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Luego de dejar a Minseok en su casa, Kyungsoo aceptó quedarse a dormir con Baekhyun luego de mucho pedirlo el mayor. La noche fue muy bonita, como en los viejos tiempos: vieron una película en la cama mientras se llenaban el estómago con las palomitas de maíz cubiertas por la mantequilla que tanto le gustaban al menor. De vez en cuando recibían besos de parte del otro y se abrazaban mientras conversaban, porque sí, Kyungsoo había decidido aferrarse a su decisión y tener el mejor noviazgo que pudiera lograr con un chico, que a pesar de todo, lo amaba. Si había algo de lo que no le cabía duda era del inmenso amor que sentía Baekhyun hacia él.

Eran cerca de las tres de la madrugada, el pelinegro dormía plácidamente mientras el rubio lo observaba. Sí, si Kyungsoo se despertara y lo descubría de seguro se asustaría, pero no le importaba. Había soñado tantas noches tenerlo a su lado, había fantaseado por meses y meses poder besar sus labios una vez que ahora que lo tenía, no se lo creía del todo. Un ligero sonido lo hace cambiar la mirada hasta el celular que estaba en la mesita al lado de la cama, con miedo a que su novio despertara lo tomó para ponerlo en silencio, pero sin querer pudo ver el remitente del mensaje: Chanyeol.

 Un ligero sonido lo hace cambiar la mirada hasta el celular que estaba en la mesita al lado de la cama, con miedo a que su novio despertara lo tomó para ponerlo en silencio, pero sin querer pudo ver el remitente del mensaje: Chanyeol

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Celos, eso fue lo primero que recorrió su cuerpo.

Odio, la segunda sensación que lo inundó.

Rabia, esta fue la peor, la que causó que tomara el mensaje y en un abrir y cerrar de ojos lo eliminara sin siquiera pensar en las consecuencias

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Rabia, esta fue la peor, la que causó que tomara el mensaje y en un abrir y cerrar de ojos lo eliminara sin siquiera pensar en las consecuencias.

Do Kyungsoo era suyo, mucho le había costado recuperarlo y no lo volvería a perder, mucho menos por el estúpido Park.

Sin escrúpulo alguno puso el teléfono una vez más en la misma posición, como si nada hubiese pasado, como si no acabara de romper el corazón de alguien con solo un toque. Nada de eso tenía relevancia, además, si iba a perder no sería frente al poste, eso sí que no.

La mañana llegó y Kyungsoo se encontró en brazos de su novio, quien aún dormitaba con su ceño fruncido, de seguro soñaba algo feo. El pelinegro sonrió al verlo así, besó su frente y se fue al baño para al menos verse presentable para aquel que estaba en la cama. Se acomodó el cabello, lavó su rostro y se vistió para bajar a la cocina, necesitaba conseguir algo de líquido para beber, le urgía hidratarse.

Mi Acertijo |ChanSoo|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora