Capitulo 23

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Natacha/Geraldine

Estaba acostada en la habitación de huéspedes, como Flor estaba en casa no quería darle una mal ejemplo sobre Cristian y yo siendo Novios y compartiendo habitación y se que Cristian está agradecido, el se muestra muy cuidadoso con la educación de Flor y lo apoyo en ese sentido. Pero se me hace difícil tenerlo “lejos” mas cuando a su lado duermo mucho mejor. No puedo dormir seguí buscando cosas sobre Francisco Parker pero nada que lo vincule a los últimos 10 años es como si fuera un Fantasma, mi inquietud va en aumento cada dia, porque Cristian anda más pensativo que de costumbre, se la pasa hablando con un Hombre Elliot Sheperd, no me cuenta nada ni siquiera menciono la reunión que tuvo con Daniel.

Flash back

Escuche gritos desde la oficina de Cristian y me asuste fui corriendo y abrí la puerta

Ni se te ocurra decirle una palabra de todo esto— decía Daniel él estaba realmente enojado jamás lo había visto asi, sus brazos tensos, su mandíbula apretada y sus puños volviéndose blancos por la fuerza en que apretaba, Cristian me vio y él estaba de la misma manera, respiro profundo y su mirada se suavizo al mirarme Daniel se quedó un momento quieto y después me miro, sus ojos echaban chispas y me dio un poco de miedo asi que di un paso atrás por la intensidad de su enojo, él se dio cuenta y se calmó, tomo su saco y salió de la oficina pitando, sin mirar a tras ni un segundo. Mire a Cristian en busca de una explicación pero el solo negó y me pidió que llamara a un colega de él. Salí de la oficina.

No me explico cual fue el asunto, tampoco me anime  a preguntar había ocasiones en las que podía ser una caprichosa en busca de mi objetivo pero cuando Cristian estaba asi, sabía que era imposible, casi como lo era yo. Tuvimos una discusión esta mañana por el mismo motivo. Tengo miedo, con toda esta situación que parece salirse de mis manos, de mi control esta todo jodido. Es tanto lo que me atormenta todo que hasta deseo que de una buena vez aparezca el enfermo ese, asi terminamos con este juego del gato y el ratón, es como si me estuviera volviendo loca cada dia un poco más. Escuche que tocaron la puerta asi que digo que pase, por ahí es Cristian viniendo a pedir disculpas. Pero me llevo la decepción de que no es el

—Lo siento, pero quería saber ¿cómo estás?— Flor se acerca a mi cama con una pijama de ositos rosados, muy tierna, tenía puesto unos lentes de marco negro grueso, no le quedaban mal, le sonreí, pero aplacar el nudo en mi estómago— Sé que seguramente estas esperando a mi hermano, no sé qué es lo que está pasando pero me preocupan— me senté en la cama y le dije que se acercara

—No te preocupes, es solo cosas que nos andan rondando a tu hermano y a mí, ya lo vamos a resolver— ella frunce sus labios en una mueca de costado pensativa

—Sé que tengo 16 años pero no soy tonta. ¿Me cuentas?— No puedo decirle, no me animo

—No puedo. Enserio Flor no puedo hablar de esto— me quise morder la lengua porque lastime sus sentimientos, sus ojitos azules se volvieron tristes y me quise patear mentalmente— no te pongas asi, no es porque no confié en vos, solo es muy complicado y todavía no estoy preparada— ella asintió distraídamente

—Mi hermano te ama, Nat ¿lo sabias?— su declaración me tomo por sorpresa

—Um no creo que sea el caso, mira no te voy a negar que me gusta tu hermano y nos llevamos muy bien en la ca…— no termine la frase pero ella se rio pícaramente, no le hice caso y continúe— nos entendemos, pero no creo que sea amor, yo creo más bien que tu hermano me ve como… no sé cómo explicarlo— ella suspiro audiblemente y me miro

—No puedes decirme eso ¿en serio? Piensas que mi hermano no siente más que algo sexual— me atragante con la saliva. Mierda, ella se rio— Vamos Nat no soy una niña, y soy muy receptiva con el asunto de corazones enamorados y mi hermano está muy colado contigo— no lo creía, no podía creerlo el solo debe sentir lastima por mí, por eso actúa de esta manera. No puede amarme. No, no lo puede hacer. Aunque me duela admitirlo sé que me ve como un caso de caridad y me protege porque no quiere cargar con el asunto, si eso es.

Serie Second Chances: Mi luz en la oscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora