18. Secretos escondidos

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C A P Í T U L O       D I E C I O C H O

Secretos escondidos


 Estoy terminando el proyecto que tengo pendiente desde hace días cuando un toque en la puerta me desconcentra.

Me pongo las pantuflas y abro la puerta. Entreabro la boca, por sorpresa de ver a Clark y sus amigos, pero más que nada por ver que están cargando un mueble. 

—¿Qué…?

—Hola a ti también, Adams. Sé que tienes preguntas, pero esto está un poco pesado…

—¿Un poco? —gruñe Leister.

—¿Nos dejas pasar? —concluye Clark.

Abro la puerta por completo y los veo atravesar con dificultad. Recojo los libros que hay en el piso con prisa y los pongo sobre la cama con cuidado. 

—A la derecha Taylor.

Taylor va hacia la izquierda.

—Tu otra derecha —explica Clark.

Asientan el mueble y lo apoyan contra el espacio libre junto a mi escritorio. El mueble queda perfecto en el único espacio que tengo libre de la habitación. 

Muevo las manos en el aire señalando el mueble.

—¿Qué…?

—Es para ti —dice Clark con una sonrisa y con las manos sobre su cintura. 

—¿Qué…?

—Nosotros colaboramos también —indica Leister, sujetando el hombro de Taylor. 

No puedo ni hacer una sonrisa, porque sigo sorprendida de todo esto. Es una locura. 

Balbuceo un poco antes de decir:

—Gracias. 

Clark me sonríe, dando un paso más cerca. 

—Ahora tienes dónde poner tus libros. 

Volteo viendo el estante que tiene un diseño sencillo pero muy eficiente. Está pintado de lila con algunas salpicaduras blancas. 

—Eh, eso fue un fallo. —Clark pasa la mano por la pintura blanca—. Espero que te guste. 

Ladeo la boca con ternura. Sujeto su mano, que tiene aún pintura lila en las uñas y me pongo de puntillas hasta quedar cerca de sus labios.

Me encanta la bandana que lleva en el cabello, evitando que caigan las hebras rebeldes sobre su frente. 

—Es perfecto. —Mis labios tocan los suyos, con lentitud, con calma, profundizando poco a poco el beso. 

Sus manos aprietan mi cintura y las mías se ciernen sobre su cuello, jugando con su cabello. 

Alguien tose y me alejo de Clark.

—Gracias —les digo a los amigos de Clark con las mejillas sonrojadas. 

Taylor asiente la cabeza y Leister sólo sonríe.

—No quiero romper el hermoso momento que tienen, pero tengo que regresar a casa porque voy a encontrarme con Summer. —Se toca la muñeca—. Clark, tic, tac. 

—¿Nos vemos? —susurra Clark. 

Asiento la cabeza. 

—Claro que sí. 

—Mhm… me encanta esa sonrisa. —Me da un beso rápido, da la vuelta y empuja a sus amigos hasta llegar a la puerta—. Me envías una foto cuando los libros estén arreglados. Y después una foto contigo a lado de los libros. Y una foto de la sección que más te gusta. Y luego una con tu libro favorito…

El amor a colores ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora