Ink sólo quería tenerlo a su lado.
Lo deseaba.
Amigo o amante - No importaba.
Sólo no quería tener a Error como un extraño.
***
-¿Sabes que hay algo que se llama "obsesión"?
-Sip. Y esa solo es otra de mis locuras. Hola y bienvenido.
******
Ésta obr...
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El glitch pronto se acostumbró a las rarezas de la casa de Ink: el televisor maldito que elegía los canales por sí mismo, las pinturas con movimiento (algo bueno era que no hablaban), los susurros provenientes del corredor. Ni siquiera pestañeó cuando los armarios se abrieron y cerraron, pero todavía se estremeció cuando los pájaros se estrellaron contra las ventanas, dejando sangre y grietas.
Todo esto lo hizo burlarse. Tales fluctuaciones en la magia de la parte blanca del Anti-Void no tenían comparación con las cosas que sucedían en su parte más oscura. El Anti-Void de Error hacía cosas mucho más siniestras.
-¡Ja!. . . Bueno, si piensas eso, entonces tal vez así es realmente. De cualquier manera, nadie tiene una respuesta simple a esa pregunta. . .
-¡Oh! Por supuesto, si tuviera un laboratorio, algo de tiempo y cualquier deseo de tratar con él, podría resolverlo. ¿Pero necesito hacerlo?. . .
-Eso es lo que pienso: ¿por qué molestarme?. . . La curiosidad mató a muchos idiotas, y yo no soy idiota. . . Si un gato dio su vida por la curiosidad, entonces consideremos que esa bola de pelos era un idiota y sigamos adelante. . .
-¿Quién es Lomonósov*? ¿Otra persona que murió de curiosidad?. . . ¡No, no quiero que me leas un poema! Y, de verdad, ¡Jódete con tus consejos y preguntas! ¿Quieres saber a dónde irte a joder? ¡No me importa!
Ink estaba parado en las escaleras, escuchando esas tonterías, y no podía entender: ¿Con quién estaba hablando Error, de qué estaba hablando y estaba bien?
-¿Error?
El destructor se estremeció, agitó las manos como si estuviera espantando una bandada de moscas y se volvió para mirar al artista.
-¿Qué?
-¿Con quién hablabas?
-Conmigo mismo.
-¿Contigo mismo? -Ink no le creyó
-Soy un psicópata asesino y destructor multiversal. Puedo hablar conmigo mismo.
El guardián hizo una mueca y se encogió de hombros: ¿Quién era él para juzgar las peculiaridades de los demás?
Error se levantó, habiendo terminado el títere de su próxima víctima. El destructor estaba completamente vestido y listo para abandonar la acogedora casa del artista.
-¿Vas a regresar? -era lo único que Ink quería saber-
El esqueleto negro se congeló junto a la puerta. Lanzó un largo "hmm" y volvió a mirar a Ink:
-¿Me darás la 'llave'?
Ink lo hizo, y no dijo una palabra cuando notó que la marioneta se parecía a Lust. Él no iba a interferir.
Qué situación. . . tan extraña, tan ilógica y estúpida.
-¡Cállense, todos ustedes! ¡Malditos consejeros! -Error estaba enojado con las voces en su cabeza- Puedo recordarles que esta mierda también fue culpa de ustedes, ¡Así que dejen de gritar! ¡Estoy haciendo lo que creo que es correcto!
