Serie Second Chances: Mi luz en la oscuridad

Capitulo 13

Cristian

—No, basta, por favor— Me despierto, para ver a Natacha moviéndose y gritando como si la estuvieran matando, mi corazón sube a mi garganta

—Ssh, ssh bebe, tranquila no pasa nada— intento despertarla sus ojos se abren con lágrimas en ellos me mira un segundo y se levanta rápido de la cama

—Soy yo, Natacha estamos juntos— intento apaciguar la, en sus ojos se pueden ver rastros del pánico que le produjo la pesadilla

— ¿Cristian?— dice confundida, después mira a su alrededor y se mira ella misma, descubriendo que esta desnuda

—oh, mierda!— exclama y se cubre con la sabana, yo me levanto y voy hasta ella la abrazo y ella se tensa, me pongo igual, por temor a que ella vuelva a cerrarse o se arrepienta de lo que paso entre nosotros

—Lo siento tuve una pesadilla— su voz sonando amortiguada por mi pecho

—Está bien, estoy aquí— ella asiente y se aleja, me mira a los ojos y quisiera meterme en su cabeza o en su sueño para patear en el culo a quien sea que puso ese pánico en ella. Se sienta en la cama todavía tensa

— ¿Qué pasa?— ella niega, mira la cama y la pierdo por unos segundas en los que ella parece haberse ido lejos

—Solo fue una pesadilla— dice suspirando, me arrodillo frente a ella y me mira

— ¿Me abrazas?— me pregunta insegura, me da un vuelco el corazón

—Si mi vida— le digo suave y me acuesto a su lado, ella se enreda en mí y no puedo evitar sentirme enojado y complacido a la vez, enojado por verla vulnerable y complacido por tenerla entre mis brazos  confiando en mi

— ¿Natacha?— la llamo

— ¿Si?— levanto su mentón para que me mire a los ojos—quiero que sepas que nada absolutamente nada te va a pasar mientras yo esté vivo, te lo prometo— le digo ella asiente y veo como brillan sus ojos con algunas lágrimas juntándose

—Gracias— me dice y se acerca más a mí como si yo fuera su salvavidas, acaricio su cabeza y se va relajando de a poco hasta quedarse dormida. No puedo dormir sabiendo que ella esta frágil en su cabeza, en sus sueños y desearía poder estar con ella ahí, ¿es algo muy loco? Esta mujer saca el lado protector de mí, es que ella es tan frágil y dulce aunque no lo deje ver en todo momento lo puedo notar en pequeñas situaciones y pensar que al principio quede encantado con su cuerpo con su forma sensual pero ahora es algo mas no puedo encontrar exactamente las palabras que describan lo que siento por ella. Anoche cuando por fin pude hacerla mía pensé que iba a sentir la satisfacción de haberla conquistado pero fue mas por que fue como si su cuerpo estuviera hecho para mi, cuando estuve dentro de ella fue como la pieza de un rompecabezas uniéndose y se sentía todo mas intenso, espero que ella haya sentido lo mismo porque después de esta noche dudo mucho poder volver a acostarme con otra mujer

—Geraldine me posees en alma, cuerpo… y también corazón— le susurre al odio confiado en que no me escucha.

La mañana llego y asi el final de nuestro viaje de “negocios” porque para mí fue más de placer. Natacha está comiendo un sándwich mientras mira por la ventana, quise preguntarle por el sueño pero esta algo distante conmigo no quiero presionarla tal vez solo está un poco confundida por todo, quiero pensar que es eso y no que se arrepintió de nuestra noche.

—Natacha en 5 dias más o menos tengo la fiesta de fin de año que hace mi madre todos los años ¿te gustaría acompañarme?— le pregunte un momento después, ella se giró y trago duro