1.7; ¿Recuerdas?

153 12 0
                                    


- ¿Nikki? - pregunté queriendo escuchar la respuesta.

- Una larga historia, Gun - Respondió mientras metía sus manos dentro de los bolsillos de su chaqueta de cuero y jugueteaba con las suelas de sus botas.

- Tal vez algún día puedas contármela, pero por ahora, te esperan - Me giré hacia la puerta de entrada al hotel.

- ¿No puede ser ahora mismo? - Me detuvo por el brazo suavemente.

- Podemos tomar algo en el bar del hotel - Le dije mientras miraba su mano aprisionando mi brazo. Me soltó suavemente al observar mi reacción.

- Bien- Me regaló media sonrisa. Y con toda sinceridad puedo decir que no recordaba que existiera tanta formalidad entre nosotros. O era simplemente el hecho de que ambos habíamos tenido que madurar de forma rápida.

Yo tenía veinte años recién cumplidos, así que para mis padres era complicado el hecho de tener que dejarme ir sin la mayoría de edad en mi haber, pero si con una mente madura, o eso creía yo.

- ¿Te molestaría esperarme aquí? - Me giré hacía él cuando estuvimos en medio del vestíbulo - Necesito... - Me quedé callada después de toparme con sus ojos verdes - Necesito llevar esto a mi habitación - Le mostré el acetato que llevaba debajo de mi brazo izquierdo.

- Si quieres, puedo acompañarte - Me lo dijo de una manera tan despreocupada que terminé aceptando.

Nos acercamos al ascensor, él lo pidió y las puertas de metal se abrieron automáticamente frente a nosotros. Me cedió el paso de forma amable. Estar con él, en un lugar encerrado, jamas había sido un problema, hasta esa noche.

- Eres diferente - Comenté sin mirarlo, solo sintiendo su mirada sobre mí, extrañado y divertido por ello.

- ¿Cuando fui normal, Gun?

- Supongo que nunca, por algo eramos los raros de la escuela - Recordé cada cosa que vivimos juntos durante la niñez y parte del inicio de nuestra adolescencia - Nunca lo fuiste - Recargué mi cabeza sobre uno de los muros de la caja de metal mientras esperaba que el contador de pisos anunciara la llegada al número seis.

- Nunca lo fuimos - Terminó de decir cuando las puertas se abrieron y una pareja se detuvo cuando vieron a Frank parado frente a ellos. No sabía como interpretarlo, pero el temor asomó en sus ojos ante su presencia.

Me tomó de la mano y me jaló fuera del ascensor para cederle el paso a la pareja - Buenas noches - Frankie fue amable, incluso teniendo su facha de chico malo puesta.

- Vaya, ¿eres un chico rudo, verdad? - Soltó mi  mano cuando las puertas del ascensor se cerraron detrás de nosotros, llevándose a la pareja de nuestra vista.

- Sigo teniendo algo de educación gracias a is abuelos y a tu madre - Me sonrió amablemente y con familiaridad.

- A mi mamá le gustará saber que sigues con vida, Frankie - Traté de sonar lo mas cálida posible. Hacerlo sentir cómodo en el momento.

Me giré para buscar el número de mi habitación. Lo encontré a la mitad del pasillo sin problema. Metí la llave dentro de la cerradura abriéndola fácilmente. Entré esperando sentir los pasos de Frankie detrás mío.

Al girarme me di cuenta de que él estaba parado en el umbral de la habitación esperando a que saliera. 

- Vamos Frankie, pasa - Traté de animarle. Tuve esa sensación como el día que se había ido. Tenía que hacerlo entrar.

- No quiero invadir tu espacio, Gun - Me reí un poco ante lo que había dicho.

- Frank, no sé si lo recuerdas, pero eso no te impedía terminarte mi pastel de carne cuando te invitaba a comer a mi casa - Reí ante aquellos recuerdos, él me hizo coro para después entrar a paso lento cerrando la puerta detrás de él - Además verte parado ahí me recordó al día que te fuiste.








Llévame a la cima... (Douglas Booth as Nikki Sixx)Where stories live. Discover now