"Quererte Hasta El Final"

"Tic Tac"

Sábado, 16:45

Los siete llegaron hasta la casa de los Guix. Al llamar a la puerta les abrió una mujer.

-Buenas tarde, ¿Qué necesitáis?- Dijo ella amablemente.

-¿Es usted la esposa de Manu Guix?- Preguntó Noemí un tanto impaciente.

-Así es. ¿Pero quiénes sois vosotros?¿Os conozco?- Preguntó confundida.

-No, somos de la policía. Estamos investigando el caso del asesinato de Beatriz Fernández. Ella era la secretaria de su marido.- Explicó con rapidez.

-Ah, sí, buena chica. Casi la mejor que ha trabajado con Manu. ¿Pero que hacéis vosotros aquí?-

-No queremos alarmarla, señora, pero creemos que su marido podría estar en peligro.- Explicó Nick.

Ella abrió mucho los ojos.- ¿En peligro?¿Qué tipo de peligro?-

-Una bomba.- Contestó Samantha.

-Llamamos a su trabajo y nos dijo que a esta hora y este día siempre tenía el tiempo libre. Hemos supuesto que estaría aquí.- Dijo Noemí.

-Pues no.- Eso dejó sorprendidos a todos.- Él pasa mucho tiempo trabajando en la empresa, así que no tiene demasiado tiempo para estar con la familia. Así que estas tardes siempre las usa para ir al parque con nuestros hijos. Es una rutina que ellos tienen, siempre a la misma hora están sentados en uno de los bancos para contarse su semana, después dan una vuelta o juegan, depende.- Dijo con una sonrisa cariñosa, aunque la borró al recordar que su marido estaba en peligro.

Noemí elevó una ceja.- ¿Siempre a la misma hora?-

-La bomba está programada para ese momento.- Dijo Mamen en un tono bajo.

-¿Y a qué hora sucede eso?- Preguntó Noemí.

-A las cinco en punto.-

María miró su reloj.- ¿A las cinco?¡Eso es dentro de cinco minutos!-

-¿Qué parque?- Preguntó rápidamente Noemí. La mujer se los dijo.- ¡Corred a los coches!-

-¡Gracias por su ayuda!- Gritó Eva mientras corría.

Se fueron dejando a la mujer preocupada.

Noemí, Mamen y Nick iban en un coche policial, mientras que los otros cuatro iban en el coche de Flavio. Iban por llamada para poder darse indicaciones.

-Sí que hay una estación antigua a la que se puede acceder debajo del parque.- Dijo Nick mirando un mapa.- Pero se accede a través de esa estación.- Señaló un lugar.

-Bajémonos.- Ordenó Noemí.

Los seis la siguieron corriendo por la estación. Habían llamado a un experto que les indicó el tumbar una puerta. Esta llevaba por un pasillo antiguo que los llevó hasta las vías del metro.

-¿Derecha o izquierda?- Preguntó Flavio.

-Derecha, creo.- Contestó Nick inseguro.

-¿Crees?-

-Es un mapa antiguo y yo no soy lector de mapas. Esto es lo mejor que obtendrás.-

-Vale, vayamos.-

Fueron corriendo y fueron a la antigua estación, la cual estaba completamente asquerosa y en ruinas. Polvo, casi todo roto, bichos y ratas, etc. Pero al subir vieron lo importante. La bomba.

-Teníamos razón. Si que está aquí.- Dijo Samantha observando los explosivos y cables.

-Queda un minuto para que explote, ¿Qué hacemos?- Preguntó Flavio desesperado.

-Aunque nos fuésemos ahora la bomba nos mataría.- Explicó Noemí.- He llamado a gente que sí sabe desactivar bombas, pero no llegarán a tiempo.-

-¿Y qué hacemos entonces?-

-Le voy a pasar una foto. Tal vez podamos desactivarla nosotros.- Dijo Mamen.

-Wow. Jamás pensé que mi vida sería tan corta.- Comentó Nick al aire.

-Al menos yo moriré al lado de la persona que amo.- Dijo Eva completamente apegada a Samantha.- Te quiero mucho, ¿Lo sabes, no?-

-Y yo te quiero muchísimo a ti.- La besó.

-Han dicho que está bomba es demasiado complicada como para que completos inexpertos la desactiven.- Dijo Mamen.- Ha sido un placer trabajar contigo.- Le dijo a Noemí.

-Lo mismo digo.-

-Yo he vivido mi vida bien, aunque echaré de menos a mí novio.- Soltó María.

-¿Y tú qué haces?- Le preguntó Nick a Flavio, que estaba con el móvil.

-Envío un mensaje.-

-¿A quién?-

-Hugo.-

-Tienes suerte, al menos tienes pareja. Yo-

-Expareja.- Le corrigió.

-Ya, no mintáis. Volveréis a estar juntos en nada porque solo os habéis separado por una tontería.-

-Sí sobrevivimos.- Añadió María.

-Sí, pero a lo que iba, que yo estoy más solo que la una.-

-Solo no.-

Eva y Samantha se acercaron a abrazarle. Después se les unió el resto. La imagen perfecta de una familia.

-Cinco segundo.- Susurró María apegándose más.

-Cuatro.- Susurró Nick mirando el contador.

-Tres.- Samantha.

-Dos.- Eva.

-¡No!-

Flavio se separó, cogió todos los cables posibles a la vez y los arrancó.