Un Misterio en Berk

Capitulo 1: El inicio del fin

=Astrid=

Miro a través de la ventana del auto, el sol me ilumina mi rostro y lo único que escucho es la música que está sonando proveniente de la radio.

Llegamos a un vecindario, casa de todos los tamaños, distintas, pero a la vez tan similares, para fortuna de todos estas tienen su distancia, se nota el ambiente pacífico y tranquilo.

-Llegamos- me dijo mi madre.

Salí del auto con mi cámara en mano, el viento helado choca contra mi lo que hace que se me erice la piel, la casa tiene una linda entrada con un pequeño camino con piedras acompañado de un césped verde.

Entro y lo primero que veo es un pasillo que me muestra de inmediato la escalera, a mi derecha una puerta que me conduce a la cocina que comparte junto a un agradable comedor y a la izquierda se encuentra la sala.

Subo las escaleras lentamente, estoy agotada el viaje fue muy largo, al llegar a la planta alta se visualizan unas cuatro puertas, donde tres de ellas son habitaciones y la restante es el baño, Ingresó a una la que está más cerca de la escalera.

Esta es simple, una cama una ventana lo usual nada en especial. Fui a la que está al medio abro la puerta y de inmediato veo una ventana, luego mi vista se posa en otra ventana que está en el techo arriba de una cama que ya estaba puesta.

Supondré que la otra es la matrimonial y todavía no pienso en eso.

Me acuesto boca arriba observando a través de la ventana ubicada en el techo, es un lindo día de verano, aunque el viento hace que pareciera otoño esta pequeña isla es muy helada a pesar de su potente sol.

Suspiro.

Nueva casa, nuevas oportunidades, nueva escuela y nuevos idiotas que se entrometen en mi vida.Tal vez se pregunten si cambiare, porque como dicen: Empezar de cero, pero la respuesta es simple no, seguiré siendo yo misma, me encerraré a perfeccionar mis talentos y mis pasiones y no lo hago por ser tímida, no, claro que no, soy todo menos eso, pero no me agrada la gente entrometida que me puede apuñalar por la espalda, no me agrada el cinismo y la hipocresía de la gente, así que me lo ahorro al no juntarme con ellos.

Ahora les contare un poco sobre mi, soy Astrid Hofferson, tengo 15 años, pasion la fotografia desde que tengo memoria y recién me mude de California a Berk por una oferta de trabajo para mi padre, ahora mis padres están:

Arthur Hofferson, alto, pelo rubio y ojos oscuros, que muestran firmeza y rigidez y ¿cómo no? si es el director de la escuela en la que ahora voy a asistir, mi relación con él es un poco complicada, siempre discutimos a veces ni sé como empezamos, pero de igual forma es mi padre y lo quiero, por otro lado está Angela Hofferson, con una cabellera larga y castaña, con unos ojos azules como los míos, que suavizan a cualquiera o eso creo, pues funciono con mi padre, mi relación con ella es increíble, es mi única y mejor amiga, lo sé suena un poco penoso, pero no me importa soy feliz con ello, literalmente, ella es el balance en esta familia.

Salí de mi ya asignada habitación con mi cámara colgando de mi cuello, salgo a la calle donde está el camión de mudanza, apunto con mi cámara a mi papá que está recibiendo unas cajas, enfocar y capturar la imagen, luego apunto a mi mamá que está entrando a la casa con un ramo de flores para "darle vida a la casa" o como ella diga, pero como siempre ella sonriendo. Me acerco al camión de mudanza para colaborar en algo y de paso llevar mis cosas sanas y salvas a mi habitación.

-Siempre te quejas de lo que digo o hago-reclamo a mi papá, no les dije siempre peleando

-Pobrecita-me dice fingiendo lastima por mi y a la vez haciendo una mueca triste