Marckyle Pride Month

Día 3.

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¿Como fue su primera cita?

—Entonces, ¿que tal tu cita con Marco?

—Definitivamente fue algo... Diferente.—Comentó Kyle bebiendo de su taza de café mientras los hermanos Hamada lo miraban atento esperando a que elaborara más en su respuesta, pero como siempre tendrían que preguntar algo más especifico si realmente querían averiguarlo.

 💕

—¡Miguel! ¡Fue horrible, un desastre!— Se quejó dramáticamente el moreno de ojos ámbar derritiendose sobre la mesa del comedor mientras su hermano comía un tazón de cereal y lo ignoraba olímpicamente.

—¿No me vas a preguntar que pasó?

—No, siempre que tienes una cita romántica como un ser humano decente dices lo mismo y yo tengo que pasar horas escuchando una historia completamente exagerada sobre una cita que claramente no fue mala.

—Bueno pues me vale madres, te seguiré hasta el baño de ser necesario con tal de que escuches mi historia.—Miguel rodó los ojos y se sentó frente a la reina del drama que tenía por hermano, sabiendo que de igual forma no se iba a librar de él.

Marco se arreglo esa tarde lo mejor que pudo, no era para menos de todos los enamoramientos que tuvo en su vida ninguno era comparable al que tenía por Kyle, apenas se vieron en un par de ocasiones en uno de sus bares favoritos y ya estaba seguro que quería que fuera el padre de todas sus bendiciones y por esa razón su cita debía ser perfecta, comenzando con una cena en uno de sus restaurantes favoritos y donde no podía pagarse una cena frecuentemente por lo caro del lugar, pero por ese chico del bar valía la pena vivir a base de pan y agua por unas semanas.
Además Kyle menciono ser chef y tenia miedo de llevarlo a las hamburguesas de ramen y lo termine odiando por sus gustos de pobre.

Así que ahí estaban en Curcuma, apenas llegaron su cita puso una cara indescifrable y a Marco le comenzaron a comer los nervios, por suerte ya tenía una reservación, solo debía pedir su mesa y pasar una agradable velada.

—¿Te llevo a cenar al restaurante que trabajas?

—Bueno eso es tu culpa por salir con alguien y no decirle algo tan básico como eso.— Tadashi regañó, haciendo a los otros dos rodar los ojos.

—No fue tan malo, después de todo si es el mejor restaurante en esta ciudad, y me alegra que lo aprecie. Pero eso no fue lo más raro de la cita.— Confesó Kyle haciendo que ambos hermanos se acercaran intrigados.

💕

—De acuerdo lo llevaste a cenar a su trabajo ¿que más da? No creo que se molestara por eso.

—Sí y estoy seguro que hubiera sido buena idea quedarnos ahí para comer algo y conversar. Pero en busca de no aburrirlo terminé por pedirle que fueramos a otro lado.

—¿Y a donde fueron?— Preguntó Miguel temiendose lo peor.

—Al segundo mejor restaurante de San Fransokyo... Alinea.

—Oye no era ahí donde trabajaba...

—Sí.— Miguel soltó un pequeño Oh ante la realización de como se pusieron las cosas en la cita de Marco.

Alinea era un restaurante de buena calidad, no era nada comparada como el lugar ee Kyle, pero al menos era bastante decente como para pasar una noche agradable, consiguieron una mesa rápido a pesar de no tener una reservación y apenas se sentaron el chef ayudó a Marco a elegir un vino que maridara bien con el platillo del día. Apenas llegó el sommelier a presentar la botella de su elección interrumpiendo la amena charla entre ambos chicos.
Un buenas noches bastó que saliera de la boca del empleado para que Marco recordara porque es que conocía ese lugar, cuando volteó deseando que solo fuera un producto de su imaginación sus sospechas se confirmaron, su ex novio iba a atenderlos esa noche.