–¿Puedo pasar? –preguntó Singto con una tímida sonrisa.
krist contuvo el impulso de cerrarle la puerta en las narices. Habían pasado dos semanas desde el vuelo de rescate en el sur, tras el que Krist se había llevado a Bass y a Fiat a su casa.
–La verdad es que preferiría que no –dijo con gesto digno.
Singto miró por detrás de el y dijo:
–Veo que estás empaquetando. ¿Te vas de Bangkok?
–Sí. A Chiang Mai, con Bass y Fiat. Allí tiene amigos y también hay buenas universidades.
–¿Está contigo?
–Ha ido a dar una vuelta con el niño.
–¿Me dejas pasar?
–Ya lo has preguntado y he dicho que no.
–Deja que te ayude con las maletas.
–No necesito ayuda.
–Esas cajas parecen pesadas –insistió Singto, pero su sonrisa cautivadora no surtió efecto en Krist.
Desde que le había dejado claro que no quería que nada interfiriera en su vida, Krist había decidido que tampoco lo quería a él en la suya. Pero no podía resistir la tentación de demostrárselo. Con un gesto condescendiente, le indicó que entrara.
–¿Qué tal está Bass? –preguntó él mientas el continuaba desmontando una estantería.
–Mejor. Es un muchacho inteligente que ha cometido un error. Pero cuando veo a Fiat tengo que reconocer que me alegro.
Singto tomó un destornillador del suelo y empezó a quitar la estantería más alta.
–¿Se sabe algo de su novio?
–No, no quiere a nadie en su vida –dijo Krist, lanzándole una clara indirecta.
Singto no pareció notar el sarcasmo y el recogió una pila de libros y los metió en cajas.
–Lo siento, pero tengo mucho que hacer.
–Te estoy ayudando.
–Me estás retrasando.
Singto dejó el destornillador y fue hacia el. Krist pensó que había olvidado lo alto que era, pero no estaba dispuesto a dejarse intimidar... ni seducir. Singto se frotó la nuca y dijo:
–El otro día me porté muy mal. No estaba pensando con la cabeza.
–No te preocupes, N'Bass no te lo echa en cara.
–O puede que comprenda que necesitaba reflexionar.
Singto dio un paso hacia.
–Quizá yo debería ser igualmente comprensivo, pero sigo estando demasiado enfadado.
–Era una proposición de tal responsabilidad que no supe reaccionar.
–Hay veces que uno debe implicarse y actuar.
–Por eso estoy aquí.
Krist dio la espalda a Singto, y mientras bajaba un cuadro de la pared, dijo:
–Tendrás que hablar directamente con N'Bass de la oferta económica que quieras hacerle.
–No es eso de lo que he venido a hablar. Al menos, no exclusivamente. He venido a preguntarte algo.
Krisy se sintió mareado, y dio media vuelta.
–¿El qué? –preguntó con fingida calma.
–Si Fiat todavía necesita un padre –Singto se encogió de hombros–, aquí me tiene.
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[Terminado] Repentino Amor
FanfictionRepentino Amor Singto Prachaya creia que el enfocarse en lograr el exito era el unico objetivo en su vida, no habia espacio para nada más, hasta que un dia encuentra una sorpresa inesperada. lo que no sabia es que esta pequeña y linda sorpresa lo ll...