Psicólogo Frank [Frerard] Y [Ryden] PAUSADA

014| Fiestas y traumas

F.

- ¿Crees que me veré muy sexy con esto? No quiero que Sarah se ponga celosa porque si uso esto, las demás chicas querrán que las dome – escucho la voz de Brendon algo distorsionada, porque me habla desde el baño.

Ruedo los ojos mientras termino mi tarea, mi investigación acerca de la psicología del psicópata para mi clase de psicopatologías. Llevo diez minutos releyendo lo mismo porque su estupidez no me deja procesar la información. Me molesta.

- O, mejor me pongo unos jeans rotos, ¿no crees? Será algo casual, no como el esmoquin que me quería poner, ese es demasiado formal.

- ¿Eso es lo que has aprendido en Administración de empresas? ¿Cómo es la vestimenta formal y casual? – pregunto sin despegar mi mirada de la computadora.

- ¡Ay puto imbécil! – me lanza mi pelota antiestrés y al golpear mi cabeza, cierro los ojos y bufo en silencio.

No puedo dejar de pensar en el idiota de Gerard y que no debí negarle mi ayuda. DESDE ANTIÉR. Los psicólogos no le niegan ayuda a nadie, estamos para ayudar, somos sanadores ¿Por qué hice eso? Después de todo, él acudió a mí. Bien o mal, pero acudió a mí. ¡Qué imbécil! Este gusano no me permite pensar y no el idiota de Brendon. Alzo la mirada y lo veo mirándose en el espejo del baño, feliz. Hoy es la fiesta de vírgenes en la fraternidad de Sarah.

Hoy es la maldita fiesta. Es decir, estaría bien si quisiera desvirgar chicas, cosa que me resulta repugnante y muy trabajoso (yo no soy perseguidor), ¡pero no! Será una típica fiesta universitaria llena de alcohol, gorilas de futbol, chicas rubias y yo. No me malinterpreten, amo beber y las fiestas; mi problema es la gente que se encuentra ahí. Por lo general son todos los de ingeniería que se creen muy inteligentes y LAES o sea, puros Brendons.

Claro que iré, no me la perdería por nada.

Cuando se comenzó a hacer más tarde y tan solo faltaba media hora para el inicio de la fiesta, me meto a bañar. Brendon se molestó conmigo porque él quería llegar temprano para ver qué chicas lindas había (cosa que no le creí porque es maricón, pero no lo sabe aún) (O se hace pendejo), y que por mi culpa llegaríamos tarde.

- ¡ANDALE, PUÑETAS! – golpetea la puerta como si quisiera orinar y estuviera ocupado - ¡Frank lo haces adrede! ¡Te conozco!

- Vete tú, ¿cuál es tu puto problema? – grito haciendo eco que retumba en mis oídos.

- Que, si me voy sin ti, eres capaz de no ir. Te conozco, mosco.

Ugh, ¿te conozco mosco? ¿Qué es esto? ¿El Kínder?

- ¿Y bañarme para nada? ¿Estás tonto? – contesto mientras me enjabono.

- ¡Ok, me largo a la verga!

Uy, ya confesó.

++

Llegué a la fiesta con una hora de retraso. Si no iba a elegir a una virgen a la cual desvirgar, ¿entonces a mí de qué me servía llegar temprano? Además nadie sabe, pero tengo una ansiedad social tremenda, una cosa es que finja y otra es que por dentro realmente me sienta MAL alrededor de toda esta gente. Mi profesor favorito me dijo que, si quería tratar ese problema, me regalaría terapia, pero hasta la fecha lo he evadido constantemente. Y me siento terriblemente incómodo cada que entro a una fiesta de la universidad.

Pero, como me considero un maestro (A comparación de todos estos idiotas que no saben nada de lenguaje corporal, así que tengo la ventaja) fingiendo con mi rostro. Lo primero que hago al entrar es sonreír como si fuera mi hábitat natural. La casa está llena y no es como que me convierto en el centro de atención, realmente no sé a quién estoy buscando así que me pongo como objetivo encontrar las bebidas alcohólicas donde me podré refugiar de mis propias inseguridades.