Estaba bajando las escaleras, cuando estaba en el último escalón me tropecé y caí.
- Raven dejame ayudarte.- me levanto
- Estoy bien madre, es lo de siempre. - sonreí.
- ¿Estas tomando tus medicamentos?.- pregunto preocupada.
- Si madre tranquila.- sonrei
- Mira te raspaste de nuevo la rodilla una señorita no debe lucir tan deplorable.- Me reprendió.
- Esta bien, mejor vamos a cenar.- me dirigí hacia el comedor.
Ayudé a mi madre a poner la mesa, y nos dispusimos a cenar.
- Raven hija yo...
- Si es por lo de la mudanza, esta decidido madre.- la detuve.
- Pero Raven no tienes que irte a Chris no le molestará que te quedes.- sonrio.
- No es eso madre ya te dije que necesito mi privacidad y tu la tuya.- dije algo seria.
- ¿Entonces no hay nada más que pueda hacer verdad?.- dijo resignada.
- Asi es madre, vendré a visitarte te lo prometo.- sonreí.
- Eres igual a tu padre, igual de obstinada-. Rió
- Eso parece.- asenti sonriendo.
La comida de mi madre era deliciosa, recordé que hasta ahora no habia podido probar la comida de Sebastian, al pensar en el me sentia triste otra vez.
- ¿Y que paso con Zackary?.- pregunto con el jugo en la mano.
- Mamá eso fue hace seis meses.- dije seria.
- Si, pero estabas tan enamorada y luego dejaste de hablar de él como si hubiera muerto.- dijo.
- Bueno el no me correspondió, la verdad fue muy grosero, ahora sale con Sophie.- suspire.
- ¿La de la hermana gemela?.- Se asombró.
- Asi es aunque Alice es un dulce, Sophie es insoportable. Reí.
- Ya veo, tu te mereces algo mejor hija.- guiño el ojo.
Hacia tanto que no platicaba con mi madre, me sentia feliz, me llenaba de tristeza tener que irme, pero Sebastian estaria ahí y no me sentiría tan sola.
- ¿Entonces no hay nadie que se haya robado tu corazón?.- pregunto pícara.
- Digamos que si, pero creo que el tampoco me corresponde.- dije resignada.
- No te preocupes querida, recuerda que las mujeres de esta familia tenemos suerte con los hombres.- sonrio.
- Si quizas tengas razón.- seguí comiendo.
Me serví un poco mas de pasta, me encantaba la pasta, era mi favorita.
- Dime hija ¿Has tenido problemas en la escuela?.- pregunto seria.
- No madre mis calificaciones son excelentes.- dije segura.
- No Raven no me refiero a eso, si no...
- No madre, hasta ahora todo esta bien, trato de no socializar tanto.- baje la mirada.
- Me preocupas, el solo pensar que...-
- Tranquila eso no pasara otra vez, además soy mayor ya puedo defenderme sola.- interrumpi.
- Esta bien, pero cualquier cosa quiero que me lo digas.- Dijo preocupada.
- Si mamá entiendo.- asenti.
- Por cierto ¿Recuerdas que Chris vendrá a comer mañana?.- Me miró fijamente.
Cuando mi mamá dijo eso, me empezó a doler el estómago.
- Ah es cierto que bien.- fingi la sonrisa.
- Bueno el me dijo que traera a su hijo Albert.- expresó con emoción.
- ¿En serio? Que bien estare feliz de recibirlo.- seguía con la sonrisa fingida.
- Escuche que es muy apuesto y quizas.- guiño el ojo.
- No, no lo creo madre.- seguí comiendo.
Transcurrió la cena normal, yo me ofrecí a lavar los platos, ahora no solo debía preocuparme por un Balley si no por dos, era la primera vez que conoceríamos a Albert ya que según Chris el estaba estudiando en el extranjero, mi madre se fue a acostar temprano, cuando termine de lavar los platos subi a mi cuarto. Sentía un vacío, su ausencia era demasiado pesada sobre mis hombros.
"Quizás cuando muera podre dar ese paso, un paso de libertad"
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Esto Que Siento ¿Es Amor? (SebastianxTu) (Terminada) [Editando]
Aktuelle LiteraturRaven era una chica común, pero con una vida trágica, su único refúgio era el anime en especial el de Kuroshitsuji, entre sus fantasias como cualquier chica otaku de su edad era que su amor fuera real, en este caso el mayordomo Sebastian Michaelis...