A la corta edad de dieciséis años, Kamado Tanjiro es uno de los artistas más aclamados en la industria del K-pop gracias a la gran empresa que maneja su padre, Muzan Kibutsuji.
Giyuu Tomioka tendrá que unir sus lazos junto al joven Kamado para poder...
-Tomioka, no te ves para nada bien.- Decía el de cabellos flameantes mientras examinaba con su mirada al azabache.- ¡Mírate! Todo flacucho y feo.
Efectivamente, había pasado ya un mes desde que se separó de su pareja. No se había preocupado mucho por el. Había dejado de hacer ejercicio como normalmente lo hacía, se notaba la falta de masa muscular, notoriamente.
Los docentes ya se habían pasado el chisme de la ruptura del azabache y el de ojos violetas. Pero a Giyuu no le daba importancia.
Los alumnos también tenían sus sospechas del porqué ya no andaban juntos. Dentro de una de esas, andaba el rumor de que Makomo tenía que ver dentro de aquella relación.
-Eso le pasa porque todos lo odian.- La menor con puntas violetas se encontraba presente en la sala de profesores.
-¡Shinobu! Deja de hablarle así a Tomioka y disculpate.- La de cabellos largos corregía a la menor para así continuamente sacarla de aquella sala para discutir aquellos asuntos fuera de esta.
El azabache simplemente ignoraba todas las palabras que escuchaba. El simplemente iba a dar sus clases, no iba al instituto para hacer vida social.
Mientras acomodaba sus cosas para retirarse de su oficina. Vio que le habían mandado una nueva solicitud de amistad.
Sabia de quien se trataba. A lo largo de todo el mes, le llegaban varias notificaciones de solicitudes de personas que supuestamente no conocía. Pero se trataba de Sabito.
Ignorando las vibraciones de su celular, se dirigió a su auto con aquella maleta pesada donde llevaba algunas notas que corregir para subirse a su carro y arrancar hacia su nuevo hogar.
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Eran las 7:00 pm. La hora la cual se presentaba ese lindo artista.
Decidió prender la TV para sentarse en su sillón y mirar atentamente ese canal donde se encontraba aquel lindo chico de cabellos burdeos.
-¿Por qué tienes una vida perfecta?- Se iba preguntando mientras veía atentamente aquella pantalla.- Todo el mundo te ama... No te tienes que preocupar por nada.
De repente, llego ese mareo nuevamente. Hace dos semanas las iba sintiendo, pero el simplemente lo ignoraba.
Sabia el porqué, no llevaba comiendo desde hace ya bastante tiempo. Simplemente se llenaba con agua. No podía recibir nada de sólidos, su cuerpo no era capaz de contenerlo.
-¡Que jodido!- Se paró de golpe de aquel sillón para dirigirse hacia por un vaso con agua. Ya era un hábito en el.
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-¡Te ves muy linda, Nezuko!- Se lograban escuchar muchos halagos por parte de la gente.
Pink Punk se hacía presente en aquel programa del chico de cabellos burdeos. Recientemente habían hecho su aparición en los escenarios.
Pero algo no iba bien con la menor de todas. Nezuko se encontraba mareada desde ya hace bastante rato, más no podía decir nada a nadie. No quería arruinar la presentación que iba a hacer en el canal de su lindo hermano.
Se encontraba bailando y cantando junto a las demás integrantes. Su nuevo sencillo "Luv u" era para todos una de las mejores canciones sacadas del 2020.
Al terminar, hicieron una reverencia para que cada una agarrase sus micrófonos y dirigirse al público.- ¡Hola a todos! ¡Nosotras somos Pink Punk!
Aplausos y silbidos se lograban escuchar en el set. Poco a poco el pequeño conductor se acercaba hacia aquellas lindas chicas.
-¡Muy lindas todas, en serio!- Aplaudía mientras que con una de sus manos agarraba el micro.- ¡Son de lo mejor!
El programa continuó con algunas preguntas por parte del público. También hicieron diferentes dinámicas y retos dejados por aquellos seguidores desde las redes sociales del programa.
-¡Muchas gracias a Pink Punk por acompañarnos el día de hoy!- El programa había llegado a su fin. Era hora de despedirse.- ¡Nos vemos mañana! ¡Hasta luego!
-¡Corte!- Se lograba escuchar por la parte del fondo del set, una voz que se refería que ya no estaban al aire.
-Nezuko, ¿Te encuentras bien?- Tanjiro se dio cuenta del como su hermana no estaba del todo bien, lo había notado a lo largo del programa de hoy. Más decidió no interrumpir.
-Si. No importa.- Corrió hacia su camerino para desaparecer de la vista del contrario.
-Que extraño.- Se rascaba la cabeza en forma de confusión. - Bueno, iré a ver que pasa.
Mientras iba caminando hacia el camerino de su hermana, se le hacía presente la linda imagen en la que se encontraba ella. Uno de sus mejores atuendos.
Esta vez, se encontraba con un top negro con mangas al aire, lleno de brillos que la hacían deslumbrar más de lo que ya lo hacía. Unos shorts negros y sus típicas botas largas de color rojo con brillos. Su pequeña hermana ya empezaba a madurar, su dulce hermanita.
-¿Nezuko?- Se encontraba frente la puerta del camerino de la menor. No recibía respuesta de parte de la contraria.- Voy a entrar.- Le advertía.
Al abrir la puerta, su hermana se encontraba de rodillas, respirando rápidamente. Esto alarmó bastante al mayor, ya que no era normal esta acción.
-¡Nezuko! ¡¿Qué pasa?!- La tenía en sus manos. Sentía algunos de sus huesos en las palmas de sus manos. Esto no era normal.
-No... pu-puedo respirar.- Fueron sus últimas palabras. Para caer en los brazos de su hermano y que toda su mirada quede en blanco.
Su hermana se había desmayado en sus brazos.
-¡Haganezuka!- Gritaba asustado ante aquella situación. El llamado fue rápidamente hacia el grito del menor.- ¡Llama a una ambulancia! ¡Rápido!
No se podía imaginar una vida sin su pequeña hermana.
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que onda? xD
hoy hubo capítulo doble aidñfjd es que me da paja dormir JAJAKAÑSJDJDD
