De regreso a ti

Su tarro de miel

4:30 am habitación de Yue

Trrrrr trrrrrr trrrrr... Su teléfono vibra en la mesita de noche. Yue ya lo ha ignorado dos veces; no logra encontrar la fuerza para responder.

¡¿Qué pasa?! ¡Dios mío! ¿Ya es de mañana? ¿Es hora de irnos?

Yue decide contestar la llamada a pesar de que todavía está oscuro afuera. Debe ser una emergencia.

"¿Shen Yue?"

"¿Dylan? ¿Estás bien? ¿Qué hora es?"

"Eso no importa. Lo que importa ahora es que te pongas tu traje de baño. Iré a buscarte en 10 minutos.

"¡Espera!"

"¡Date prisa!"

Dylan cuelga.

¿Qué rayos le pasa?

Yue no está procesando la información correctamente. Como un zombi, recoge lo primero que encuentra y se lo pone, luego se cepilla los dientes y se sienta en la cama, con la cabeza inclinada hacia un lado, casi dormida.

Toc toc.

Ella va hacia la puerta, abre y lo deja entrar con los ojos cerrados; cierra la puerta y comienza a moverse como una hormiguita por acá y por allá.

¿Me dejó entrar, así como así? ¡No está entendiendo nada! ¿Qué está haciendo?

Dylan está absolutamente fascinado. Ella se mueve por todos lados en su bikini de mariposas y él está embelesado por completo. Yue no tiene idea de lo que está haciendo, ni de lo que lleva puesto, a medida que se mueve sin ninguna meta.

Él se sienta en la silla y agarra su mano para detenerla por un segundo y darle los buenos días. Ella se sienta en su pierna; Dylan no se esperaba eso en absoluto.

"¿Qué ... qué estás haciendo?"

Ella lo mira y apoya la cabeza de lado sobre su hombro.

"¿Quién eres y qué has hecho con el dormilón de mi novio?" murmura ella.

"Shen Yue, por favor, ponte algo encima".

Pero ya está dormida. La tiene tan cerca que puede oler su aroma... Dylan inspira profundamente.

¿Por qué hueles tan bien, por amor del cielo! Es como... lavanda... ¡Estoy tratando de portarme como un caballero aquí! Me lo estás haciendo muy difícil.

"Shen Yue... ¡Despierta! Quiero llevarte a la playa antes de que todos los demás se despierten", susurra.

Ella se mueve un poco, pone ambas piernas sobre su otra pierna y se engancha en su cuello.

¡Juro que no vine aquí para esto! ¿Por qué me castigan así? ¡Solo quería hacer algo romántico contigo! Se queja por dentro mientras arruga los ojos.

Dylan ha estado tratando de no tocar la piel suave de Yue, pero se está volviendo más difícil ya que ella no se quiere despertar.

¿Qué hago ahora?

"Por favor, Shen Yue. Quiero ver el amanecer contigo en la playa".

Nada.

Él reúne sus fuerzas y su autocontrol y le pone las manos en la cintura. Traga grueso...

Su piel es tan lisa y cálida... Concéntrate, Dylan, concéntrate. Tenías un plan, síguelo.

"Ejem...", se aclara la garganta "Shen Yue, despierta", trata de sacudirla un poco.