchó resonar. No le tomé atención. Tal vez eran los amigos de mis padres, que venían religiosamente cada viernes a jugar bingo y poker.

- ¡Gunner! - Mi madre gritó desde la puerta de entrada.

Bufé para mi misma mientras cerraba la llave de agua caliente con la que pretendía darme un baño relajante. 

- ¡Ya bajo! - Grité antes de salir de mi habitación con los ánimos y las ganas de ver a los amigos de mis padres por el suelo.

- Te buscan, hija- Mi  madre, de la misma forma amable de siempre me dejó con una de mis amigas mas cercanas de la preparatoria.

- Meg, ¿pasa algo? - Pregunté al momento de llegar al último escalón mientras quedaba frente a ella.

- Las dejo, chicas. Quedas en tu casa, Meg - Mi madre se despidió mientras la observaba entrar a la sala de estar.

- Gracias, señora Blade - Meg era linda, inteligente, pero por sobre todo, astuta. Tenía un par de novios regados por la ciudad. Un tipo de pacto con el maestro de física, tanto así, que pasaba sin entrar a clase. Oh, y cabe  mencionar que su vida sexual era más activa que la alarma de una tienda de antigüedades - Gun - Me miró con ese brillo en los ojos que me indicaba que algo planeaba y sabía que saldría bien.

-  Para ser una loca, eres buena para ocultarte del radar de malas influencias de mi madre - Me crucé de brazos mientras la miraba con poco interés.

- Eso lo discutimos después - Me hizo la seña de hablar más bajo - Chris nos está esperando afuera, así que si quieres salir con él, solo sígueme la corriente - La miré confundida sin entender nada - Tu madre ya aceptó que vayas a una cena familiar a la que mis padres te invitaron.

- Meg...

- ¿Listas? - Mi madre entró por el marco de la sala y nos miró a ambas con tranquilidad.

Llévame a la cima... (Douglas Booth as Nikki Sixx)Where stories live. Discover now