—¡Karol! —gritó Khaterina y se desplomó al lado de ella, ignorando las piedras que se le clavaban en la piel—¡Karol, despierta!
—¿Está viva? —preguntó Agustín que, de pie detrás de Khaterina, tenía los ojos fijos
en el cuerpo tendido de Karol.El cuadro general era bastante pesimista. La piel de Karol se veía casi azul de lo lívida que estaba. Tenía los brazos cubiertos de moretones y rasguños, y sangre reseca en una de las sienes. Los labios estaban cuarteados y resecos, y el cabello todo
enmarañado con algas.Unos segundos después, cuando Khaterina parecía haber perdido toda esperanza,
Karol lanzó un quejido y movió la cabeza hacia un lado—Karol—Khaterinale quitó el cabello de la frente y Karol parpadeó varias
veces hasta poder abrir los ojos.—¿Khaterina? —preguntó, con voz ronca y entrecortada.
—Oh, gracias a Dios —dijo Khaterina, y al suspirar aliviada se le llenaron los ojos
de lágrimas—. ¿Qué pasó?—No sé.
Con evidente dolor, Karol trató de incorporarse, pero las rocas eran demasiado dispares. Al ver que se tambaleaba, Agustín pasó un brazo por debajo de sus piernas y
la alzó. Karol trató de colgarse de él para no bambolearse, pero tenía los brazos demasiado enredados en la red que la
envolvía.—Volvamos al coche —sugirió Khaterina, y Agustín asintió.
Una vez que tomó conciencia de que Karol estaba con vida, Khaterina sintió ganas
de llorar y de gritarle. Pero Karol todavía parecía estar tan débil y aturdida que no
quiso acosarla con preguntas.Khaterina había estacionado lo más cerca posible, sobre el tupido y resistente césped
que cubría la costa. Una vez que llegaron allí, Agustín la dejó en el suelo y Karol se
las arregló para mantenerse de pie por sus propios medios.Estaba bastante enredada en la red, por lo que Khaterina y Agustín tuvieron que ayudarla a quitársela.
—¿Qué es esto? —preguntó Khaterina—¿Quedaste atrapada en una red de
pescadores? ¿Fue eso lo que te pasó?—Esto no es una red —dijo Agustín, quien, una vez que lograron quitársela, la
examinó en detalle, admirado por el extraño tejido—Al menos no una red que yo
conozca.—No, no es una red —respondió Karol, mientras ponía una mano sobre el
coche para no perder el equilibrio, apoyándose con todo el cuerpo—Es un chalo algo parecido.—¿Un chal? —preguntó Khaterina—¿De dónde lo sacaste?—Karol hizo una
mueca, vacilando antes de admitir a desgano:—Valentina.
—¿Valentina? —dijo Khaterina casi a gritos—¿Qué diablos estabas haciendo con Valentina?
—La verdad es que deberías mantenerte alejada de esas chicas —dijo Agustín seriamente—. Son… Tienen algo siniestro.
—Lo sé, créeme —masculló Karol.
—Entonces ¿qué hacías con ellas? —preguntó Khaterina—¿Qué hiciste anoche?
—¿Podemos hablar de esto más tarde? —le rogó Karol—Me va a estallar la cabeza. Me duele todo el cuerpo. Y tengo tanta sed, es increíble.
—¿Necesitas ir al hospital? —preguntó Khaterina.
—No, sólo necesito ir a casa —dijo Karol negando con la cabeza.
—Si estás bien, entonces puedes decirme qué está pasando —dijo Khaterina cruzándose de brazos.

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ᴄᴀɴᴄɪÓɴ ᴅᴇ ᴍᴀʀ. #1 (ʀᴜɢɢᴀʀᴏʟ)
RomanceEnfréntate a un mundo sobrenatural. Un mundo mágico.