"Quererte Hasta El Final"

"Noticias"

Miércoles, 11:36

Hugo le había obligado a ver con él una película la noche anterior hasta tarde, para que se relajase. Es por eso que hoy, aunque hubiese sonado el despertador, lo había ignorado y se había despertado tarde, haciendo así que llegase bastante retrasado a la comisaría. Como ya suponía, estaban ya el resto allí.

-Vaya, no tienes muy buena cara, ¿Quieres café?- Le ofreció Nick al verle llegar.

Él lo aceptó a pesar de ya haber tomado uno en casa.

-¿Qué te ha pasado?- Preguntó Eva preocupada.

-Hugo.- Respondió sencillamente.

Samantha ladeó la cabeza con confusión.- ¿Él y tú...? Ya sabes.-

-Me hizo ver un pequeño maratón de pelis. Acabó muy tarde.- Explicó Flavio.

-¿Y por qué no te negaste?- Preguntó Maria.

Flavio elevó una ceja, como si fuese obvia la respuesta. María decidió hacer ver que lo había entendido.

-Bueno, dejando mi vida personal de lado, ¿Como fue con el análisis de la carta?- Preguntó dirigiéndose hacia Nick.

-Bastante mal, la verdad. No hay huellas ni nada que nos pueda indicar quién escribió la amenaza.- Flavio iba a hablar, pero lo interrumpió.- Sin embargo, te puedo asegurar que esa carta fue enviada hace poco.-

Frunció el ceño.- ¿Hace cuánto, exactamente?-

-Exactamente no se sabe, pero te puedo asegurar de que fue pocos días después de que la mataran.- Explicó.

-Eso significa...- Reflexionó Flavio en voz alta.

-Que el plan se llevará a cabo dentro de muy poco.-

-Por cierto, tengo más noticias.- Dijo Nick.

-¿Cuáles?- Quiso saber Noemí.

-¿Os acordáis de Andrea Vilallonga?- Todos asintieron.- Pues la han encontrado.-

-¿Qué?- Preguntó Samantha desconcertada.

-¿No os acordáis? Había huído, así que se fue del país. Pero pasamos una foto de ella al resto de centros de policías. Esta mañana la han encontrado.-

-¿Enserio?¡Por fin una noticia buena!- Exclamó Eva aliviada.

-Sí, la van a traer para aquí. Lo malo es que no lo traerán hasta el viernes por la tarde.-

-¿El viernes por la tarde?¿A donde narices se fue esta mujer?- Se quejó Samantha molesta.

-Muy lejos.- Le aseguró Nick.

-Y ya tenía que haber una mala noticia. Vaya mierda.- Eva se cruzó de brazos.

-Al menos vendrá.- La animó su primo.

-Ya, pero si el plan es dentro de muy poco, es posible que sea demasiado tarde.- Interfirió Noemí.

-¿Y qué hacemos entonces?- Preguntó Flavio.

-¿Sinceramente? No hay nada que podamos hacer más que esperar. Os recomiendo que os marchéis a casa.- Dijo Mamen.

-¿Enserio?¿No hay nada?- Insistió Flavio.

-¿Absolutamente nada?- Le siguió Eva.

-¿Nada de nada?- Preguntó Samantha.

Noemí suspiró.- Mejor marcharos, os avisaremos de cualquier cosa.-

-Pero...- Intentó replicar Flavio.

-Mejor os acompaño hasta la puerta.- Propuso Nick empezando a guiarlos hasta ella.

Después de eso se separaron. Eva y Samantha se fueron hasta su casa mientras que Flavio se marchó hacia la suya.

Samantha se tumbó en el sofá nada más verlo.

-Joder, estamos teniendo una semana intensita, ¿No?-

-Ni que lo digas.- Respondió Eva.

Buscó una posición buena para poder estirarse en el regazo de su novia. Ella le empezó a pasar las manos por su pelo.

-¿Crees que conseguiremos parar la bomba?- Preguntó Eva un tanto decaída.

-¿Sabes? Te diría que no pasa nada si no es así, pero esta vez sí que pasa. Más nos vale encontrar esa maldita bomba y al asesino antes de que pase algo.-

Hizo un puchero.- ¿Por qué nos tenía que pasar todo esto? Con lo bien que estábamos...- Se quejó.

-Ya bueno, ya verás como pronto todo se soluciona, ¿Sí?- Pasó sus dedos por el labio de Eva.

-Espero que Hugo perdone a Flavio pronto.- Frunció los labios haciendo que Samantha apartase su mano.- Sino voy a ir yo misma a darle un par de hostias hasta que lo perdone.- Soltó la amenaza al aire haciendo reír a su novia.

-Vamos, no seas así. Ponte en el lugar de Hugo. Es normal que esté así.- Intentó convencerla.

-Ya, pero es que Flavio lo ha pasado tan mal...- Hizo una mueca.- Solo espero que Hugo no se esté pasando con él.-

-Ya verás que no. Pronto volverás a verlos ir de la mano, darse besos a todas horas, decirse cosas cursis, ya sabes, sus cosas.- Le dio un beso rápido en la boca.

-Creo que son la pareja más dulce que he conocido, bueno, y la más rara. También se la pasan peleando como dos niños pequeños.-

-Son un para de idiotas.-

Ambas rieron y volvieron a juntar sus labios.