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El camino de la ambición y la soledad.

Esa mañana Kaname tenía reunión de directorio, sería presentado oficialmente ante la junta de accionistas como un accionista más además de que el padre de Hanabusa lo ratificará en la presidencia de la empresa, pero la mente de Kaname estaba en otro lugar.

Una vez que terminó se fue inmediatamente a hablar con Ruka, su secretaria.

- Necesito que me consigas el teléfono de ese periodista ¡Ahora! - exigió

- Sí, se lo doy inmediatamente, él me dejó su tarjeta -

El hombre extendió su mano, no estaba seguro de que hacer, pero ese hombre lo podía llevar a Zero. Estaba ya impaciente esperando la maldita tarjeta cuando su suegro llegó a su lado.

- Kaname, vamos a almorzar - dice feliz el hombre - Mi muchachito me contó que conoció a tus padres y que le agradaron mucho -

- Sí, Hana fue muy amable con ellos -

- Si, mi pequeño es un pedacito de dulzura andante - sonríe feliz el hombre

- Señor, aquí está la tarjeta - dice Ruka extendiendo su mano.

El padre de Hana la miró de reojo y le llamó la atención que fuera la tarjeta de un periodista, normalmente Kaname hablaba mal delos que ejercían esa profesión.

- ¿Ahora te interesa la prensa? - dice el hombre sin perder detalle de su yerno

- Claro que no -

- ¿Y esa tarjeta? -

- Es solamente para avisar a relaciones públicas, que no concedan entrevistas ni comunicados a este tipo -

- Pero, un tema tan trivial debería verlo otra persona, no el presidente de mi compañía -

- Claro, veré quien lo haga -

El almuerzo con su suegro fue horrible, el hombre no hacía nada más que hablar de su amado hijo y de lo ilusionado que estaba que pronto quedará en cinta, quería muchos nietos, y nietas revoloteando por su casa. En tanto Kaname intentaba eludir el tema es intentaba retomar temas de la empresa. Cuatro horas perdidas en ese almuerzo.

Cuando finalmente volvió a su oficina tomó la tarjeta y comenzó a buscar en internet algún dato de ese hombre. El sujeto había dicho que era el novio de Zero. Eso le provocaba un dolor en el estómago, no podía definir que era, pero sin duda era rabia, pero ¿Por qué? Zero había sido lo peor que le había pasado en su vida, lo supo la vez que cuando tenía ocho años y lo vio sucio y temblando medio desnudo en el medio de la sala de la casa de sus padres.

Internet le dio como indicio que ese hombre trabajaba para una radioemisora de un pueblucho al norte, tan al norte que si estuviera a un par de kilómetros más estaría fuera de los límites del país. Entonces Zero estaba allí. El hombre conducía un programa radial de tipo social, más que nada reportajes y conversación. Además de ser editor en muchos otro programas de la misma emisora radial.

La tarjeta del hombre tenía un número telefónico, llamó y le respondió una mujer. Se había contactado directamente con la radio. Le informaron que Kain Akatsuki estaba de vacaciones y que regresaba en cinco días más. Kaname no podía esperar cinco días, por lo que persuadió a la mujer para que terminara dándole el celular del hombre y hasta su dirección.

Al día siguiente Kain volvió para hablar con Kaname, pero este nuevamente lo hizo sacar con los guardias de seguridad. Por lo que Akatsuki entendió que el hombre realmente no quería saber de los niños. Por lo que decidió volver a su ciudad.

Al día siguiente ya estaba en casa, los hijos de Zero estaban en la escuela, cuando se apareció en el restaurante donde trabajaba Zero.

- Lo siento mucho - dice el rubio

- Lo intentaste, te lo agradezco -

Kain olvidando donde estaba, abrazo fuertemente a Zero de la cintura, quería confortarlo, pero más que nada deseaba olvidar la mirada de esa mujer que había conocido en la capital.

- Kain, estoy bien, necesito seguir trabajando - y girándose para quedar de frente a su novio - Te traeré un café -

Kain lo soltó y se fue a sentar a una pequeña mesa en un rincón.  Ahora tenían cosas más importantes de las cuales preocuparse. Como todas las tardes, Zero fue por los niños a la escuela, pero esta vez el silencio era incomodo, al llegar a su departamento, Ai corrió al lado de Kain.

- Dime ciando podré ver a mi padre - decía la niña emocionada

- Ai, tenemos que hablar con ustedes - dice Zero

- Él no quiere conocernos - dice Ren

- ¡Eso es mentira! - grita Ai molesta con su hermano

- Ai - le llama Kain - Yo hice todo lo posible, pero ese señor no cree que ustedes sean sus hijos, quizás deberías darle tiempo - 

- Pero eso no es así, el señor Kuran es nuestro padre -

- Lo sé, pequeña. Pero aveces los adultos somos un poco lentos para entender  algunas cosas -

- O papá se acostaba con tantos hombres que mi padre tiene dudas - dice Ai

- ¡Ai! - grito Ren molesto con su hermana

- Es la verdad, papá no le dijo nada de que estaba esperándonos a nosotros ¿Por qué? porque somos hijos de un desvergonzado, de un hombre sucio y promiscuo -

- Ai, no le faltes el respeto así a tu padre - dice Akatsuki

- Es verdad, ahora entiendo por que eres su novio -

Ren que era lo más pacifico del mundo, se acercó a su hermana y le dio una bofetada que retumbo en la casa. Los adultos quedaron sorprendidos al ver al jovencito.

- ¡Nunca más en tu vida vuelvas a hablar así de mi papá! por que siempre yo lo voy a defender, aunque sea de ti -

Ai, salio corriendo en dirección a su habitación. Ren miró a los adultos y les hablo.

- Yo sé que papá no es así, y ese hombre que fuiste a buscar es solo una basura, ojala se lo lleve el diablo -

- ¡Ren! - le regaño Zero

- Sé que no quieres que tengamos resentimiento contra él, pero no lo puedo evitar - Dicho eso también se dirigió a su habitación 

Lo mejor de mi vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora