𝟘𝟘𝟠: 𝐽𝑢𝑠𝑡𝑖𝑐𝑖𝑎 𝑎 𝑀𝑢𝑟𝑟𝑎𝑦

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No dormí ni un poco, me mantuve despierta todo lo que quedaba de la oscura y fría noche. Quería gritar, correr, huir y morir, tal vez mi hermana no fue la mejor todo el tiempo pero nadie merece la muerte, y menos como ella la sufrió. ¿Dónde estará ahora? ¡Oh hermana mía! Espero que estés bien en donde sea que estés.

Me levanté de la cama, me puse un suéter, zapatos, tomé mi celular y salí corriendo hacia el estanque, quería estar en paz conmigo misma, quería hablar con mi hermana, suena demasiado raro dando por hecho que ella está muerta ya, pero ¿Qué importa? Quiero visitarla.

Al llegar habían tres autos de policía aún, no podíamos estar solas.
Mi hermana yacía en el suelo cubierta con una sábana blanca, rodeada de policías.

Corrí hacia allá y me arrodillé frente a mi hermana, comenzando a llorar una vez más.

—¡señorita! aléjese de el cadáver
—exclamó un policía tomándome de la cintura para alejarme de ahí.

—¡no, es mi hermana! —exclamé intentando quitar las manos de aquel oficial de encima mío.

—señorita, ya basta —exclamó.

—es mi hermana, ¡déjeme verla!
—insistí.

—Porter, déjala ver a su hermana
—exclamó un policía más joven defendiéndome y aquel policía me soltó.

—perdóname —susurré. —si hubiera hablado antes hubiera podido rescatarte y seguirías viva —exclamé con la voz entre cortada, llorando.

—estaré bien —susurraron a mi oído, como si aquel claro susurro fuera parte del viento que acariciaba mi rostro, y que cada vez se intensificaba más.

El sonido de llantas de bicicletas se hicieron presentes en el lugar, acompañados de voces conocidas que exclamaban mi nombre alarmados.

—__________ —exclamó, me levantó tomándome de los hombros por detrás y volteé a mirarlo, su ceño fruncido y mirada preocupada eran tan intensos que me hizo preocupar más. —¿Estás bien? Me dijeron que...

—¿es cierto? —me hice a un lado y el tapó su boca con las manos, luego me miró y todos me abrazaron.

—no fue cualquier muerte, Levi
—exclamé mas seria y ya sin derramar lágrimas. –la asesinaron, hicieron "justicia" de un tal Murray, aseguraron que su muerte fue por culpa de mi hermana, ella atormentaba, lo acepto, pero no es capaz de asesinar a alguien

—voy a ayudarte, te ayudaré a averiguar que pasó y quién la asesinó
—exclamó serio.

—igual yo —dijo Joey, seguido de Tobby, Annie y Ethel.

—gracias chicos —sonreí.

El Alcalde de aquel pueblo se hizo presente en el estanque, serio y con una mirada que daba terror.
Comenzó a hablar con los oficiales un buen rato y luego se dirigió a nosotros.

—¿Quién es Maggie Ghallow?
—exclamó.

—era mi hermana, señor —dije con una sonrisa forzada en la cara.

—hija, necesito hablar contigo —me abrazó por los hombros y me separó de mi grupo, miré a Levi y volteé a mirar al alcalde.

Era robusto y grande, llevaba un traje grande color azul marino con una corbata roja de rombos, y zapatos negros donde podías ver un reflejo distorsionado de tú cara. Sus manos eran gordas y grandes, su cabello era negro y tenía poco cabello en la corona de la cabeza.

—decidimos que yo pagaré el funeral de tú hermana ya que todo fue un accidente, no cobraremos por nada, será algo lindo y formal —exclamó con una voz rasposa.

—gracias señor —exclamé con una voz temblosrosa tratando de no llorar, me veía demasiado débil y chillona en estos momentos, pero no podía dejar de hacerlo, comprendeme.

Blue, Like A Nightmare - Levi Miller Donde viven las historias. Descúbrelo ahora