No hay lugar como tú

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"¿Dylan? Rayos... ¿Estás ahí?"

Shen Yue escucha que agarra el teléfono y se siente aliviada.

"Shen Yue..."

"¿Estas bien?"

"Sí..."

"¿Que pasó?"

"Si me dejas hablar, te puedo decir..."

" ¡Lo siento, estaba tan asustada!"

" ¡Todo está bien, pero un venado cruzó la carretera de repente! Tuve que frenar y casi no lo logro... Los animales se están volviendo locos estos días..."

"Ay no... No puedo esperar a que estés en casa".

"Yo también. Vete a dormir ahora, ya es pasada la medianoche".

"¿Me estás tomando el pelo? Me quedo en el teléfono contigo hasta que llegues..."

"Nena, no tiene ningún sentido esperar despierta".

"¡Ni siquiera intentes convencerme de que cuelgue!"

"Está bien..."

Yue se queda en el teléfono con Dylan por un rato, pero luego se queda dormida. ¡Esa mujercita tonta! Sabía que se quedaría dormida; estaba agotada.

Dylan llega a casa a las 5.30 am y ella todavía está durmiendo. Su cuerpo siente su presencia, pero está demasiado exhausta para despertarse y moverse. Él hace exactamente lo que ella dijo que tenía que hacer con su ropa y se acuesta a su lado después de la ducha. Dylan también está cansado y lo único que quiere es dormir con Yue en sus brazos, así que se acurruca junto a ella, sintiendo su calor, escuchando su respiración tranquila y piensa: No hay lugar como tú, amor.

Unas horas después Dylan se despierta, pero su esposita no está pegada a su lado, cosa que le molesta tremendamente. ¡¿Dónde está?! ¿No volví a casa esta mañana?

Yue está sentada en su lado de la cama, escribiendo algo en un cuaderno, tratando de no reírse de los pensamientos de él cuando comienza a mover su brazo buscándola. Ella aguanta la risa mientras se aleja despacio de su alcance para fastidiarlo.

"¡Aaah! ¡Shen Yue! ¡Se que estás aquí! Si no vienes, ¡te juro que me compraré una cama más pequeña! ¡Muy pequeña!" exclama con su máscara de dormir todavía puesta.

Ella se rinde y se acerca para que él pueda abrazarla. Honestamente, ella tampoco veía la ora de estar de nuevo en sus brazos.

Dylan la abraza y comienza a acariciar su cuerpo con suavidad. Pero siente que hay algo diferente en ella... Él mueve su mano tratando de entender lo que está pasando y le aprieta el brazo, la cintura, la pierna ...

¡¿Qué?! ¿Quién es esta mujer?

Dylan se acerca para olerla y percibe ese maravilloso aroma a lavanda. Pero la siente rara entre sus brazos. Se quita la máscara para dormir y agarra sus gafas. Yue mira su rostro perplejo con curiosidad.

"¿Qué pasa?" ella pregunta.

"Ejem... ¿Quién eres y qué hiciste con mi esposa?"

"¿Qué?" pregunta confundida.

"Tenía una ternura de esposa y ahora hay una mujer intimidante en mi cama..."

"¡¿Eh?! Dylan, ¿estás seguro de que no te golpeaste la cabeza en el coche?"

Dylan se sienta y la mira atentamente, analizando cada detalle de su rostro y su cuerpo. Lleva una camiseta sin mangas y ropa interior porque se quedó dormida con el teléfono en sus manos mientras hablaba con él anoche, pensando que eventualmente se pondría la pijama. Y por la mañana, no quería abrir ningún cajón para no despertar a Dylan.

De regreso a tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora