29. Ansia Suelta

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—Oh, así que te has enterado—Yoongi suelta una risa sin gracias mientras Jimin se deshace del cubre bocas—. Eso explica por qué estás aquí, no sueles buscarme a menos que quieras inhibidores.

—E-es... ¿Es cierto?

—Por supuesto que es cierto—responde con total calma—. Evidentemente no es absolutamente toda la culpa de este país, en una guerra participan dos. Lo que si no hay que negarse es que nosotros fuimos los tontos de crear el desastre nuclear que nos está matando lentamente.

San respira con mucha fuerza. Tenía la esperanza de que Jimin desmintiera todo lo que dijo ese hombre en el ático. Que tal vez fuera una especie de método para distraerlo, hacerlo confundirse. No que testificara a favor.

—Sobre la ayuda: Han estado durante años queriendo enviar comida, recursos y propuestas de migración a todos porque no es buena idea ni siquiera dejarnos morir aquí. Se comportan como humanos. Seres civilizados.

—Y nosotros respondemos a cada carta con una nueva conquista, exterminando ciudades, violando a su gente y destruyendo su suelo—Continúa Yoongi con voz arrastrada—. No somos los héroes de nadie, solo nuestros propios villanos.

—La razón por la que continuamos ayudando a muchos a irse es por eso. Para no dar de comer a la bestia que nos dirige. Los únicos que comen bien, los únicos que visten bien, los únicos que duermen bien—Pone una mano en el hombro de San—. No te lo dije porque no me ibas a creer. Necesitabas descubrirlo solo, sea a la buena o a la mala y... como ves, realmente no estas ayudando a nadie, solo cavando una tumba más ancha.

Se aparta de él y sale del lugar. Yoongi se aproxima a Jimin y mordiquea el cuello de este.

—Me preocupa.

— ¿Por qué?

—Porque es el primero que se nota tan herido.

Alguna vez le dijo que la milicia es un nido de secretos y bien, aquí está demostrado. Los más grandes secretos que ni siquiera quienes pelean pueden saber. Porque eso destruiría fundamento, haría a todos los Alphas ponerse en contra, a huir, exigir lo que no tienen. Por eso hacen cada discurso más alejado de la realidad. Uno donde todo el mundo está en contra de ellos. Que los quieren ver sufriendo y si no les quitan lo que tienen –cosa perdida por egoísmo y ambición-, todos perecerán.

A pesar de que cogerlo por la fuerza es una decisión voluntaria innecesaria, una necesidad animal por demostrar que son más fuertes y mejores.

~ * * * ~

San entra en el lugar y Wooyoung se lo queda viendo. Había esperado que llegara. Sabía que fue a preguntarle a Jimin con respecto a ese centenar de cosas que están en conflicto con lo que les han estado diciendo todo este tiempo. Un ideal falso junto a sus sentimiento contrarios y confundidos.

—Es verdad.

— ¿Todo?

—Sí.

Levanta de su asiento y va hasta él. Palpa su cabeza un par de veces, casi como un cachorrito. San se queda viendo sus manos.

—Todo este tiempo... No era la verdad y matamos a tantas personas por... nada...

Toma asiento a su lado, lo toma de la mano y la aprieta con suavidad.

—Ni siquiera antes de entrar en esto era consciente de la realidad...

—No es tu culpa.

—Sé que no. Solo...

Gira a mirar a Wooyoung, que espera una conclusión a su frase. San se aproxima a su rostro y junta los labios con los del contrario. Wooyoung parpadea de forma repetida, pero no huye del gesto. Un par de centímetros de distancia y luego otro beso. Hundir sus labios en los ajenos con la experiencia propia de no haber besado nunca a nadie.

Secret Between Us || WooSanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora