-Kokoro-chan, Helena-chan, ¡¡tengo cuatro entradas para el concierto de Megurine Luka!!-dijo Doreki dando saltitos de alegría.
-Gracias, Doreki-chan, pero resulta que yo ya tenía una entrada-dijo Helena sacando un pase triunfante.
-¿¡¿QUÉ?!? ¿Tenías una entrada y no eras capaz de decírnoslo?-grité ofuscada.
-Chicas, seamos realistas. Si os lo hubiese dicho me habríais cantado las cuarenta reprochándome que no compré para vosotros, entonces os habría dicho que me tocaron en un sorteo y todo solucionado -dijo alegre, pero al instante se puso pensativa-. Es verdad, podría haber sido así.
Doreki y yo nos rascamos la cabeza: esta niña no daba para más.
-Bueno, dejemos esto a un lado. Vamos a invitar a los chicos, así podremos ir todos, ¿no? Seríamos: Doreki-chan, Helena-chan, Tsuke-kun, Hosho-kun y yo.
-¡Hai! Será mejor que vayamos avisándolos: el concierto es pasado mañana-dijo Doreki dando saltitos.
Enseguida llamamos a los chicos para invitarlos y ellos aceptaron.
De camino para mi casa, las tres fuimos hablando de qué ropa nos íbamos a poner. Entonces se nos ocurrió una idea.
-¿Y si vamos mañana a comprar lo necesario, chicas? Hoy nos quedamos en mi casa, ya que mi madre se ha ido al hospital a cuidar de una amiga suya y dormimos allí, ¿qué os parece?
-¡¡Genial!!-contestaron las dos a coro. ***
Estábamos en mi casa con todo preparado para dormir, pero no teniamos sueño. ¿Nunca os ha pasado que vais a casa de una amiga y no podéis dormir? Pues eso nos pasó esa noche, así que nos pasamos la noche viendo anime, y entre ellos nos terminamos "Tokyo Ghoul".
En mitad de un episodio de " Full Metal Alchemist" me llegó un mensaje de Hosho.
*Hosho-kun: Hola, Kokoro-chan. Espero que estés despierta, porque tengo algo que decirte. ¿Me podrías llamar?
Kokoro-chan: ¿No me puedes llamar tú?
Hosho-kun: No tengo saldo.*
Marqué su número y lo cogió enseguida.
-¿Para qué me quieres?-dije sin saludar.
-Necesito despedirme en condiciones de ti, me voy a mudar a Europa-dijo rápidamente.
Me quedé sin palabras, así que no dije nada.
-Kokoro-chan baja al portal de tu casa-me indicó.
Bajé como una bala y abrí la puerta y allí estaba Hosho con el semblante inexpresivo, aunque cuando me vio, pareció haber sonreído. Acercó su cara a la mía y me sujetó por la mejilla. Se acercó más, hasta que nuestros labios se juntaron y jugaron entre ellos. Saboreándose libremente. Me agarró de la cintura y yo pasé las manos alrededor de su cuello, deseando más. Por un momento abrí los ojos, pero no fue a Hosho-kun al que vi, sino fue a Tsuke-kun. Entonces me separé bruscamente y me fijé en que solo había sido una ilusión.
-¿Vas a ir al concierto?-le dije, como si nada hubiera pasado.
-Me encantaría, pero no puedo. Mi vuelo sale mañana por la mañana. Te voy a echar de menos-dijo y me besó suavemente en los labios.
-Y yo a ti.
Se fue y yo volví a entrar, me quedé apoyada con la espalda en la puerta. Había algo que no me había gustado de ese beso, pero no lograba entender la razón.
***
Pasaron dos días, ya era el día del concierto y estábamos preparadas entre toda la multitud con nuestras varas brillantes. La mía era azul, la de Doreki era violeta y la de Helena era rosa.
Estuvimos alucinando con el concierto. Fue alucinante.
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KOKORO
RomantizmSoy Kokoro Koe, una estudiante de una de las mejores escuelas de Japón. Sólo busco ser feliz, cosa que se me resiste. Mi confusión es amorosa.