Capitulo 12

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Mis lindas lectoras/res

Por ahí leí un comentario de cuando van a estar juntos Cristian y Geraldine y adivinen…. Llego el momento no desesperéis jajaja ay como las adoro. Apretaría sus mejillitas bonitas (bien eso sonó raro) mejor las dejo leer el capítulo antes de que me arresten por rara jajaja ahí les dejo nos vemos al final de este capitulo que lo disfruten...

para ti irenehernandez :)

Natacha/Geraldine

Cuando entro a la habitación el olor a vainilla y coco en el ambiente me recibe las luces están tenues, su habitación no es diferente a la mía pero por alguna razón esta se siente más cómoda y creo que solo es por el hecho de que el está aquí, levanto mi mirada para encontrarme con la suya el me está mirando expectante y en sus ojos sigo viendo adoración, no prejuicios ni lascivia cruel si no, pura adoración como si yo fuera algo maravilloso, eso hace que mi piel se erice y mi corazón revolotee

—Ahora vengo— me dice él se acerca a un equipo toca unos botones, unos segundo después suena una canción de Bon Jovi “Bed of Roses”. Se acerca a mi toma mi mano y la lleva  a sus labios y besa dulcemente el dorso de la misma en un gesto íntimo, entonces pone la misma mano y la otra alrededor de su cuello y sus manos las pone sobre mi cadera y me lleva al son de la música romántica que está sonando sus ojos no dejan jamás los míos, esa mirada azulada penetrante que dice más de lo que podría explicar y es en este momento en el que me doy cuenta que quiero ser suya y no solo esta noche si no para siempre y no solo en cuerpo si no en alma y corazón, y como si él lo sintiera me acerca más a él y choca sus labios con los míos, mi cuerpo se estremece y se siente cálido solo con el rose de sus labios, el saca su lengua en un sutil “permiso“  y yo lo dejo entrar abriendo mis labios para que su lengua se encuentre con la mía y bailen juntas encontrándose, su beso es tan profundo que lo puedo sentir desde la punta de mis pies hasta mi cuero cabelludo es un beso ardiente que exige pura pasión,  dejamos de movernos porque yo, como si este beso fuera la llave para mi lujuria empiezó a desabrochar su camisa para poder tener su torso amplio, fuerte y macizo desnudo, nos despegamos para que pueda sacarle la camisa y luego de hacerlo me doy vuelta poniéndome de espalda y corriendo mi cabello para que baje el cierre de mi vestido haciéndole ver que esta vez no va a haber freno que lo quiero igual que él, sus dedos rosan mi espalda hasta llegar al cierre bajándolo suavemente recorriendo con su dedo índice mi columna y ese tacto hace que la piel se me ponga de gallina con la anticipación, lo siento más cerca de mí su aliento rozando mi oreja

—si todavía no estas lista, voy a esperarte Princesa— me dice el con la voz profunda y contenida por el deseo, deseo que se puede sentir en el ambiente logrando una burbuja donde solo estamos él y yo, me doy vuelta y dejo que la tela se deslice por mi cuerpo quedándome solo en bragas ya que el vestido no necesitaba corpiño, Cristian me recorre con sus ojos azules haciendo que mi cuerpo se convierta en gelatina y me humedezca en mis partes íntimas, él se acerca y con fuerza me  acerca, siento su cuerpo, su piel contra la mía tan caliente, él me toma de la nuca y me mira

—no sabes como deseaba tenerte asi— y me besa sin reservas haciendo que lo sienta cada célula de mi cuerpo. Siento que nos movemos hasta que la parte de atrás de mis piernas chocan con la cama el me deja suavemente sobre ella me mira un segundo, todo mi cuerpo como si lo estuviera memorizando y vuelve a besarme ardientemente yo con mis manos recorro su espalda, sus hombros, brazos, su torso  cálido explorando y suspirando de placer con cada dura ondulación de su cuerpo entre mis dedos, Cristian rompe el beso ansioso para recorrer dulcemente mi cuello con sus labios dando toquecitos con su lengua, él va bajando para encontrarse con mis senos y darles la merecida atención, mete uno en su boca mientras que con su mano  masajea mi otro seno mi cuerpo se arquea por la sensación, se siente tan bien que un jadeo se me escapa el gruñe como si lo aprobara mientras que la otra mano libre hace el recorrido primero pasando por mi estomago dando una linda caricia hasta terminar en mi parte ardiente e hinchada

—Joder Princesa estas demasiado húmeda— un sonido bajo y profundo sale desde el fondo de su garganta y yo me muevo siguiendo el ritmo de su mano dos dedos entran en mi interior mientras su palma frota mi clítoris

—Oh Cris, te necesito adentro ¡ahora!— le exijo entre jadeos, él no se deja de rogar y siento como sus pantalones caen pesado sobre el suelo, siento el ruido de plástico-metálico romperse, y el vuelve  al encuentro de nuestros labios, cierro mis ojos por el placer que se siente besarlo

—no cierres los ojos nena, ábrelos para mi quiero que no dejes de mirarme, voy a curar cada una de tus heridas esta noche— me dice en un suave tono, entonces nuestras miradas se encuentran y un nudo en mi garganta se forma por la emoción de estar en los brazos de este hombre tan maravilloso yo asiento apenas sin lograr emitir palabra por la emoción

—Eres hermosa y Mia toda Mia— declara y con esas palabras él se sumerge en mí, yo grito por la intromisión de su gran pene

—Mierda estas tan húmeda nena— exclama con los dientes apretados como si fuera demasiado, él se queda enterrado en mí unos segundo para que mi cuerpo se acostumbre y empieza a moverse lentamente, el dolor se fue  sustituyéndolo con éxtasis

—Más fuerte Cristian, no te contengas— grito dominada por la lujuria, el bombea en mi, fuerte y duro

—Joder bebe, se siente malditamente genial— dice Cristian mientras un gemido de puro placer escapa de sus labios, yo quería más asi que levante mis caderas para encontrarnos juntos y eso pareció ponerlo loco, empecé a sentir mi cuerpo escalando, envolví mis piernas alrededor de su cintura y empecé a temblar

—si nena vente conmigo, vamos bebe— me dice el mientras sus ojos no dejan los míos y asi con esas palabras me llevo al torbellino de un placer que jamás experimente, mi mundo exploto en mil colores, él se vino después con un grito voraz, su cuerpo rígido e inmóvil. Cuando el ultimo espasmos de nuestros orgasmo nos deja el cae sobre mi sin aplastarme todavía dentro mío sentía que podía permanecer asi por siempre, nuestras respiraciones desiguales se juntan en el aire, y en las esquinas de mis ojos se forman unas lágrimas de felicidad contenida, el levanta su cabeza del hueco de mi cuello y hombro y me corre el pelo de la cara

— ¿Qué pasa bebe?, ¿te lastime?— un deje de pánico en su voz

—No. no es solo que esto fue algo muy lindo— le digo apenada por mi comportamiento. El me sonríe

—fue más que lindo— me dice el, me besa suavemente unos segundo después se sale de mí, pero yo me aferro a el

—Voy a volver princesa— me dice divertido, entonces se levanta y va al baño, unos segundos después vuelve, abre las sabanas y se mete dentro junto conmigo me esconde entre su hombro y su cuello para besar mi cabeza, lo abrazo

—Me haces feliz Geraldine— me dice el, “vos también” quise contestarle pero las palabras no lograron salir de mi boca por que la pesadez de mis parpados me enviaron a los brazos de Morfeo.

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y con esto concluimos los capitulos del dia :) espero lo hayan disfrutado como yo al escribirlo, fue muy romantico todo aaaaw Cristian sos hermoso :) 

No se olviden de votar y/ o comentar por cualquier duda, opinion, critica constructiva o simplemente por que les gusto, estare feliz de leerlas les mando un beso enorme y nos vemos en una semana o antes dependiendo como este de tiempo. En multimedia esta la cancion que puso Cristian mientras bailaban y tambien la foto de como estaba vestidos :) (en la camisa la pifie) :P

aaaah por cierto soy de argentina :) un beso para mis lindas lectoras 

gracias!!!

Serie Second Chances: Mi luz en la oscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora