Respiré profundo una vez más, estaba parado en la puerta de la casa de mi vieja, había venido sin avisar así que rogaba que esté.
Doy un paso más y por fin me animo a tocar el timbre, escucho que suena y me quedo esperando.
—ya va—gritan y puedo reconocer que es su voz.
La puerta se abre y siento que lo hace en cámara lenta, levantó la mirada a ella, su reacción fue quedarse con la boca abierta mirándome fijo, puedo ver como sus ojos se cristalizan.
Sus facciones están cambiadas, al igual que su pelo, se lleva la mano a la boca y veo que está temblando.
—hola—digo casi en un susurro, ella sonríe ampliamente y se acerca un poco
—hola mi amor—contesta con la voz entrecortada y las lágrimas empiezan a caer por sus mejillas—ay perdón—se limpia las lágrimas—pasa hijo por favor—se corre a un lado.
Sonrió un poco y entró, respiro profundo y mis ojos se cierran recordando miles de momentos que viví en esta casa.
—quien era amor?—escucho la voz de un hombre, la miro a ella que agacha la cabeza.
Mis ojos ven a un hombre acercarse a nosotros, de unos 40 y tantos, me mira sorprendido al parecer él si sabe quién soy a diferencia mía que no se quien es.
—él es Eduardo—habla mi vieja mirándome—mateo mi hijo—le dice a él.
—hola, un gusto campeón—me extiende la mano.
—hola, el gusto es mío—correspondo su saludo.
No me molesta que haya rehecho su vida, en fin tanto mi viejo como ella se merecían ser felices con alguien más ya que juntos no pudieron.
Esto ya lo sabía pero nunca lo había visto y Emi como mi papá no hablan sobre él, supe que hace poco están, creo que unos 7 meses.
—Nos podés dejar solos por favor—le pide mi mamá.
—si claro, me llevo a Emi querés?—le contesta él.
—donde está el enano? Lo quiero ver—hablo.
—arriba en su pieza—contesta mi mamá—pasa tranquilo hijo, es tu casa también—dice apuntando las escaleras.
Asiento y subo escuchando que susurran claramente por mi presencia.
Llegó a la puerta que está entreabierta y lo veo jugando a la play.
—estas practicando para poder ganarme?—pregunto entrando a la pieza
—Mateo—grita y se acerca rápido a mi abrazándome.
—enano te extrañe—le digo en el abrazo.
—yo también, al fin viniste, mamá también te extraña, vení vamos con ella—me agarra la mano
—para alborotado—lo estiró hacia mí—vine a verte y a hablar con ella, así que tranquilo—lo despeino un poco y se ríe.
—bueno vamos entonces—me hace reír.
—vos vas con Eduardo un rato así yo hablo con mamá y después te llevo al McDonald's querés?
—si McDonald's si—grita festejando.
—bueno vamos—lo agarró de la mano y bajamos juntos.
—mamá Mateo me va a llevar a McDonald's—dice contento
—buenísimo hijo—contesta ella.
—vamos campeón?—le dice Eduardo
—si vamos—contesta él
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Luz // Trueno // #2da parte de "Impredecible"
Fiksi RemajaHoy puedo entender que hay gente que es Luz y gente que es sonido. Los que son sonido son esas personas que hablan mucho, te entregan el cielo con palabras y vos te comes el cuento que al final resulta ser que solo eran palabras vacías. Los que son...