Atrapada

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---Cálmate, por favor, Kurosaki-san ---pidió Urahara en su habitual tono relajado, pero con una expresión mortalmente seria en su rostro.

---¡¿Cómo quieres que me calme, Urahara-san?! ---vociferó Ichigo con los ojos llenos de furia, propinándole un quinto puñetazo cargado de frustración al suelo rocoso del lugar de entrenamiento bajo la tienda de Urahara Kisuke---. ¡Vi cómo se la llevaban frente a mis ojos, y no pude hacer nada para evitarlo! ---Cerró los ojos y apretó los párpados con fuerza---. ¡Mierda!

---No fue culpa tuya, Ichigo ---le consoló Rukia, colocando una mano sobre el hombro del Shinigami Sustituto.

---Como dice Urahara-san, tienes que conservar la calma, Kurosaki ---añadió Ishida, ajustándose los lentes con una mirada de aflicción---. Todos estamos preocupados por Amaya-san, pero debemos mantener la cabeza fría y centrada si queremos rescatarla.

---Seguro que Yoruichi-san regresará pronto con la información que necesitamos ---agregó Renji.

---¡No te preocupes, Kurosaki-kun! ---animó Orihime con pueril entusiasmo---. ¡Amaya-san es una chica muy fuerte!

---Sí. Seguro que está bien ---apoyó Sado.

---¡Ya regresé! ---anunció Yoruichi, provocando que todos se abalanzara hacia ella.

---¡Yoruichi-san! ¿Averiguaste algo? ---soltó Ichigo al instante.

---Todo. Con la ayuda de Byakuya, descubrí algo que nos ayudará a sacar a Amaya del palacio de los Isamu sin ser detectados ---respondió con seguridad la aludida.

---¿Estás segura de que es ahí donde tienen a Amaya-san? ---preguntó Ishida.

---No puede estar en ningún otro lugar ---intervino Urahara.

---Escuchen con atención ---dijo Yoruichi con seriedad, sacando un pergamino de su traje y desenvolviéndolo para que todos pudiesen verlo---. Este es un plano de la mansión Isamu. Como decían los rumores, bajo el palacio se extiende una amplia red de túneles subterráneos que, por suerte para nosotros, han caído en el olvido convirtiéndose en una mera leyenda. Los únicos documentos verídicos que confirman su existencia están en manos de los encargados de llevar los registros de la historia de la Sociedad de Almas; o sea, el Clan Kuchiki. Por eso, pedí ayuda a Byakuya.

---Sin embargo, no será tan fácil ---continuó Urahara---. La entrada a esos túneles está oculta por un reiatsu difícil de detectar. Solo un experto en detección de energía espiritual como Ishida-san sería capaz de encontrarla.

---Será un placer serle de ayuda a Amaya-san, aún sin mis poderes ---dijo Ishida con una sonrisa.

---¡Urahara-san, abre la Senkaimon, por favor! ---exclamó Ichigo, esbozando un gesto decidido---. ¡Vámonos!

Cuando el portal que conectaba el mundo humano con la Sociedad de Almas estuvo listo, los seis amigos y Yoruichi se precipitaron dentro sin la menor sombra de dudas.

Fui conducida sin ningún cuidado al despacho de Isamu Kazue. Con las manos atadas tras mi espalda y tirada de rodillas en el suelo, Takeshi El Sabio me dejó allí completamente sola durante lo que me parecieron horas. Cuando mi cuerpo ya empezaba a doler por la incómoda posición que se había visto forzado a adoptar, la puerta del despacho se abrió para dar paso a la odiosa figura de Isamu Kazue.

---Lamento haberte hecho esperar, mi ilustre invitada ---siseó aquel hombre con su desordenado flequillo cayendo sobre ese aparentemente inocente rostro---. Espero que sabrás dispensarme. Esa aburrida reunión administrativa duró mucho más de lo que pensaba.

Melodía salvaje, lluvia nocturna [Bleach- Fanfic]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora