MARATÓN 3/4
- ¿Puedo decir algo al respecto?- Paul intentó a hablar por decimo sexta vez.
- No - Diane estaba de brazos cruzados y miraba entre Margot y yo - ¿Pensabais decírmelo?
- ¿Para qué? Si te llegamos a avisar, hubieras estado semanas enfadada y despotricando sin razón alguna. Además Alex no sabía cuando vendría, he sido yo quien ha estado hablando con Paul todo el tiempo para que le diera una sorpresa.
- Ya, pues resulta que este piso es de las tres, y creo que tengo voz y voto en sobre a quién se invita.
- No tienes que pasar tiempo con él si no quieres.
- Eso es difícil cuando vivimos en un piso de sesenta metros cuadrados, con UNA cocina, UN salón y Un baño, porque el otro lo tiene Alex en su habitación.
- Ya está bien Diane, estás siendo super irrespetuosa. Paul es mi amigo, ha venido a verme y estoy muy contenta. Va a dormir en mi habitación y usará mi baño, sólo ignora que está.
- ¿Dormir juntos? - intervino Paul pero lo silencié con una mirada, no era momento de bromas.
- ¡Pues genial! - Diane se levantó enfadada - Avisadme cuando este ser se haya ido de casa.
Ninguno de los tres dijo nada mientras ella recogía un par de piezas de fruta y se encerraba en su habitación dando un portazo.
- ¿Por qué siento como si le hubiera arruinado la vida?
- Didi suele hacer eso, es experta en el arte del chantaje emocional. Se le pasará - dijo sin inmutarse Margot, que estaba acostumbrada a los berrinches de nuestra amiga.
- Así que... dormir juntos ¿eh? - Paul movió sus cejas hacia mí - Por fin, creí que este viaje de cinco horas había sido para nada.
- No empieces - me lancé a darle un abrazo en condiciones - ¿Cómo es que avisas a Margot y a mí no? Estoy oficialmente celosa.
- Quería darte una sorpresa, pero no ha salido como lo esperaba.
- En realidad sí, estoy muy contenta. ¡Pero si lo hubiera sabido hubiera organizado el fin de semana!
- Sabes que yo soy más de improvisar, así que no te estreses Tarner - fue con sus cosas a mi habitación y escuchamos ruidos de cosas siendo colocadas y arrastradas.
- Gracias Margot - no le di un abrazo porque Margot no era muy fan del contacto físico en general.
- No hay de qué - guardó su libro en un cajón de la mesa - Por cierto, me he apuntado a debate.
- ¿Qué? ¿En serio? - sonreí porque sabía que a ella le gustaba mucho esa actividad - Creo que has hecho bien.
- Sí yo también. Es como si el tiempo que estoy allí desconecto y me sirve para entretenerme. Además se aprenden un montón de cosas, ¿Sabías que existe una alegalidad respecto las emisoras de radio del Estado? Es increíble.
Siendo sincera, no tenía ni idea de lo que era la alegalidad de emisoras de radio.
- Bueno, todos los días se aprende algo nuevo.
- Sí, hoy he aprendido que no se pueden meter calcetines rojos con camisetas blancas en la lavadora - dijo Paul entrando al salón con una camiseta que en algún momento fue blanca y que ahora era de tonos rosados y rojos - ¿Lista?
- ¿Para qué? - a pesar de no saber a qué se refería me levanté del sofá.
- Para ir a merendar, tengo hambre. Pero sugiero que te pongas al menos unos pantalones. No pienso ir por la calle contigo vestida así.
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Time Out ( Guerra de Capitanes #2)
Romance- ¿Por qué lo has hecho Alex? - soltó mis brazos como si mi tacto quemara. - ¡Por ti maldita sea! - mi piel picaba por tocarle de nuevo. - ¡No te lo he pedido! - ¡Tampoco yo te estoy pidiendo que me des las gracias! Nos miramos durante unos segun...