❥︎ 𝘑𝘶𝘯𝘵𝘰𝘴 𝘌𝘯 𝘜𝘯 𝘔𝘶𝘯𝘥𝘰 𝘏𝘰𝘮𝘰𝘧𝘰́𝘣𝘪𝘤𝘰 | ʸᵉᵒⁿᵇⁱⁿ & ᵗᵃᵉᵍʸᵘ

18

"Una Cita, finalmente"
POV. YeonJun.

Me había armado finalmente de valor, agarrando el teléfono y llamando al mejor restaurante que conocía.
Mis manos y mi voz temblaban por la ansiedad y la pizca de temor que sentía.
Era muy temprano en la mañana, así que tenía tiempo de organizar todo para esta noche.
Terminé de reservar en uno de los pisos más altos de aquel restaurante, y con piernas temblorosas me dirigí a la habitación de mi menor.
Toqué la puerta con mis nudillos, algo ansioso.
SooBin abrió la puerta y me miró.
—Hola Hyung, ¿pasa algo?~— Preguntó SooBin haciendo una tierna eyesmile.
—SooBin, y-yo, tu, ¿quisieras salir conmigo... esta noche?...— Pregunté, preparándome por si acaso me decía que no.
—Hyung, a mi me... ¡me encantaría!...— Dijo SooBin con un brillo excepcional en sus ojos.
Mi sonrisa se ensanchó casi inmediatamente después de escuchar lo que dijo.
Hice una reverencia agradecido.
—M-Muchas gracias, por aceptar...— Dije yo mientras hacía la reverencia.
—Hyung, no tiene que agradecerme, lo hago... d-de corazón— Musitó SooBin sonriendo ampliamente.
—Entonces ponte ropa formal para la noche, quiero llevarte a algunos lugares muy especiales...— Dije sonriendo y acariciando los rosados cabellos del menor.
Las mejillas del menor se colorearon con un precioso color rosado.
—E-Está bien, ¿a las 8 esta bien?...~— Preguntó SooBin con un toque de emoción.
Yo asentí sonriendo y bajé, después de que SooBin cerró la puerta de su habitación.
Me puse un abrigo y me dispuse a salir hacia la casa de mis Hyungs de BTS YoonGi y HoSeok. Ellos ya se habían casado hacía algunos meses y yo iba a pedirles consejos para declararme a mi chico especial.
Toqué el timbre de la casa. Ví que HoSeok abrió la puerta.
La casa era muy bonita y era cálida por dentro, ya que tenía calefacción en estos momentos de frío intenso.
—Hola, YeonJun-ah, ¿qué te trae por aquí?~— Preguntó HoSeok amablemente sentándose en el sofá que estaba en el living, y dejándome un lado. El cual palmeó, dándome una señal de que podía sentarme.
Yo entré con cuidado a la casa, cerré la puerta detrás de mí y me senté en el sofá junto a HoSeok Hyung.
—Veras, yo... tengo a una persona especial y me gustaría declararme hacia él. Pero no sé como hacerlo y tengo miedo de arruinarlo...— Dije con un toque de preocupación.
HoSeok me vio y sonrió.
—Es SooBin-ah, ¿cierto?...— Preguntó el mayor con una sonrisa.
—¿C-Como lo sabías?...— Pregunté yo sin esperarme que lo supiera.
—Hmm, es algo obvio, yo los he visto en la empresa un par de veces, son muy melcochozos el uno con el otro. No vas a  arruinar nada...~ Además, puedes pedirle ayuda a YoonGi, él, me pidió matrimonio mediante un precioso poema...~— Dijo HoSeok sonriendo enternecido y parándose del sofá.— Debe de estar en su estudio... ven, seguramente podrá ayudarte...— HoSeok sonrió y subió las escaleras conmigo siguiéndolo.
—Yoonie... YeonJun-ah quiere pedirte algo de ayuda... ¿estás muy ocupado?...~— Preguntó HoSeok abriendo la puerta del estudio de su esposo.
Yo le conté todo y me ayudó a escribir un hermoso poema. Que sin embargo, aunque me hubiera ayudado lo hice yo solo.
Dieron ya las 03:00 PM. Me dirigí a una joyería que conocía, y que hacía preciosos detalles.
Entré en la pequeña tienda y ví unos hermosos collares complementarios de los que prácticamente me enamoré.

Estaban hechos de plata, y eran sumamente delicados y hermosos.
—Buenos días, disculpe, ¿me puede dar estos collares de aquí?...— Pregunté señalando el collar complementario ya mencionado.
—Si, déjeme sacarlo...— Dijo la señora con una gran sonrisa.
—Es muy hermoso...~— Dije yo, susurrando para mí mismo, mientras la señora sacaba el pequeño cojín donde estaba el collar.
—Es una hermosa elección para un collar de pareja...~— Dijo la señora mientras ponía el collar en la mesa de cristal. Yo asentí.— ¿Va a llevarlo?— Preguntó la señora amablemente.
—Si, por favor...— Dije yo algo distraído y sacando mi tarjeta bancaria.
La señora puso los collares en una suave caja de terciopelo con delicadeza, para luego ponerla en la mesa de cristal y agarrar mi tarjeta.
Pagué y salí de la tienda con la pequeña bolsa entre mis manos, ya debería ir a cambiarme, el reloj marcaba las 05:00 PM.
Entré a la casa con cuidado de no ser escuchado y entré a mi habitación, guardando por ahora los collares en una de las gavetas de mi peinadora, para no correr el riesgo de que HueningKai lo encuentre.
Me tomé una ducha larga y duré un rato enrollado en mi bata, buscando una ropa que ponerme.
Decidí ponerme un traje formal, una chaqueta gris oscuro con pantalones a juego una camisa blanca, y una corbata negra.
Ví mi reloj de pulsera, el cual marcaba ya las 07:15 PM.
Llamé al restaurante, para pedirles encarecidamente que lo cerraran, básicamente como les pedí esta mañana. Para que SooBin y yo pudiésemos estar tranquilos, sin estar rodeados de paparazzis, o fans, los cuales iban posiblemente a arruinar mi cita.
Después de más o menos media hora cuadrando todo agarré la bolsa de los collares y saqué la caja con cuidado, guardandola en uno de los bolsillos de mi saco con delicadeza.
Me acerqué a la habitación de SooBin, pero antes de que tocara la puerta, él salió con un precioso traje de chaleco negro y pantalones del mismo color, con un corbata y una camisa blanca debajo.
Sonreí ampliamente y lo vi con detenimiento, analizando y grabando en mi mente cada detalle de su rostro y toda su apariencia.
—E-Esta muy guapo, YeonJun Hyung...~— Dijo SooBin con un leve sonrojo y timidez, mientras esbozaba una pequeña sonrisa.
—T-Tu, también SooBin-Ah...— Dije también un poco sonrojado...— ¿Nos vamos?...— Pregunté algo ansioso.
SooBin asintió felizmente mientras bajaba las escaleras en silencio detrás de mí.
Nos montamos en el auto y yo puse música, para luego manejar hasta el restaurante.
Empezamos a cantar alegremente las canciones que reproducían, mientras yo conducía relajado y con la vista fija en el camino.
Llegamos, finalmente y entramos de una vez en el restaurante.
Nos recibió una elegante muchacha, la cual tenía un libro en el que estaban las reservaciones.
La chica, al encontrar la reservación que hice en la mañana nos llevó hasta un ascensor, el cual nos llevó hasta uno de los pisos más altos.
Los grandes ventanales dejaban ver la preciosa vista que había, desde allí podía verse toda la ciudad.
SooBin estaba impresionado, sin poder articular una palabra, tenía la boca entreabierta.
—Hyung, e-esto es maravilloso...— Dijo SooBin anonadado.
Sonreí y la chica nos guió hasta una mesa, donde había un ramo de hermosas rosas rojas y blancas, junto al poema que había escrito con ayuda de YoonGi y HoSeok Hyung.

"Podrá nublarse el sol eternamente;
Podrá secarse en un instante el mar;
Podrá romperse el eje de la tierra
Como un débil cristal.
¡todo sucederá! Podrá la muerte
Cubrirme con su fúnebre crespón;
Pero jamás en mí podrá apagarse
La llama de tu amor"

Esto decía la pequeña carta, aunque la dejé a un lado, para entregársela junto al collar, mientras tanto nos quedamos charlando, riéndonos y pasando la mayor parte de nuestra charla algo sonrojados.
La misma chica nos había traído dos menús para que nosotros escogiéramos lo que queríamos comer.
Cuando finalmente terminamos de elegir entre los miles de deliciosos platos que había en los menús ordenamos.
—Deme por favor, dos medias raciones de BibimBap y dos copas de vino tinto... muchas gracias...— Dije entregándole los menúes a la mesera, después de que ella había anotado nuestros pedidos.
Ella solo asintió y se llevó los menúes, nosotros por nuestra parte nos quedamos viendo por los ventanales, podíamos ver el cielo lleno de preciosas y brillantes estrellas, la luna brillante.
Todo era simplemente maravilloso, y más para mí cuando SooBin estaba conmigo.