Llévame Contigo

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When the night has come, and the land is dark, and the moon is the only light we'll see. No, I won't be afraid, just as long as you stand, stand by me

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Ese martes había nevado más que nunca.

Era uno de los inviernos más fríos en la historia de Nueva York y todo el mundo parecía estar alarmado.

Excepto Luke y yo.

Para nosotros fue la excusa perfecta para no salir de casa, no teníamos que ir al conservatorio porque el estado había dado una alerta de emergencia puesto que en la madrugada había caído granizo.

Estábamos felices de poder andar todo el día en pijamas.

Amábamos flojear.

Inventamos un montón de actividades para hacer juntos ese día. Buscamos recetas alocadas por internet y tratamos de recrearlas.

Convertimos el living de su departamento en una sala de cine y vimos la trilogía de poltergeits, que según Luke era la mejor trilogía de terror de la historia.

Obviamente lo obligué a ver una película también.

Elegí las dos películas de El Diario De Una Princesa porque si le iba a presentar a todas las princesas Disney, Mía Thermopolis no podía quedar por fuera.

—Pasar de ver Poltergeits a esto es un cambio drástico...—comentó mientras miraba la película y metió varias palomitas en su boca—¿Por qué te gustan tanto las princesas?—apartó su cara de la pantalla para verme.

—Me gustan los cuentos de hadas...—sonreí mirándolo—Te dan esperanza.

Se me quedó viendo por un momento, sin decir nada, sólo me veía mientras comía palomitas y frunció el ceño.

—Sabes que a veces...cuando hablas siento que—hizo una pausa y se mordió el labio—Siento que intentas decirme algo—bajé la mirada—Como si tuvieras algo atravesado.

—¿Por qué dices eso?...

—Los cuentos de hadas te dan esperanza—asintió apoyando su cabeza del respaldo del sofá sin quitarme la mirada de encima—¿Esperanza de que?

—De que los finales felices existen—respondí mirándolo a los ojos.

Tenía las palabras en la garganta a punto de dejarlas salir, quería contarle toda la verdad en ese momento. Estaba desesperada por hablar, cargar con eso me estaba creando ansiedad, tenía mucho miedo de perderlo.

𝑲𝒊𝒔𝒔 𝒎𝒆 𝒉𝒂𝒓𝒅 𝒃𝒆𝒇𝒐𝒓𝒆 𝒚𝒐𝒖 𝒈𝒐 | 𝙇. 𝙃𝙚𝙢𝙢𝙞𝙣𝙜𝙨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora