Capítulo 31

25.3K 4K 1.7K
                                    

Capítulo 31: habla de mi extraña manera de pensar o arreglar mis problemas.

YoonGi me miraba fijamente, con los ojos entrecerrados. Yo nada más estaba sentado sin decir palabra alguna, enmarañado con las extrañas (pero satisfactorias) cosas que me estaban sucediendo.

      — Entonces, ¿él no vino hoy porque está enfermo? —me preguntó Yoon curioso.

      Asentí unas veces. Vi entrar a SeokJin con tranquilidad, abriendo los ojos con impresión al verme ahí sentado. Era de esperarse. Después de aquella extraña escena, la de "elige a quien tú quieres", JungKook y yo pasamos el resto de día extrañamente tranquilos, no tenía de qué quejarme. No fue hasta esa mañana.

     — ¿No vino quién? —cuestionó SeokJin tomando unos papeles de su escritorio.

     — No vino JungKook, está enfermo —responde YoonGi antes de dejarme hablar.

     — ¿En serio? Qué raro, siempre que JungKook enferma TaeHyu... Un momento... ¿De qué está enfermo?

      Rasqué mi nuca, moviendo la mano buscando alguna respuesta lógica. La verdad es que no lo sabía. Ni siquiera tenía la certeza si estaba enfermo, es solo que lo vi algo decaído una tarde antes y supuse eso, de todas maneras no sería la gran cosa. En la mañana ni siquiera salió a decirme algo, y tenía suficiente vergüenza como para pasar a verlo a su casa.

     — Mm, no sé... Dolor de cabeza.

     — ¿Estás ignorándolo de nuevo?

     — Claro que no —respondí a mi amigo de hombros anchos—. Es solo que no quise verlo hoy en la mañana.

      Puede que JungKook actuara "normal" después de "terminar" con San. Por otro lado, yo conocía a ese chico más que a nadie en el mundo, y claramente él no estaba bien. Era entendible. Después de todo ese discurso doloroso de "Hasta que me centré en alguien más", imaginaba que no sería tan sencillo lidiar con esa persona.

      JungKook me hablaba con el mismo tono, me sonreía como siempre, y por dos días consecutivos viajamos a la misma hora a la escuela. Pero esa mañana, JungKook ni siquiera bajó de su habitación. Incluso cuando fui a preguntarle a su madre qué tenía, y me dijo que tan solo estaba cansado, aunque me invitó a pasar pero yo, como siempre, no lo hice.

      — TaeHyuck, me estás diciendo que incluso cuando te prefirió sobre otro, ¿tú simplemente no puedes dar el primer paso?

      — Error —le dije a YoonGi alzando mi dedo—. Yo ya di el primer paso, fui quien dijo las palabras mágicas.

     — No, JungKook lo hizo antes... Y como cuatro veces —Jin seguía con la vista fija en sus papeles.

      — Sí, además, él salía contigo incluso cuando San estaba aquí, te hizo caso con lo del básquetbol y... Es cierto, ¿por qué no vas y le propones hablar del tema?

      Soy alguien complejo. Me da miedo dar el primer paso, me da miedo proponer hablar, me da miedo incluso estar cerca de JungKook y dejar que sepa todo lo que siento. Era así de fácil. Soy tan indeciso, como egoísta, como miedoso. Prefería esperar que él me propusiera hablar... Porque, ¿Y si no era el momento indicado? ¿Y si yo estaba confundiendo las cosas?

       Permanecía ahogándome en un vaso de agua, porque era inseguro cuando se trataba de la persona que me gustaba, que amaba.

      — No sé si hacerlo, no fue hace tanto tiempo que...

      — Es mejor si afrontas el problema —dice SeokJin suavemente.

      Lucía así de fácil, es más, muchos creen que es tan fácil como desahogar el tema, hablarlo, superarlo. No... Quizá sí me ahogo en un vaso de agua, probablemente quien me vea se burla de mí por ser alguien que complica las cosas a niveles exagerados, sí, pero no me importaba. O importará. Porque dar pasos en falso sin saber qué decir, hacer, o cómo reaccionar, era malo.

     Por fin aprendía algo de aquel nuevo JungKook, lo de ser "mesurado", "pensar las cosas". No tenía ningún sentido soltar palabras estúpidas sin significado, así como mis quejas sobre "me molesta esto, me molesta el otro", dejando de lado lo que yo de verdad deseaba decir.

      — Es que yo... No sé qué decirle, Jin.

     En todo caso, ¿cuál era la prisa de liberar todo de una sola? Tenía miedo, ¿por qué debo actuar así, si tengo miedo de salir herido?

      — TaeHyuck, no estoy muy seguro de ello pero... Parece ser que a JungKook de verdad, verdad, le gustas.

     SeokJin miró algo confundido a YoonGi, y yo también. Es decir, él siempre decía cosas de ese tipo, pero no con ese grado de sinceridad. Él simplemente nos arrugó la nariz, alzando sus hombros a la vez que ponía los ojos en blanco.

     — ¿Por qué piensas eso? —pregunté.

     — TaeHyung... —me habló ahora SeokJin, incrédulo—. ¿Qué más quieres? ¿Tú nombre escrito en el cielo? Te hace caso en todo y tú...

      — ¡JAJA, SÍ! —ríe YoonGi—. TaeHyung lo ignora, jamás superaré eso.

      Era difícil estar con las representaciones de las partes poco racionales de mi cerebro, me pregunté de pronto dónde estaba NamJoon. Terminé por olvidarlo, también pensando en lo que ellos me decían. Mi discurso de "dar pasos en falso" de pronto me pareció algo tonto. Si yo tenía una oportunidad, por más mínima que fuese, ¿qué estaba esperando? ¿Mi nombre escrito en su frente?

     ¿Por qué mierda todo era tan difícil cuando te gustaba alguien? Procuraba sentirme perfectamente bien, y decir todo lo que mi lengua retenía, pero no, no, no. Era un total experto en encerrarme y me molestaba, salía apenas de mi extraño refugio, pensaba que por fin dejaría de ser estúpido, y regresaba a mi lugar. Admiro a esas personas tan seguras de sí mismas, que le hablan a quien les gusta, y les importa poco lo que pueda suceder. Era como un superpoder no sentirse tan presionado por la idea de ser rechazado, a diferencia mía, que simplemente lograba hacerme detener.

     Pero yo era tan indeciso como bipolar.

     — Debería hablar con él, ¿no?

     — Mmm... ¿Duh? —suelta YoonGi, muy obvio—. Tampoco te presiones, las cosas te salen mal cuando te presionas.

     Por otro lado... De repente una persona tan insuperable se posó en mi cabeza. De pronto, me surgieron dudas, sobre San. ¿Ven por qué yo no puedo lidiar con mi propio cerebro? Entonces, ¿el triángulo amoroso existía o no? ¿Ese ser malévolo se rindió tan fácilmente con JungKook? ¿Ya no pasaría nada más con él? ¿Puede que estuviera herido porque lo dejaron de lado?

      A decir verdad, probablemente si estuviera en su lugar, me sentiría un tanto derrotado, sobretodo ese orgullo de oro y su egoísmo que parecía más fuerte que el de todos.

     — ¿Vas a hablar con él?

      — Tengo que hacerlo —digo simple, sin mucho rodeo—. Pero puede esperar.

       — ¡Claro! —menciona SeokJin quitándose el saco y tirándolo por la silla—. Casi se enamora de alguien más, ¿en qué afecta seguir esperando?

     YoonGi y yo lo observamos graciosos, por ese tono de adulto exasperado que se mantenía escondido en algún punto de su voz. Jin nos miró de vuelta y nos alzó las cejas, casi pareciendo un maestro de la obviedad. Así que, bueno, tendría que hablar con JungKook, de nuevo, y repetir este constante bucle donde lo que quiero no sale como lo pienso.

      — Por cierto, ¿recuerdas ese chico que estuvo en el mismo internado? —pregunta mi amigo, el mayor, colocando una hoja en el escritorio—. Se llama Jimin, Park Jimin.

      Antes de hablar con JungKook, tenía algunas dudas que resolver.







🐥 dedicado a : aqmduvy FELIZ CUMPLE.
     

     

   

Hated Friend » KOOKVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora