Capítulo 22

174 8 2
                                    

Llevaban horas viendo gente caminar de un lado a otro cargadas de bolsas o a niños con la cara embadurnada de un helado derretido que sostenían en la mano también manchada.

Sólo habían hecho una pequeña pausa para comer y ni siquiera habían sido ellos los que habían cocinado. En cuanto la comida asiática que habían pedido se hubo reducido a unos escasos granos y restos de pescado y carne especiada, siguieron con la búsqueda de aquella nante del tiempo que tanto estaba consumiendo su día.

Era la única pista que les unía actualmente con la iniciativa. Aún tenían que visitar la casa de los Sanders, pero después de la masacre del centro comercial, la agencia estaba en una especie de luto en la que Meza no había aprobado ninguna misión.

Roxy se miró las uñas aburrida, al igual que Gabby se recolocó el pelo por vigésima vez en el día. Joan jugaba con sus manos delante de la pantalla de la que procuraba no apartar la mirada y Harry pasaba los dedos por el teclado de un lado a otro.

De repente una escena en la esquina de la pantalla llamó la atención de todos. Una pareja parecía estar discutiendo y era lo más interesante que había sucedido hasta el momento. Ambos parecían bastante acalorados aunque intentaban no gritar para no llamar la atención del resto de los asistentes al centro comercial.

-Pégale una buena bofetada, hermana- intervino Roxy sonriendo intrigada por la acción de la pareja.

-Ni siquiera sabes por qué discuten, igual el culpable no es él sino ella- comentó Joan señalando la pantalla.

-Siempre sois vosotros los culpables- acalló Roxy moviendo la mano poder seguir el hilo de la trama.

La chica pareció negar aún más enojada y se dio la vuelta dispuesta a marcharse del lugar conteniéndose de gritarle algo más. No obstante el chico agarró su brazo y tiró de ella con delicadeza obligando al cuerpo de su acompañante a girar sobre sus talones. Esta impactó con delicadeza contra el pecho de él que no le dio tiempo a protestar debido a que unió sus labios.

Se notaba que el cuerpo de ella estaba rígido pero cuando sintió el contacto en la mejilla del chico se relajó y se apegó más a él, suavizando su ceño fruncido.

-No le pegues la bofetada, perdónale, no sé lo que habrá hecho pero un beso así lo merece- Roxy parecía hablar como si la protagonista de aquella escena pudiese escucharla-. Yo quiero un beso de película como esos algún día.

Harry, que era el único que no tenía un ángulo de visibilidad directo con la latina, por lo que se vio obligado a girarse suavemente y a observarla de soslayo.

-Te consideraba menos romántica, Roxy- indicó Joan enarcando una ceja.

-Ese beso es salvaje, cuadra bastante bien con mi personalidad- reprochó Roxy irguiéndose en su asiento.

Gabby rió ante el gesto indignado de su amiga y volvió a poner su atención en las imágenes de la pantalla.

-¡Espera, ahí!- gritó emocionada cuando una melena corta y pelirroja se le hizo conocida.

Harry golpeó el botón de pausa con fuerza debido al susto. Sus pensamientos le habían distraído de la verdadera tarea por la que estaban allí reunidos. Es por eso que cuando escuchó el grito emocionado de Gabby ejerció demasiada potencia a la hora de presionar el teclado.

La nante se acercó a la pantalla y señaló la parte de la pantalla donde una joven de aproximadamente su edad buscaba con ojos cautelosos a su alrededor cualquier indicio de peligro.

Se fijó en que aún colgaba de su cuello el colgante que le había facilitado la huida de todos aquellos que la buscaban, incluyéndolos a ellos mismos.

Incomplete (Nante #2) ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora