Capítulo 17: Marca

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Al quedarme solo en mi habitación, me deje caer sobre la cama pensando en lo que paso el día anterior, tratando de ordenar los recuerdos de esa noche que estaban confusos y revueltos a causa del alcohol que había bebido en el baile. Por un momento me pregunte si lo de que Alois era un vampiro había sido un sueño pero no se había sentido como tal.

Me puse de pie, observe mi reflejo en el espejo notando que había ojeras bajo mis ojos azul zafiro, seguí mirándome y entonces las vi: Dos pequeñas marcas circulares en mi cuello a no mucha distancia una de la otra, marcas de colmillos que se habían clavado en mi piel.

No me sentía aterrado ni tampoco enojado, pues ya había tenido el pensamiento de que seguramente Alois bebería mi sangre tarde o temprano, sin embargo me disgustaba un poco que lo hubiera hecho sin mi permiso y en mi estado de ebriedad. Además me sentía bastante débil y quizás era por eso.

Sali de mi habitación luego de cambiarme de ropa y darme un baño, Alois me había dicho que me alcanzaría en el comedor pero quería hablar a solas con el así que fui a su habitación. Tuve que tocar la puerta pues había cerrado con llave, me abrió y me dijo que pasara para luego recostarse en su cama. Parecía bastante cansado o desanimado pero ya me había acostumbrado a sus constantes cambios de humor.

-Alois...- Comencé, sentándome a su lado y acariciando su cabello rubio.- Bebiste mi sangre anoche, ¿Cierto?

Se sentó de golpe, me observo por un breve instante y comenzó a llorar.

-No llores, no estoy molesto.- Le dije abrazándolo inmediatamente, tal vez se sentía culpable por haberlo hecho.- Yo entiendo que tengas que beber sangre, puedes beber la mía pero preferiría que lo hagas mientras estoy consciente.

-Lo he hecho, lo he hecho algunas veces y lo siento.- Admitió aun sollozando, se abrazó más fuerte a mi.- Pero anoche no fui yo.

Lo aparte sorprendido y asustado, si no fue el ¿Entonces quién?

-Fue Claude, Claude estuvo aquí anoche.- Me explico limpiando sus ojos, sus palabras me dejaron perplejo.- Yo estaba dormido a tu lado, desperté y vi a Claude beber tu sangre así que me enfurecí con él.

Empecé a analizarlo todo, entonces anoche Alois estaba peleando con Claude, se habían lanzado del balcón.

-Cuando bebo tu sangre, tengo mucho cuidado de no lastimarte.- Comento ante mi silencio.- De no dejar marca y no tomar demasiada para que no te sientas débil por ello... Pero Claude, pudo haberte matado... Creo que eso quería.

Por mi mente pasaba su historia, la historia que me conto el día anterior cuando me confeso lo de ser vampiro: Claude había sido su amante, le traiciono y le rompió el corazón. Sin embargo, el día en que Alois llego a la mansión venia con él, Claude seguramente era ese hombre que estaba mirando desde el coche.

-Si es así de malo, ¿Por qué sigues junto a él?- Le pregunte sintiéndome ahora si molesto, pensar que aun guardaba sentimientos por el me lleno de enfado.

-No tengo opción... No lo sabes todo aun.- Dijo con una expresión triste recostándose de nuevo en la cama y cubriéndose el rostro con las manos.- Vas a odiarme.

-Cuéntamelo todo.- Pedí recostándome a su lado.- Entonces yo decidiré si te odio o no pero siendo sincero no me veo capaz de odiarte.

-¿Por dónde empezar?- Pregunto dudoso.

-Desde donde te quedaste ¿Que le paso?- Pregunte ansiando saber, me miro sin comprender.- A Luka.

-Una noche simplemente desapareció.- Su mirada azul cielo era triste pero a la vez fruncia el ceño y apretaba los puños.- Días antes, yo había tenido una discusión muy fuerte con Claude.

-¿Por qué?

-Él quería que volviéramos a ser amantes y yo me negué, en un punto de la discusión le dije ''Tengo todo el amor que necesito gracias a Luka''.- Sus ojos se cristalizaron.- No debí decir eso porque Claude creyó que si lo alejaba de mí, entonces yo volvería a estar con él.

-¿Jamás encontraste a Luka?- Pregunte.

-Lo buscamos durante años, mientras tanto estaba hundido en una profunda tristeza y Claude se aprovechó de ello.- Fruncí el ceño, odiando cada vez más a ese hombre del que me hablaba. Alois sonrió por un breve instante.- Hasta que lo encontré, Luka estaba con sus verdaderos padres y había crecido mucho, ahora era todo un jovencito. Fue cuando me conto que esa noche, Claude se lo llevo en contra de su voluntad y lo devolvió a sus padres.

Escuchaba atento su historia, tal vez estaba bien que el niño hubiese regresado con sus padres pero fue un bien hecho con intenciones egoístas.

-Luka estaba agradecido conmigo por haberlo cuidado, se alegró mucho de verme, su familia huía de la ley pero él era feliz... yo estaba dispuesto a dejarlo ir. Cuando regrese le conté a Hannah, ambos le reclamamos a Claude y le dijimos que nos iríamos pero apareció con los trillizos que al parecer seguían sus órdenes... No nos dejó ir, fue una pelea muy fuerte que no pudimos ganar.

Las lágrimas volvieron a bajar de sus ojos y le acaricie el rostro limpiándolas con delicadeza.

-Fue así como inicio nuestra convivencia forzada, Claude no está dispuesto a dejarnos ir, una vez conseguí escapar... Pase un tiempo con Luka.- Sus labios temblaron, se cubrió el rostro con las manos y sollozo, lo abrace acariciando su cabello hasta que finalmente le escuche decir.- Claude lo asesino.

Sus sollozos continuaron y yo intentaba darle consuelo, quería que me siguiera contando pero no dejo de llorar hasta que la puerta de su habitación fue abierta y Meyrin apareció.

-Joven amo, lamento no tocar, escuche un llanto.- Dijo la sirvienta preocupada, ya nos habíamos separado y puesto de pie ante su irrupción.- Su padre me mando a buscarle, joven Ciel, porque no bajaba al comedor ¿Qué le pasa al joven Alois?

-Estoy bien, solo tuve una pesadilla.- Mintió Alois inmediatamente secando sus lágrimas con el dorso de la mano.- Ciel vino porque me escucho llorar.

-Adelántate, bajaremos en seguida.- Le dije a Meyrin.

En cuanto nos dejó a solas, le di un dulce beso en los labios a Alois.

-Después me contaras que más paso.- Dije en cuanto nos separamos, confiado en que así sería.- Debemos ir al comedor.

La mansión es tan grande y tiene tantos pasadizos que puede haber intrusos sin que nadie se percate de ello, pensé mientras caminábamos por el pasillo hacia el comedor.


N/a:  He vuelto, me puso muy contenta ver que esta historia llego a 1K de lecturas, en verdad muchas gracias por su apoyo. Espero que les este gustando, no olviden dejar su voto y/o comentarios, yo feliz de verlos. Faltan aproximadamente 5 capítulos para el final, besos.

El invitado | Ciel x AloisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora