𝐌𝐢 𝐥𝐢𝐧𝐝𝐨 𝐚𝐫𝐭𝐢𝐬𝐭𝐚~ •𝐆𝐢𝐲𝐮𝐮𝐭𝐚𝐧•

~•𝐓𝐫𝐢𝐬𝐭𝐞 𝐫𝐞𝐚𝐥𝐢𝐝𝐚𝐝•~

Al poder divisar su auto, en aquel estacionamiento, se dispuso a entrar en el para así poder prenderlo.

Puso música a alto volumen, no le importaba sí iba a ser frenado por algún policía. Simplemente quería olvidar lo que le andaba carcomiendo por dentro.

Duele, ¿cierto?

Duele ver como aquella persona la cual conociste en un día tan repentino, te sea infiel por otra.

Eres un estúpido.

Eres una basura por no ser la persona que el quería que fueras.

Ojalá te pudras.

Eran algunos pensamientos que tenía el azabache al pensar en su antes pareja mientras andaba escuchando una de las canciones más conocidas de Kamado Tanjiro, "No Lie".

Nosotros, que ahora somos desdichados
Lo vi todo
Sé
Que solo quedan los recuerdos.

¿Por qué te fuiste? Peligro
Y no tienes adonde ir
La verdad es que estamos en la Antártida
Cubiertos por un velo

He estado pensando en el tiempo
El tiempo entrecortado
El fuerte dolor de mis recuerdos
Me aturde.

Cariño, sin mentiras.

Era el peor momento para Giyuu escuchar una de esas canciones, más no la cambió. La letra combinaba con todos los sucesos que acababan de pasar.

Simplemente, quería despejar todos sus pensamientos yendo por última vez a uno de sus lugares favoritos.

Favoritos para Sabito y para el. Era su anterior lugar de encuentro. Todos los días iban a ese bosque, en el cual se encontraba una pequeña laguna.

Tantos recuerdos memorables que tenía al ir a ese lindo bosque. Su lugar tranquilo, donde había paz. No eran molestados por nadie más.

Tantos sucesos por los cuales estaba reviviendo al pensar en todas las cosas por las cuales pasaron.

Su primer beso.

Su primer "Te amo".

Sus primeras caricias.

Su primera vez.

Lo peor de todo. Pensaba pedirle matrimonio.

Tenía aquella sortija a la cual iba a poder inclinarse ante la persona que más amaba en esta vida y decirle aquellas palabras para así poder dar un "Sí" que los llevaría a aquel preciado altar.

Dios iba a ser testigo del amor que sentía por el.

Toda su familia, que en algún momento haya negado que estuviera con aquel chico. Iba a poder presenciar ese "Acepto" que más anhelaba.

Al salir de sus pensamientos, se dio cuenta que ya había llegado a su destino. Para así recostar su cabeza en el volante y hacer sonar su claxon.

Decidió abrir la puerta y respirar aquel aire fresco en el cual se encontraba.

Al llegar a la orilla del muelle, se retiró aquellos zapatos que tanto le incomodaba para poner sus pies en el lago de sus recuerdos.

-Será difícil de olvidar, ¿verdad?.- Miraba aquellas estrellas en su completo resplandor.- Sabito, amor. Olvidar es difícil.- Sin darse cuenta, tenía las mejillas empapadas de lágrimas. Simplemente se recostó en aquel lugar para hacerse un capullo y seguir llorando.