Ink sólo quería tenerlo a su lado.
Lo deseaba.
Amigo o amante - No importaba.
Sólo no quería tener a Error como un extraño.
***
-¿Sabes que hay algo que se llama "obsesión"?
-Sip. Y esa solo es otra de mis locuras. Hola y bienvenido.
******
Ésta obr...
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Error estaba durmiendo.
Disfrutaba de la paz y la tranquilidad, hasta que su teléfono sonó en la red de hilos de algún lugar del techo. ¿Por qué tuvo que crear ese dispositivo infernal?
Un chasquido de sus dedos, y el dispositivo cayó en su mano.
-Papel, a menos que sea urgente, esto-
-¡Ink está en Glitchtale! ¡Encontró a Rouge!
El teléfono fue lanzado cuando Error se precipitó en un portal. No importaba en qué parte de Glitchtale terminara: una vez que comenzara a destruir el mundo, el guardián lo encontraría. Lo más importante era hacer que este ataque fuera lo más doloroso posible.
Las cuerdas azules rasgaron el suelo, las casas, las personas y comenzaron a dividirlas al ritmo, limitado solo por la agilidad y la fuerza del destructor. El primero en reaccionar a los gritos de las personas que morían y al ruido de los edificios que caían fue el Guardián de los Sueños.
Ahora la atmósfera de la ciudad coincidía con el próximo fin del mundo: sangre, muerte y sufrimiento.
Sintiendo el dolor de los demás, Dream obviamente se apresuró a proteger a las personas inocentes e instantáneamente sintió su parte de dolor. Apenas pudo sacar su bastón antes de que su cuerpo volara a un lado, atado en las cuerdas, y su alma fue directamente a las manos del destructor.
-Error, ¿qué estás haciendo aquí? -envuelto en hilos, el guardián de los sueños solo podía ver cómo su alma se apretaba en las manos azabaches, el dolor lo hizo gritar-
El artista no se veía por ninguna parte.
-Siempre me he preguntado a qué sabe la manzana dorada. -dijo Error en voz alta y acercó el alma de Dream a su boca-
Al ver qué tipo de destino le esperaba, Dream no pudo contener un grito:
-¡No! No lo hagas ¡¡¡Ink!!!
Esta vez el guardián lo escuchó.
En el instante en que el artista dejó el ¨Interior¨ y acudió en ayuda de su amigo, el destructor tiró la manzana y esquivó una ola de tinta en el último momento. Un Blaster apareció fuera de la ola y escupió un disparo al destructor, quien no tuvo tiempo de evitarlo.
Sin embargo, Ink, en el nivel subconsciente, no quería lastimar a su amante, y su magia entró en conflicto con ese deseo, lo que condujo a un resultado muy extraño.
-¿En qué lugar del Multiverso has aprendido algo así? -Error se quejó, frotando el arco iris de color de su rostro-
Pero Ink estaba tan atónito como miraba la calle pintada de arcoíris e igual que su destructor. Entornó los ojos al Gaster Blaster que gimió culpable.
