☮Distintos universos☯

✞

El timbre sonó y daba a mi apartamento. Así que baje las escaleras velozmente, deseando que al abrirla, sea la rubia. Pero no, era Carolina. 

-¿Que haces aquí?

-¿Esa es tu forma de decirme HOLA?

-Bueno pero...-Proteste. Pero me callé y la observé, traía un vestido floreado realmente bonito, y le quedaba perfecto. Me sentí mal por pensar en ella, con cariño. 

-Deja de mirar mi escote Ashton. 

-¿Que?-Pregunté irritado. 

-Vine para traer tu ropa, la que me prestaste...-Carolina me mostró una bolsa blanca y yo la agarre con un poco de desconfianza. 

-Entra... hace demasiado calor para quedarnos afuera charlando.-Ella sonrió, y los dos subimos las escaleras, luego al abrir la puerta entramos.-Siéntate-Deje la bolsa en una mesa ratona y luego me acomode en el sillón, a su lado. 

 -¿Entonces? ¿Que te parece que este de nuevo contigo?-La miré confundido, no entendía muy bien lo que quería decir con de nuevo, conmigo.

-¿De que hablas?-Tome un poco de distancia, subiendo mis pies arriba del sillón. 

-Hablo de que ¿te gustaría volver conmigo? Aunque tu deberías de ser la persona que me lo diga, no yo. Pero te perdono.-La miré con los ojos abiertos, impresionado y hasta confundido. 

-No, no, lo siento pero no. Tu me descartaste como basura, y ¿ahora? ¿que? No, no quiero. Perdón. 

-¿Que dices? No seas idiota Ashton.-Se puso de pie y tomo un adorno de vidrio que le regalo el novio de mi hermano a él y lo levanto en el aire, dispuesto a estamparlo contra el suelo. Entonces la agarré de la muñeca con un poco de fuerza y le saqué el adorno. 

-No es mi culpa, tu... me confundes, no puedo hacer como si no paso nada. No puedo, y no quiero. 

-El problema lo tienes tu, los demás hombres nunca se han quejado de mi. Así que... 

Camine hacia la puerta, aferrado a la muñeca de Carolina para arrastrarla hasta fuera de mi departamento. Bajamos las escaleras, aunque ella estaba furiosa y decía un par de insultos hacia mi. Cuando introduzco la llave en la puerta y la abro, me encuentro con la rubia cruzada de brazos, tenía la boca abierta y me miraba confundida, al igual que yo. 

-Hola-Dije como un tonto enamorado, y Carolina me tomo de la cintura, abrazandome con violencia. 

-¿Ella es?-Preguntó, se estaba haciendo pasar por mi novia. No me lo creo...

-No sé que hago aquí, mejor me voy-Me solté de Carolina y me acerqué a la rubia. Esta aun parecía tener palabras en la boca, pero rápidamente se safo de mi y comenzó a correr hasta su edificio. 

-¿Pero que haces? No quiero saber nada más de ti. ¿Que te sucede?-Le grité a Carolina, esta comenzó a llorar y me sentí realmente mal.-Oye lo siento, perdóname, es que no sé porque haces todo esto, es inútil. Mejor ve a casa ¿si?-Trate de suavizar mi tono de voz pero ella solo me empujo débilmente y comenzó a caminar velozmente. 

Cruzé la calle y llamé a casa de la rubia, me atendió su hermana. Y eso me irritó. 

-Eh, ¿como andas Ashton?

-Bien Nuria, ¿y tu?

-Pues con calor, demasiado calor. 

-Dímelo a mi, que estoy en el rayo del sol-Dije apurando la conversación. 

-Pues jódete. ¿Paso algo?

-¿Te molesta si puedes decirle a tu hermana que baje?

-¿A Bl...?

-No quiero saber su nombre-Le grite al timbre, escuche una risa y termino accediendo. 

Pasaron unos largos minutos asfixiantes, y la puerta se abre, entonces la rubia salé luciendo igual que hace un rato, solo que con los ojos un poco rojos. 

-¿Que pasa Ashton?-Preguntó ella con casi odio hacia mi. 

-Solo quería aclararte que esa chica era mi exnovia, esta loca, realmente desquiciada, no es nada. 

-Bien-Ella sonrió. 

-Lo digo en serio, no pasa nada con ella. 

-Bueno, pero ¿que?

-Pensé que te habías enojado, o puesto celosa-Le dije, esta se sonrojó e intento cubrirlo con su cabello rubio. 

-¿Celos? ¿Enojarme? No, no eres nada. No te hagas el importante, galán de novela barata-Sonrió. 

-¿No te gusto ni un poquito?

-Absolutamente nada, prefiero llenarme de cucarachas antes que... quererte.-Ella elebo sus cejas. 

-Cuando sepa que me quieres, te traeré una caja de cucarachas y la vaciaré en tu cabeza.

-Oh, sigue esperando Ashton... porqué es imposible. 

-Nada es imposible-Le dije sonriendo. 

-Algunas cosas si son imposibles, inalcanzables y misteriosas. 

-Bueno, pero cuando mientas no te sonrojes, porque así queda a la vista que me quieres. 

Quedo mirándome petrificada, y comenzó a reír. 

-Me sonrojo cuando digo la verdad-Río, y me parecía imposible toda esta situación y encantadora a la vez. 

-Hace calor, ¿mañana vamos a la piscina? o ¿prefieres las cucarachas?

-Las cucarachas, dejalo ya Ashton-dijo seria, y me enloquecía. 

-Mañana  espero verte lista a eso de las cuatro. 

-No voy a ir a ningún lado contigo. 

-Lo harás o... tendré que buscar cucarachas por todos lados. 

-Suerte-Ella sonrió y se metió dentro del edificio, dejándome con las ganas de besarla, abrazarla y decirle que la quería, en serio...